El origen de la Asociación Siempre Madre se remonta a 2020, un año marcado por la incertidumbre de la pandemia. Nació con una misión urgente: dar respuesta a aquellas mujeres que debían afrontar la maternidad en un contexto de extrema vulnerabilidad y carencia de recursos. Lo que comenzó como un auxilio inmediato ante la crisis sanitaria, se ha transformado hoy en un proyecto consolidado. En apenas cinco años, la asociación ha logrado tejer una sólida red de alianzas que involucra a voluntarios, empresas colaboradoras y donantes. Esta sinergia colectiva es la que permite que cientos de familias no solo reciban una ayuda puntual, sino un acompañamiento continuado, garantizando estabilidad y dignidad en la crianza de los hijos de cientos de mujeres.
La labor de la entidad aborda la vulnerabilidad desde tres frentes críticos. En primer lugar, la organización garantiza la cobertura de suministros básicos, gestionando la entrega de bienes esenciales como leche de fórmula, pañales y equipamiento infantil, artículos que a menudo suponen una barrera económica para las familias.
Más allá de la asistencia material, la entidad apuesta por el acompañamiento personal durante la crianza, ofreciendo un soporte emocional clave en los primeros años de vida. Este círculo de apoyo se cierra con un programa de formación e inserción laboral, diseñado para dotar a las madres de las herramientas necesarias para alcanzar una autonomía real y sostenible.
Hoy, la asociación se ha convertido en un recurso vital para más de 200 familias. Para ellas, la intervención de Siempre Madre representa la diferencia entre la precariedad extrema y la seguridad de que las necesidades nutricionales y de desarrollo de sus hijos estarán cubiertas.
© Asociación Siempre MadreUna velada que marca un nuevo comienzo.
El pasado 1 de diciembre, la Asociación Siempre Madre consolidó su presencia en la capital con la celebración de su primera gala benéfica. Tras reunir a más de 250 invitados, la organización ha dado un paso decisivo en su estrategia de visibilidad, eligiendo como escenario uno de los exclusivos espacios del Grupo Mentidero en Madrid.
El evento, concebido como un punto de encuentro para colaboradores, voluntarios y amigos de la asociación, destacó por su capacidad de convocatoria. La conducción corrió a cargo de Michi Primo de Rivera, quien aportó su característico dinamismo y cercanía, logrando un equilibrio entre el entretenimiento y el reconocimiento a la labor de las protagonistas de la asociación.
La velada alcanzó su punto álgido con la actuación del coro Laraland. Sus voces no solo cautivaron a los asistentes, sino que cargaron el ambiente de una energía especial, cerrando con broche de oro una cita que posiciona a Siempre Madre como una entidad de referencia en el sector.
© Asociación Siempre MadreEsta primera gala no ha sido un evento más en la agenda social; representa un verdadero antes y un después para la asociación. El éxito de la convocatoria trasciende lo económico: aunque la recaudación es vital para sostener y expandir sus programas de ayuda, el verdadero triunfo reside en la visibilidad alcanzada.
El encuentro fue, ante todo, una invitación directa a la reflexión. Los asistentes se detuvieron frente a una realidad que a menudo permanece invisible: la de aquellas mujeres que, sin recursos, luchan a diario por sacar adelante a sus hijos. Gracias a iniciativas de este calibre, la asociación logra consolidar una estructura capaz de dar respuesta a una demanda creciente y de complejidad técnica cada vez mayor, reafirmando su compromiso con quienes más lo necesitan.
