Un 'pied-à-terre' moderno, sofisticado y ‘arty’ en el corazón de Barcelona
Los 68 metros² de este piso en el barrio de Sant Antoni parecen multiplicarse con muebles a medida y texturas que reflejan la luz
Reorganizar espacios sin tirar paredes no solo es posible, sino que posibilita una reforma más rápida y económica. Es lo que ha ocurrido en la renovación de este piso de 68 metros² del valorado barrio de Sant Antoni, en Barcelona, un proyecto que han encabezado los arquitectos e interioristas italianos Matteo Colombo y Andrea Sérboli.
En la entrada de este pied-à-terre para un diseñador de moda alemán se ubica parte de la cocina, antes emplazada en la actual zona de salón. Aquí destaca el cuadro buen rollista que nos recibe tan solo franquear la puerta, es la primera obra que vemos de la interesante colección de arte que exhiben las paredes. Los artífices del proyecto explican: “que los espacios generen una sensación positiva, a menudo se debe a la coherencia entre los detalles y a un diálogo constante entre sus elementos: jugar con los contrastes, enfrentar elementos más nobles con elementos más espartanos, utilizar colores que sean sobre todo texturas y diseñar hasta el último detalle, creemos que son recursos que seguramente ayudan”.
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Efectos con colores y acabados
El mueble de la entrada, de color negro azulado, crea un fondo muy oscuro para toda la zona de estar. Se eligió ese color sombrío para visualmente empujar el fondo más atrás, alejar la pared de paso a las habitaciones y crear un mueble contenedor a medida en toda la pared para el recibidor.
A pesar de sus menos de 70 metros² el piso se rentabiliza mucho y cuenta con salón, comedor y cocina compartiendo espacio, dormitorio de invitados que es también despacho, aseo de cortesía hasta con ducha, dormitorio y su baño en suite. ¿El secreto? “Hemos maximizado los espacios a través el empleo de mobiliario a medida que nos ayuda a mejorar el uso de estos. Aparte, se eligieron algunos materiales de texturas reflejantes (el aluminio cepillado y los espejos) para dar una sensación de mayor amplitud de los ambientes y rebotar la luz”, explican los artífices del proyecto.
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Un estilo exquisito
El propietario solicitó que se emplearan materiales ‘reales’, de ahí que se seleccionen el mármol, la madera (por ejemplo, la del suelo es un roble) y el metal. Las piezas de arte y de mobiliario que deseaba que albergaran en este piso ha sido también otro elemento para la creación. El resultado final es unos espacios de estilo sofisticado, que tienen un punto industrial.
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Aspecto que se transforma a lo largo de la jornada
El mobiliario de cocina es de aluminio cepillado, no solo como hemos señalado, para que se refleje suavemente la luz dentro del espacio, sino por su practicidad a la hora de limpiar y, más especialmente porque genera un interesante juego de tonos que varían en función de la hora del día.
¿Cocina abierta? Los arquitectos e interioristas sí son grandes defensores de esta opción. “Seguramente ese ‘exhibicionismo’ es más fácil si se hace la cocina a medida, dando la posibilidad de generar elementos más escultóricos, por forma o material”, cuentan. Además otro argumento a favor es que consideran que este espacio es cada vez más social.
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Estilo y holgura
Tanto el salón como el comedor se hallan en la zona más luminosa, sin tabiques separadores. Este espacio refleja lo gran apasionado del arte y el diseño que es el dueño: amueblado con piezas como el sofá de cuero coñac ‘Costura’ de Stua (diseño del hijo del fundador de la marca, Jon Gasca), coronado por dos grabados del francés Ronan Bouroullec y flanqueado por mesas auxiliares ‘Slit’ de HAY en latón y blanco.
Matteo y Andrea recuerdan como incomprensiblemente antes la cocina ocupaba esta gran área, apenas dejando espacio para el salón.
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Rincón verde
Recibiendo bastante luz natural se sitúan tres plantas de distintos tamaños, frente a la puerta de acceso al balcón. En la maceta en el suelo destaca la orejas de elefante (Alocasia california) con hojas muy grandes. La suculenta se sitúa sobre una mesa auxiliar y, la otra variedad en una maceta con patas, una alternativa que está de rabiosa actualidad.
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Comedor mínimo
La pequeña mesa plegable del rincón del comedor está hecha a medida con los mismos paneles lacados en azul negro y mármol que el bloque de entrada. Flanqueada por una silla vintage diseñada por el barcelonés Óscar Tusquets. Se configura así un comedor muy reducido, típico en los pied-à-terre. No tan habitual es que se refleje en estos pisos tanta sensibilidad por el diseño. Por ejemplo, el colorido cuadro es obra del cotizado Albert Madaula y se instala la icónica lámpara de sobremesa ‘Atollo’, creada por Vico Magistretti en 1977 y que edita Oluce.
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Despacho y mucho más
Si se flanquea la puerta camuflada del mueble negro azulado que veíamos al inicio del reportaje, se accede a la zona de noche. Esta es la habitación-estudio, que puede utilizarse a diario para trabajar o como zona de lectura o gimnasio. El mobiliario de la oficina en casa lo conforman un escritorio hecho a medida y la silla plegable vintage ‘Dafne’ de Gastone Rinaldi para Thema. En la esquina una escultura de Coté Escrivá.
El mueble de almacenaje lacado en beige de este ambiente esconde una cama doble plegable, para cuando se necesita darle un uso de dormitorio de invitados.
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Un singular baño
Los arquitectos italianos consideran que ha sido muy importante la transformación del aseo convertido ahora en una wet-room. El propietario necesitaba tener una segunda ducha y no se debían mover las instalaciones existentes, así que esta ha sido la decisión tomada para equiparla.
Se trata de un pequeño cuarto de baño con hornacinas en el que destaca el anillo de luz hecho a medida y que significa el grifo de la ducha.
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Hacer ‘crecer’ los metros
El dormitorio principal tiene una significativa falta de espacio, aunque se emplean diversos trucos para disimularlo. Por ejemplo, se diseña un cabecero de cama envolvente con apliques (el modelo ‘Mirbi’ regulable en intensidad, de Wever & Ducré), puesto que se debe prescindir de unas grandes mesitas de noche. Pero, además, la línea horizontal de este elemento fabricado en nogal genera una sensación de mayor amplitud.
Las dos grandes puertas correderas acanaladas, lacadas en una tonalidad clara, ocultan el armario ropero de gran capacidad.
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Pasión por las curvas
El mismo mármol de la cocina se utiliza para embellecer el cuarto de baño de la suite, mediante una preciosa encimera bajo un espejo angular en arco y en la que se apoya un lavabo tipo bol. Aquí, como en la habitación, también hacen acto de presencia las texturas geométricas acanaladas, en concreto en los azulejos blancos.
Matteo y Andrea detallan que el cliente quedó muy satisfecho con el resultado de la reforma, unos trabajos que contaban con un presupuesto bastante ajustado. “El proyecto ha transformado por completo la totalidad de los espacios y aunque la mayor parte de los recursos se han empleado sobre todo en el área de entrada, cocina y salón, todo el piso tiene un concepto uniforme que da coherencia a la propiedad en todos sus ambientes”, comentan.
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El alma de CaSA
El milanés Matteo Colombo (a la derecha) y el siciliano Andrea Sérboli (a la izquierda) son los fundadores de los estudios de arquitectura e interiorismo Colombo Architecture y Sérboli Bureau y colaboran desde el año 2011 bajo el acrónimo ‘CaSA’.
“Para nosotros, el lujo se trata de la experiencia de lugares y espacios, cuidadosamente diseñados, artesanalmente elaborados para la excelencia”, aseguran. Adaptarse al lugar del proyecto, trabajar a favor y no en contra de las limitaciones, incorporar las instrucciones del cliente y sus gustos y necesidades y añadir valor a todas las propiedades que transforman son algunos de sus puntos clave a la hora de encarar un proyecto.
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