Secretos para integrar piezas de mobiliario antiguo en ambientes modernos
Las antigüedades o piezas de almoneda realzan las decoraciones actuales
Las antigüedades y almonedas, heredadas o compradas, dan mucho carácter a un espacio y lo convierten en único, por este motivo son muy empleadas en los proyectos de los grandes decoradores. ¿Quieres descubrir todas las claves para introducirlas en los hogares de estilo preeminentemente moderno? Nos las ofrece Javier Quintanilla, interiorista en Interiorismo Parellades (interiorismoparellades.com).
Comienza por reivindicar estas piezas con décadas a sus espaldas pues los muebles vividos, con carácter, transmiten muy bien la personalidad y los gustos de los habitantes de una casa. “Por eso son tan importantes, al reflejar tu personalidad y, a la vez, combinan a la perfección con decoraciones modernas. Y en una casa o piso de obra nueva dan ese extra de calidez que en ocasiones echamos en falta”, argumenta.
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¿Se nos disparará el presupuesto en decoración?
Estamos hablando de piezas con una larga historia y, en ocasiones, únicas… ¿y muy costosas? “Las antigüedades no tienen por qué ser caras. De hecho, las piezas más versátiles normalmente no lo son. Yo siempre recomiendo buscar primero en anticuarios y almonedas locales. No hay nada que sustituya el flechazo que se siente al enamorarte de una pieza en directo. Según donde vivas, quizá no tienes la suerte de tener cerca un gran mercadillo como el Rastro de Madrid o los Encants Vells de Barcelona, pero siempre hay cerca una pequeña tienda con grandes tesoros”.
Una alternativa es emplear buscadores como www.todocoleccion.net o acudir a portales donde se venden piezas de segunda mano como Wallapop. ¡Atrévete a navegar!
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Reunir dos épocas, claves maestras
En ambientes actuales, cálidos y minimalistas, lo ideal es que las piezas antiguas o de almoneda sean el punto focal de la decoración, colocando solo una pieza por espacio: una lámpara o el sofá en el salón, una consola o un perchero en el recibidor, una cajonera reconvertida en mueble de baño o un armario de almoneda en el dormitorio.
Si quieres ir un poco más allá, “la proporción de Pareto (80% contemporáneo, 20% antigüedades) siempre funciona”, revela el experto.
El elegante y versátil salón de la imagen, que hasta cuenta con una barra de bar, lo ha diseñado la interiorista Raquel González conjugando mobiliario de diferentes épocas.
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Piezas que nunca fallan
En opinión del experto, existen piezas que son un acierto seguro integradas en casas actuales, como un gran espejo antiguo para atrapar la luz en el recibidor o una zona de tocador en el dormitorio.
Además, “un gesto a los que los decoradores recurrimos una y otra vez es situar sobre la mesa del comedor una lámpara con lágrimas de cristal de herencia o, si para conseguir un aire más vintage, una moderna luminaria Mid Century”. En la propuesta, la lámpara de araña del comedor la ha seleccionado el equipo de Luzio Design & Projects.
Por otra parte, en la era del teletrabajo, cuando no se cuenta con una habitación destinada en exclusiva a despacho, una solución con excelentes resultados estéticos es apostar por un escritorio antiguo en un rincón del salón o del dormitorio, compleméntalo con un flexo de gran tamaño. La combinación será tan fresca como personal.
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El retorno de clásicos
Existen muebles en la casa que pensábamos que no iban a regresar y lo han hecho pisando fuerte, como el mueble bar o el tocador. Son elementos que regresan, por lo que es ideal que se apueste por recuperarlos de otras épocas. “Como son piezas que no han estado muy buscadas, hay muchas opciones en el mercado”, apunta Javier. En concreto el mobiliario del salón de la imagen procede del anticuario madrileño Berenis.
El interiorista, asimismo, aconseja que, dado que son piezas con una doble carga historicista (su uso y su época de fabricación) siempre conviene refrescarlas para que resulten más ligeras. ¿Cómo hacerlo? “Coloca una lámpara contemporánea sobre el mueble bar, una silla ligera en el tocador o cambia el acabado del mueble, dejando la madera al natural o pintándolo en el color que más te guste”, propone.
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Trucos cuando se trata de piezas voluminosas y oscuras
En las decoraciones contemporáneas se busca siempre lograr una ligereza del conjunto. De este modo, lo primero que debe cuidarse es el volumen de la pieza seleccionada, para que no se vea desproporcionada respecto al espacio. “Un truco infalible es dibujar la pieza en el suelo con cinta de pintor o cortar el tamaño del mueble en papel de embalar y comprobar cómo se vería en el espacio”, explica Javier.
En todo caso si tu mueble es grande y oscuro y te encanta así, coloca solamente esa pieza antigua en la estancia y decora el resto en colores claros o vibrantes, elige textiles con texturas ligeras y da un toque más fresco a la decoración con metales y cristal.
En la cocina de la propuesta, diseñada por Acabadomate, el mobiliario es de acero y, como contrapunto se sitúa un mueble de isla antiguo en madera.
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¡Manos a la obra!
Hay quienes prefieren rehabilitar las piezas clásicas para devolverles su aspecto original. Otras muchas personas optan por modernizar los muebles para que ganen carácer y ofrezcan una imagen más personal.
Para que el conjunto funcione y nuestra intervención no oculte la verdadera belleza del mueble hay algunos trucos infalibles, que pasan a detallarnos desde Interiorismo Parellades: renovar los pomos, pintar el frente con esmalte al agua en un color suave o, incluso, pintar o empapelar su interior en un tono ligeramente más claro u oscuro que el exterior, generando un atractivo contraste. “En vitrinas y librería, el efecto de empapelar el interior es realmente espectacular”, opinan. Ejemplo de ello es la estantería de la imagen que ha customizado Núria Font, de Fontain’s Atelier.
Si optas por modernizar con papel pintado, escoge uno de gramaje medio: cuando es muy fino se rompe con facilidad, mientras que si se trata de uno muy grueso la colocación resulta muy compleja. Asimismo, para muebles en zonas húmedas (cocinas y baños) o para interiores de cajones con mucho uso, escoge un papel vinílico, de alta resistencia y lavables con un trapo húmedo.
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Nuevas funcionalidades, la carta ecológica y original
Javier sugiere formas de dar nuevos usos a piezas con historia, favoreciendo así el reciclaje al darles una nueva oportunidad:
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Decorar las paredes con marcos de cuadros vacíos, creando un rincón singular y lleno de encanto.
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En el baño, reconvertir antiguas cómodas o consolas en muebles bajolavabo. El truco pasa simplemente por colocar encima una encimera adecuada, por ejemplo, de mármol (así lo hace el diseñador de interiores Raúl Martins en el elegante baño de la imagen). Y si buscas un aire más rústico, un antiguo fregadero de piedra como lavabo resulta fabuloso.
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En cocinas amplias con rincón de office, colocando una sencilla mesa tocinera a modo de isla, conseguirás separar ambientes con acierto.
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Secretos del éxito
El último consejo que nos ofrece Javier es que nos atrevamos a introducir alguna pieza de otra época a pesar de que la decoración sea moderna, como ha hecho el estudio en el que trabaja al diseñar esta zona de teletrabajo compartida.
“¡Enamórate! Compra un mueble que te haga vibrar, solo uno, y dale todo el protagonismo en tu decoración. Verás cómo te quedas con ganas de más...”.
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