A la hora de decorar un piso pequeño, no solo hay que tener en cuenta el estilo, colores y diseño de las piezas que nos gusta. Hay que plantearse muchas cosas más como el espacio que ocupan, si los metros de los que disponemos son suficientes para ese mueble, si cumplen con varias funciones o nos proporcionan almacenaje. Repasamos cuáles son los muebles que son todo un éxito en la decoración de un piso pequeño y que necesitas sí o sí cuando los metros escasean.
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Un cómodo sofá cama
En los pisos pequeños es normal no contar con una estancia de más que podamos destinar a habitación de invitados. Por eso es habitual convertir el salón en improvisado dormitorio cuando recibimos visitas. Pero no se trata de echar un colchón hinchable en el suelo que, aunque práctico, no son piezas especialmente cómodas. Además, hay que tener espacio extra en algún armario para guardarlo. ¿La mejor solución? Un sofá cama que, además de decorativo y estilosos, sea la solución perfecta para que tus visitas descansen cómodamente cuando pasan la noche en tu casa.
Hay varios tipos de sofás cama. Los tipo libro o clic clac son los más baratos, pero también los menos cómodos. Los hay también que esconden el colchón doblado en la estructura del sofá, aunque tendrás que prever que hay espacio para sacar la cama. Los más cómodos y versátiles son los que tienen chaise longue, cuyos asientos se desplazan hacia delante, de manera que, quitando la mesa de centro, tendrás espacio de sobra.
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Bancos con almacenaje
Si necesitas más asientos en casa, consíguelos con un banco. Son más ligeros que las sillas y, si los colocas bajo la ventana, conseguirás un acogedor rinconcito de lectura o más asientos en el salón. Ahora, al elegirlo o encargarlo a medida, mejor si tiene espacio en el interior que aumente el espacio de almacenaje. Dependiendo de dónde esté lo puedes utilizar para guardar la ropa de casa, si está en el dormitorio, por ejemplo; cojines y mantas de otras temporadas, si está en el salón; o emplearlo como zapatero, si lo pones en el recibidor.
Puedes elegirlo con el asiento abatible, con cajones o con puertas, mejor correderas si no hay demasiado espacio delante.
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Mesas que dejen pasar la luz
Las mesas de cristal son la mejor alternativa para casas pequeñas. Dejan pasar la luz libremente y, además, la reflejan. Lo mejor es que son todo un activo en la decoración, con acabados elegantes y estilosos. Además, puedes encontrar modelos de muchos estilos. Piensa que las superficies opacas, además de oscurecer y robar la luz, no la dejarán fluir por el espacio, al contrario que el vidrio. Y esta teoría sirve tanto para la mesa de centro como para la mesa del comedor.
Mesitas suspendidas, lo mejor para dormitorios mini
Si los metros faltan en el dormitorio, no es cuestión de elegir una cama más pequeña en la que no estaréis cómodos. Hay otras piezas sin las que puedes vivir. Y estas son las mesitas de noche. O al menos el concepto tradicional de estas. Si falta el espacio, pueden empequeñecer el dormitorio (aún más) y será un engorro tener que moverlas para limpiar.
En su lugar instala mesitas de noche suspendidas que proporcionen una superficie para dejar el móvil o un libro, pero que liberen la parte inferior. Su ligero diseño hará que un dormitorio pequeño se vea más espacioso. Complétalas con unos apliques de pared o unas lámparas suspendidas.
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Di sí a los muebles tipo puente
Si, además de pequeño, tu dormitorio carece de armarios empotrados, tendrás que pensar en una solución que aproveche el espacio y que cuente con espacio de almacenaje. Los tradicionales muebles tipo puente son una opción muy decorativa que pueden satisfacer estas dos necesidades. Contarás con mucho espacio para guardar tu ropa y el efecto es decorativo y ligero, especialmente si eliges un modelo en blanco.
Cajones debajo de la cama
Si cuando te compraste la cama no elegiste un modelo con canapé, no es necesario realizar esta gran inversión si tus necesidades de almacenaje han aumentado. Hay cajones estándar con ruedas que puedes encajar debajo de esta y en los que guardar la ropa de cama, las toallas o las mantas de otras temporadas. Otra opción son las cajas, aunque su resultado es algo menos estético.
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Más o menos mesas con los modelos nido
Que tienes visitas, sacas las pequeñas de debajo de las grandes. Que estás sola en casa, las encajas unas en otras para que ocupen lo mínimo. Las mesas nido son perfectas para amueblar y decorar un piso pequeño y conseguir un estilo elegante.
Lo mejor, además, de su diseño es que es muy versátil. Y es que, si te mudas, podrás mantener la más grande como mesa de centro, mientras que las más pequeñas pueden hacer de mesas auxiliares al lado del sofá, por ejemplo, o en el dormitorio como mesita de noche.
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Muebles que son 3 o 4 en 1
¿Te acuerdas cuando eras pequeña y te preguntaban qué querías ser de mayor? Y decías médico, astronauta y paseadora de perros. Y el adulto, muy paciente, te replicaba: solo puedes elegir uno. ¿Quién lo dice? Porque eso mismo es lo que le pasa a este mueble para el recibidor: es al mismo tiempo banco, zapatero y estante. ¡Pero, espera, que hay más! Existen modelos que cuentan también con perchero o paragüero. ¡Son perfectos para mantener el orden en un recibidor pequeño!
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Espejos, siempre. ¿Dónde? En todas partes
Desde en la trasera del salón a la entrada de casa (por supuesto), incluyendo el dormitorio y hasta el comedor. Los espejos son un recurso decorativo perfecto, que no ocupa nada de espacio y con el que conseguirás espacios más luminosos y con la percepción de que son mucho más amplios. Alíate también con los colores claros y notarás el resultado.
Las puertas, mejor correderas
¿Sabías que una puerta corredera evita que desperdicies, al menos, un metro cuadrado? Multiplica eso por todas las puertas de tu casa. También las de los armarios. ¡Son muchos metros! Así que si estás pensando en reformar, apuesta por cambiar las puertas por modelos correderos que te devuelvan esos metros. Y lo mismo en los armarios. Son muy prácticos en dormitorios pequeños en los que la cama impide que las puertas se puedan abrir del todo.