Si eres un plantlover, seguro que tu salón, más que un salón, parece una jungla. Y seguro que cada vez que acudes a un sitio nuevo te encanta descubrir sus especies autóctonas y probar si esas plantas podrían sumarse a la gran colección que tienes en casa. Y, como amante de las plantas que eres, hay ciertas cosas que sabes. O, al menos, deberías. Hacemos un repaso por los básicos del cuidado de las plantas. ¿Seguro que lo sabes todo?

Leer: Guía para que tus plantas de interior se mantengan sanas y esplendorosas

Una planta sin luz no prospera

Aunque hay plantas que necesitan menos luz que otras para crecer, todas la necensitan, aunque sea de pequeñas dosis. Algunos ejemplos son la drácena, la dieffembachia, el crotón o la calatea. Incluso la flor de Pascua, necesita luz. De hecho, para que se pongan sus hojas rojas lo importante es que estén en oscuridad entre 12 y 14 horas al día. Pero el resto del tiempo, sí que necesitan luz.  

Leer: Síntomas que indican que tus plantas tienen poca o mucha luz

No todas las plantas necesitan la misma cantidad de agua

Y esto es un error de principiante total. Aportar la misma cantidad de agua a todas las plantas puede hacer que muchas de ellas terminen con problemas de humedad en el sustrato, lo que desemboca en la pudrición de sus raíces. Para empezar, cuando te haces con una planta nueva lo mejor es informarse sobre sus cuidados. Pero también es necesario comprobar la humedad del sustrato siempre antes de regar. Puedes hacerlo metiendo el dedo en la tierra o un palo. Si sale mojado es que igual debes esperar unos días más. 

Leer: Los errores más habituales a la hora de regar las plantas y cómo evitarlos

Ni requieren de los mismos cuidados

Si las cantidades de agua que necesita cada planta son distintas, también lo son la cantidad de luz, tipos de abonos, frecuencia de poda (si es que es necesario) o tratamientos. Por eso, como comentábamos anteriormente, conviene informarse bien de los cuidados que necesita cada tipo de planta cuando empieza a formar parte de nuestro vergel personal. También hay que tener en cuenta que no siempre lo que leemos en internet sirve para todos los climas. No es lo mismo vivir en Cádiz, donde las temperaturas son más estables durante todo el año, que en Burgos, donde en invierno el termómetro baja de los cero grados. Y eso, en casa, también se nota. 

Leer: 8 síntomas que te avisan de que tus plantas no están sanas

Conoces la importancia de un buen drenaje

Y no vale solo con tener tus plantas en macetas con agujeros, un básico. Si no que conviene también colocar unos guijarros porosos en la base que ayuden a desaguar la maceta cuando la regamos. Y, si hay restos de agua en el plato, lo mejor es esperar un poco y después quitarla, especialmente si en la base de la maceta no has colocado piedras, grava, bolas de arcilla, piedra pómez… Hay muchas opciones.  

Leer: Jardineras, macetas y maceteros: cuál es cuál, qué modelo elegir y qué se lleva

Hay vida más allá del sustrato universal

Porque hay plantas que necesitan un sustrato más específico. Y muchas veces no hace falta comprarlo preparado, lo puede hacer uno mismo. Por ejemplo, para las plantas crasas, las suculentas y los cactus, es recomendable un sustrato muy poroso. Y puedes hacerlo tú. Por ejemplo, con turba negra y perlita o con sustrato universal y gravilla o arena de río. Además, como cada crasa también es distinta, puedes ir probando distintas fórmulas hasta que des con la adecuada. ¿La mayor ventaja? Que sale más barato que los sustratos específicos. 

Leer: ¿Sabes cómo elegir el mejor sustrato para tus plantas?

Conoces los peligros de un mal uso de las herramientas de jardinería

No porque te equivoques al utilizarlas para una tarea u otra, sino porque sabes que, después de tratar cada planta hay que desinfectarlas. Y esto cobra especial importancia con las tijeras de podar. Y tan solo es necesario un poco de alcohol etílico sobre un paño y frotar bien sus cuchillas. Así evitaremos posibles infecciones de una planta a otra.  

Leer: ​​Estas son las herramientas de jardín que no te pueden faltar

Vale más un poco de jabón potásico que todos los insecticidas del mundo

 Primero porque es más barato, segundo porque al comienzo de las plagas son menos dañinos contra tus plantas y tercero porque son una opción ecológica ideal. Además, también es preventivo. Para aplicarlo solo necesitas una cucharada de jabón potásico disuelta en un litro de agua. Tal vez sea necesario calentarla para que se disuelva bien. Espera a que se enfríe, échalo en una botella de spray y pulverízalo en tus plantas. Te ayudará a mantener a raya ciertas plagas como la de pulgón o negrilla.    

Leer: Los mejores remedios caseros para cuidar y proteger tus plantas

En realidad, no existen las plantas de interior

En realidad, lo que llamamos plantas de interior son plantas tropicales que, debido a las características de su hábitat natural, pueden desarrollarse perfectamente en el interior de nuestras casas, donde la temperatura suele ser bastante constante durante todo el año. De hecho, su mayor problema suelen ser el frío y el calor extremos, por lo que dentro de casa es donde mejor se desarrollan. Tal vez uno de los factores en los que más cojeamos en el interior de nuestras casas es la humedad, pero eso lo puedes solucionar pulverizándolas de vez en cuando o con un bañito en la ducha de ciento en viento. 

Leer: 10 plantas de interior muy exóticas para decorar tu casa

Tener muchas plantas no supone un gran gasto

Tal vez en macetas es donde más dinero te gastes, y más si te gustan los maceteros decorativos. Pero después, su cuidado no requiere de gran inversión. Un abono de vez en cuando, un insecticida para las épocas de verano (será mucho más barato si usas jabón potásico), el sustrato… Pero son pequeñas inversiones que no es necesario estar realizando continuamente, solo en época de trasplante. Y, como sabes de plantas, siempre puedes reproducirlas para seguir aumentando tu stock. 

Leer: Todos los secretos para cultivar miniplantas y poner un toque verde en casa