La tendencia por crear atmósferas apacibles, sosegadas y serenas ha convertido a los colores tierra en una de las gamas cromáticas preferidas a la hora de decorar nuestras casas. Beis, marrón oscuro, terracotas y tonos cobrizos son tonalidades que nos vinculan con la Naturaleza, que nos ayudan a conectar con nosotros mismos, a recuperar la sensación de bienestar y relax, que es justo lo cuando que buscamos llegamos a casa.
Si bien es cierto que hasta hace unos años estas tonalidades parecían estar reservadas a decoraciones clásicas, poco a poco han demostrado que son capaces de integrarse en cualquier tipo de ambiente y estilo decorativo. Puedes usar los colores tierra en suelos y paredes, en piezas del mobiliario o en sutiles pinceladas través de pequeños detalles y complementos. Tú eliges. A continuación, te damos algunas ideas que seguro te inspiran a la hora de dosificarlos y combinarlos con otros colores y piezas de la decoración
Atmósfera envolvente
Los colores tierra transmiten calma. Por eso, son perfectos para recrear un ambiente tranquilo y relajante en el dormitorio. Más aún, si se combinan con blanco en las paredes, las sábanas, las cortinas… En cuanto al mobiliario, las piezas de madera te ayudarán a mantener la armonía de los tonos tierra.
Si te animas a darle un look natural a tu dormitorio, la colección otoño-invierno Mystic Romance de Westwing incluye textiles y cojines de lino, terciopelo y algodón en tonos ocres, rojizos y verdes.
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