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Nos encanta la madera. Es un material noble donde los haya que aporta a cualquier espacio belleza, autenticidad y calidez. Y aunque es resistente, puede sucumbir ante ciertos accidentes y mostrar las señales del paso del tiempo. Hoy puedes aprender a reparar esos pequeños desperfectos en la madera que deslucen su apariencia.

 

Apuesta por materiales nobles y cálidos

En el siglo XXI son muchos los materiales que podemos elegir para equipar y decorar nuestra casa, algunos de ellos muy modernos y tecnológicos. Sin embargo, la madera, un material tradicional, nunca pierde vigencia.

Por su belleza, su naturalidad y su tacto cálido, sigue estando muy presente en las casas de hoy. La elegimos para los muebles, para los pavimentos y los revestimientos de paredes, para los complementos de decoración, etc.

Sin embargo, se trata de un material que, si bien no es excesivamente delicado, tampoco es inalterable, por lo que suele mostrar las huellas de ciertos accidentes cotidianos: golpes, arañazos, rayones, manchas, etc.

¿Tienen solución estos desperfectos en la madera? La respuesta no es universal, sino que depende de cada caso. A continuación te explicamos algunas de las soluciones más efectivas en función de los problemas.

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Pequeños (o grandes) desperfectos

No todas las heridas que muestran los objetos de madera son iguales, ni se producen por los mismos motivos, ni tampoco todos tienen la misma solución. Algunos, de hecho, no la tienen o es demasiado complicada como para ponerla en práctica.

Por regla general, los desperfectos en la madera se suelen producir a causa del paso del tiempo o por accidentes desafortunados que, al fin y al cabo, son inevitables. Cuando los desperfectos se producen por el envejecimiento normal de la madera, por el desgaste de la pieza, no es necesario repararlos. En muchas ocasiones, incluso le confieren carácter.

Si el deterioro se produce por un accidente (ya se trate de golpes, de rozaduras, etc.) sí conviene repararlo, para lo cual hay que determinar si el daño está en la propia madera o en la capa de acabado (barniz, pintura, laca, etc.), para poder optar por la solución más adecuada.

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Reparar arañazos superficiales

¿Quién es capaz de mantener sus muebles de madera libres de toda marca o señal? Con el uso cotidiano es casi imposible que no se produzcan pequeños arañazos en las superficies de madera, en especial en los sobres de las mesas y otros muebles.

Sin embargo, existen recursos para tratar de reparar o disimular estos pequeños arañazos. Los rotuladores reparadores para madera sirven para tratar de disimular marcas, rayones y arañazos, siempre que estos no sean demasiado profundos. La clave para lograr el mejor resultado es elegir un rotulador del mismo tono de la madera. Cuanto más se parezca, menos se notará el arañazo una vez reparado.

- Comienza por limpiar y secar la superficie de la madera.

- Haz una pasada con el rotulador por el arañazo, sin presionar demasiado.

- Si todavía se ve vuelve a pasar el rotulador. Ten en cuenta que con cada trazo que añadas se oscurecerá el color.

- Deja secar por completo (estos rotuladores son de secado rápido).

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Cómo reparar marcas y arañazos profundos

Cuando se trata de rayones profundos el rotulador reparador de madera ya no sirve de mucho. Se necesitan otro tipo de soluciones, como la cera para emplastecer.

Se trata de unas barritas de cera, disponibles en varios colores, que se frotan o se aplican sobre el desperfecto para “rellenarlo” y disimularlo. Su uso es muy sencillo.

- Lo primero que debes hacer es elegir correctamente el color de la barra de cera. Tiene que ser lo más parecido posible al de la madera. Si no hay ninguna opción similar, puedes mezclar cera de dos tonos hasta dar con el que necesitas.

- Toma una pequeña porción de cera y amásala con los dedos hasta que se ablande.

- Aplica la cera sobre la superficie a reparar (en la grieta o el arañazo) y alisa con ayuda de los dedos y de una espátula, retirando la cera sobrante.

- Deja secar por completo.

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Madera deteriorada por el sol

Necesitamos el sol para vivir y nos encantan las casas luminosas. Sin embargo, el efecto de la radiación del astro rey no es nada beneficioso para nuestras superficies de madera.

Cuando el sol incide de forma intensa y prolongada sobre la madera, termina por resecarla y decolorarla, alterando su tono, su textura y estropeando el barniz, si lo lleva. Por eso es tan necesario controlar la radiación solar con cortinas o estores.

Si la madera se ha estropeado por causa del sol y se ha decolorado hay que tratar de igualar el color de las zonas estropeadas.

- Comienza por lijar la superficie dañada.

- Si el sol ha dejado manchas o quemaduras, frótalas con alcohol.

- Aplica después en la zona decolorada una mezcla de agua y vinagre a partes iguales. Deja secar.

- Nutre la madera con vaselina o aceite de girasol, frotando con un trapo de algodón.

- Para terminar, barniza de nuevo la superficie.

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¿Se pueden eliminar los cercos y marcas de vasos?

Es uno de los desperfectos más comunes: nos olvidamos de recoger los vasos después de una fiesta y al día siguiente han quedado unos antiestéticos cercos en la mesa de madera. O el causante de las marcas ha sido un jarrón o un florero mojado.

Sea como sea, los cercos blanquecinos provocados por la humedad son muy difíciles de eliminar. Hay ciertos trucos que podemos usar, pero no existen garantías de que funcionen siempre.

Podemos probar a frotar las marcas con un pulimento, como puede ser una pasta de bicarbonato y agua (si no tienes bicarbonato, inténtalo con pasta de dientes). Si no salen, inténtalo con una mezcla de ceniza y gasolina.

En caso de que no podamos quitar las manchas con estos trucos, ya solo nos queda lijar la superficie de la mesa con una lijadora eléctrica, eliminar el barniz dañado y volver a barnizar.

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Desperfectos en el suelo de parquet

Si te interesa todo lo relacionado con el cuidado de la casa, el orden y la limpieza y, además, eres usuaria de Instagram, seguro que ya sigues a Bego, La Ordenatriz. Su cuenta (@La_Ordenatriz) tiene ya más de 630.000 seguidores. Ella nos da un truco muy eficaz para eliminar los arañazos en los suelos de madera.

Consiste en pasar por la zona deteriorada un trapo de algodón impregnado con unas gotas de aceite de girasol, frotando en círculos para distribuir bien el aceite hasta que penetre en la madera. Es importante que el aceite sea de girasol, más claro que el de oliva, para no oscurecer la madera. Antes de empezar, conviene hacer una prueba en una zona poco visible.

Un consejo: este truco es válido para devolver el lustre a las puertas de paso, a los armarios, y para eliminar las marcas de las llaves en la zona de la cerradura de la puerta de entrada.

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¿Se ha levantado la pintura en un mueble?

Si ha sido así, no queda otro remedio que repintar la zona dañada. Para lograr un resultado óptimo, comienza por eliminar la pintura deteriorada con un buen lijado.

- Utiliza una lijadora eléctrica de banda y retira los restos de pintura levantada, lijando también el resto de la superficie del mueble.

- Comienza con una lija de grano grueso y después termina con una lija de grano fino para lograr una textura más suave.

- Elimina el polvo resultante con un trapo húmedo.

- Pinta la superficie, aplicando poca pintura y extendiéndola bien con la brocha o el rodillo de espuma.

- Aplica dos capas de pintura, dejando secar totalmente entre ellas.

- Termina con la capa de acabado: un barniz, mate o satinado, por ejemplo. O aplica cera y pule bien la superficie.

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Cómo reparar abolladuras y golpes

Los accidentes pueden dejar señales muy diversas sobre las superficies de madera, como golpes y abolladuras en la chapa de madera de un mueble, por ejemplo.

Para arreglar estos desperfectos puedes utilizar la plancha caliente, un truco que funciona en muchas ocasiones.

- Coloca un trapo doblado o una toalla sobre el golpe a reparar.

- Mantén sobre el trapo la plancha templada durante unos segundos

- Repite si es necesario hasta comprobar que las fibras de la madera se levantan ligeramente. Este truco es efectivo para arreglar pequeños golpes, no hendiduras muy profundas.

Cuando se ha astillado la madera, el procedimiento que hay que llevar a cabo es otro. Si tienes el trocito de madera que se ha astillado lo mejor es pegarlo con cola blanca para madera y después lijar y barnizar.

En caso de que no podamos pegar el trozo de madera que falta, es necesario lijar la zona estropeada y rellenar con pasta o masilla de madera, o con pasta de resinas sintéticas en un color lo más parecido posible al de la madera. Estas pastas se aplican con una espátula y se dejan secar, terminando con un buen lijado. Después se aplica el barniz de acabado.

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