1/11 © Saxun

Muy extendidas en nuestro país, las persianas persiguen regular la privacidad y el paso de la luz. No obstante, existen otros sistemas de control solar que deberías conocer para comprobar si no resultan alternativas más interesantes. Para hablarnos de todo ello nos asesora Miriam Torres, experta en control solar en Sombrah.

Los estores exteriores de la imagen son Wind Screen, de Saxun, que cuentan con un sistema de cremallera que garantiza una gran estabilidad ante grandes rachas de viento

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2/11 © Jordi Anguera para Dom Arquitectura

¿Qué tipos de control solar existen?

Hay una gran variedad de sistemas de control solar. En primer lugar, los dividiremos en dos bloques:

  • El control solar activo: que incluye las persianas, las venecianas de exterior, los estores de exterior e interior, las mallorquinas, los toldos, pérgolas, etc. Con esta modalidad, tenemos la capacidad de reaccionar a las condiciones climatológicas.

  • El control solar pasivo: soluciones de arquitectura bioclimática como los voladizos, las dobles fachadas, las celosías de lamas fijas. En este caso no podemos adaptarnos a diferentes circunstancias de radiación solar, viento, etc.

En la propuesta, una vivienda de nueva construcción en la localidad gerundense de Mont-ras proyectada por Dom Arquitectura en la que se apuesta por una fachada en piedra seca de la zona, con una cinta superior, para reducir la incidencia solar en los interiores.

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3/11 © Markus Spiske / Unsplash

Las persianas, muy arraigadas en España

El empleo de persianas es (todavía) bastante mayoritario mientras que no encontramos la misma aceptación entre los países de nuestro entorno.

“El principal motivo por el que considero que se utilizan persianas en nuestro país, es debido a la alta exposición a la radiación solar que tenemos, sumado a las altas temperaturas durante gran parte del año. Además, otra razón que justifica su uso es cultural, dado que los españoles, aunque tenemos un carácter muy sociable, también somos celosos de nuestra intimidad”, afirma la experta.

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4/11 © Adobe Stock

No son aliadas en temas de sostenibilidad

Las persianas se caracterizan por proteger los diferentes espacios de la radiación del sol, sin embargo, las cajas de persiana son un punto débil de las fachadas de los edificios. Al instalar la caja en la fachada estamos reduciendo su sección, generando un puente térmico que, si además lo sumamos a una baja calidad en la práctica constructiva, hace que tengamos infiltraciones con la consecuencia de tener que aumentar la demanda energética de nuestro hogar.

Por ejemplo, si realizamos un test de hermeticidad (el también llamado blower door), estas cajas suelen ser el motivo de fugas de calor cuando se tiene la calefacción puesta en casa y de frío en verano, cuando tenemos la refrigeración en marcha. Para evitar estas problemáticas habrá que actuar en una instalación que las aísle de forma correcta tanto desde un punto de vista térmico, como sonoro.

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5/11 © Simón García de Arqfoto para 08023 Architects

Buscar la orientación solar óptima

La profesional de Sombrah señala que un punto muy importante a la hora de definir un proyecto es decidir la orientación de la edificación, ya que es un aspecto fundamental a la hora de controlar el sobrecalentamiento/ganancias solares y, por tanto, la demanda energética, pues de esta orientación dependen el efecto que la radiación solar tenga sobe cada fachada. Una vivienda bien orientada puede suponer un gran ahorro de consumo de energía.

Esta vivienda en la sierra de Collserola en Barcelona, cuyo proyecto firma 08023 Architects, cuenta con lucernarios y unas fachadas de grandes ventanales, para conseguir unos interiores luminosos. El control solar de la casa, con orientación sureste, se consigue con la colocación estratégica de porches y voladizos a la vez que un sistema de persianas permite la personalización de la intensidad luminosa en cada estancia.

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6/11 © Griesser

Una de las mejores opciones de control solar

En el caso de las venecianas de exterior, tenemos la posibilidad de orientar las lamas en función de nuestras necesidades. Por ejemplo, en invierno podemos dejar las lamas totalmente horizontales para que pase la mayor cantidad de luz y conseguir además que entre el calor necesario para conseguir una temperatura óptima en el interior y, en verano, si orientamos las lamas a 45º dejaremos pasar una luz del sol difusa para gozar de luminosidad, pero bloquear los rayos directos que harían aumentar la temperatura a unos niveles de incomodidad. En ambos casos, la orientación de las lamas hace que tengamos esa intimidad que tanto buscamos dentro de nuestros hogares.

La gran diferencia entre las lamas orientables y las persianas es que las primeras gradúan la entrada de los rayos solares (como se comprueba en este ambiente con productos de Griesser), mientras las segundas los bloquean por completo.

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7/11 © Persycom

Ahorro energético a lo largo de los 12 meses del año

Con soluciones eficientes de control solar el ahorro de energía se produce tanto en los meses de más calor como en las temporadas más frías. Miriam lo justifica así: “porque gracias a ellos tenemos la posibilidad de aprovechar la luz y el sol en invierno para conseguir elevar la temperatura interior y, por ende, no tener que hacer un uso desproporcionado de la calefacción y, por otro lado, en los meses de verano, nos permite bloquear la radiación solar, pero dejando pasar la luz, evitando hacer un uso innecesario de la iluminación”.

En esta vivienda se instalan lamas orientables exteriores de la firma Persycom, el modelo Persyvex disponible en un amplio abanico de colores, como blanco, negro, bronce o inox, tanto en lama ciega como microperforada.

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8/11 © Somfy

El combo perfecto: control solar junto con domótica

Si un control solar móvil lo acompañamos de un sistema domótico, conseguiremos aumentar en un gran porcentaje la eficiencia energética ya que, podemos hacer que nuestros sistemas de protección solar se gestionen en función de le incidencia de los rayos del sol, de la temperatura, del viento, etc., en definitiva, interactuar en función de la climatología.

Esta tecnología inteligente es capaz de automatizar una serie de actividades y procesos en el hogar, con el fin de optimizar el consumo y proporcionar una mayor comodidad. En el caso del control solar, lo que se hace es dotar de autonomía a los diferentes elementos, para que sean capaces de gestionarse en función de la climatología y las necesidades del espacio.

En la imagen, un sistema domótico de Somfy que, tras motorizar el sistema de control solar dinámico elegido (persianas, toldos, estores, cortinas…) permite su subida o bajada de forma inteligente, por ejemplo, programando cerrar los toldos si existe viento fuerte o cuando se detecta que no hay un sol intenso.

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9/11 © Carla Capdevila para Estudio Arquesta

La experta comenta que, “en términos económicos, más que considerar la inversión inicial del sistema domótico, hay que pensar en los beneficios y ahorro que va a suponer contar con esta tecnología ya que, va a conseguir que la vivienda se gestione de forma eficiente controlando el consumo de sistemas de climatización e iluminación y, por consiguiente, va a reducir el importe de nuestras facturas y va a contribuir a la conservación del medio ambiente".

En la reforma del ático en Madrid de la imagen, Estudio Arquesta sitúa el comedor en un cerramiento acristalado y para el techo selecciona una pérgola bioclimática domotizada, como todo en la vivienda.

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10/11 © Rachel Claire / Pexels

Protección en la totalidad de la fachada

Hay que anotar que lo que a veces no se tiene claro es que necesita protegerse del sol indistintamente una superficie transparente (todas las aperturas de vidrio) y una superficie opaca. En el segundo caso, la experta propone dos opciones: la primera de ellas y las más evidente y necesaria es la elección de un buen material aislante en la fachada acompañado de una buena ejecución y, en segundo lugar, de forma complementaria y siempre que se pueda, ayudará colocar delante de esta fachada algún elemento vegetal como, por ejemplo, árboles que den sombra y que eviten que se eleve la temperatura de esa fachada.

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11/11 © Leroy Merlin

Entonces, ¿apostamos por persianas o una alternativa?

Las persianas resultan útiles para oscurecer los ambientes, aunque tienen dos puntos débiles: se producen pérdidas de energía y puentes térmicos y acústicos, debido al cajón de enrollamiento y, una vez bajadas, opacan por completo la ventana o puerta en cristalera, sin permitir gozar del paisaje ni de la luz natural. Es por todo ello que otras alternativas, como las contraventanas de celosía, los toldos, los estores y las lamas graduables resultan más interesantes respecto a conseguir confort térmico en casa y unos interiores en los que graduar eficientemente la entrada de los rayos solares.

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