¿Te preocupan las manchas en las sillas o en la alfombra? ¿Incluso en las paredes? Seguro que si hay niños pequeños en casa, la decoración del comedor te está dando algún que otro quebradero de cabeza. Estas son las 10 cosas que debes evitar a la hora de montarlo. Para no sufrir. Así es un comedor a prueba de niños.

¿Por qué adaptar la decoración del comedor cuando hay niños en casa?

Porque vivirás más tranquilo sin preocuparte por las manchas o derrames de comida y líquidos que se pueden producir de manera involuntaria. Los niños pequeños, en el aprendizaje relacionado con la comida y manejo de cubiertos, ensucian. Así que lo mejor es evitar el conflicto y las preocupaciones. Además, es fácil que si hay niños en casa el comedor se utilice también como zona de juegos de mesa o manualidades.

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Evitar sillas de diseño "complicado"

Hay sillas de comedor muy vistosas y llamativas, pero ¿son adecuadas cuando hay que decorar un comedor a prueba de niños? Quizá no. Espera a que crezcan para disfrutar de ellas. Se trata de diseños donde se puede enganchar fácilmente el pie de uno de los pequeños, que son demasiado pesadas para que puedan moverse con comodidad, incluso diseños algo más inestables para un niño que a veces "trepa" para sentarse. Por supuesto, evita las sillas plegables.

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¿Sillas tapizadas?

Pues la verdad es que las sillas de plástico o de polipiel son más sencillas de limpiar ante la caída de una mancha. Las sillas tapizadas siempre con más delicadas. Puedes optar por sillas con tapicerías antimanchas, pero son más delicadas que los diseños mencionados. Comedor decorado por la decoradora Pia Capdevila con estilismo de Mar Gausachs.

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En el caso de que las sillas sean tapizadas…

Intenta evitar los colores más delicados como el blanco o los neutros más claros. Por mucho cuidado que tengas a la hora de lavar las manos a los niños, es inevitable que las apoyen sin darse cuenta mientras están comiendo. También el tipo de tejido favorece la limpieza de la silla. Las que tienen fundas desenfundables y lavables en la lavadora te permiten disfrutar del textil sin preocupación. Pero, por ejemplo, un tejido tipo borrego no es lo más apropiado para un comedor a prueba de niños.

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Nada de alfombras delicadas

Por el mismo motivo que las tapicerías de las sillas, las alfombras que decoren el comedor han de ser resistentes. Evita los diseños más delicados. Una alfombra vinílica o de polipropileno es todoterreno a la hora de aspirar y fregar. Proyecto de YSG.STUDIO.

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Protege las obras de arte

Si es posible, no cuelgues cerca de la mesa de comedor cuando hay niños pequeños, obras de arte de valor. Menos aún cuadros de tamaño XXL apoyados en el suelo. Es un riesgo innecesario. Es preferible que optes por láminas protegidas con cristal, colgadas en la pared. Proyecto de Alex March Studio con estilismo de Erika G.

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Una mesa resistente: evita algunos materiales

¿Conoces las mesas de sobre porcelánico? Son como una encimera de cocina, muy resistentes y lavables. no necesitas ni colocar mantel sobre ella para comer. No se estropea si se derrama agua. Es un tipo de mesa que cada vez se ve más en interiorismo y que resulta muy práctica cuando hay niños en casa. Podrás usarla como espacio para pintar, colorear, hacer manualidades, puzles, jugar… con mucha tranquilidad. En un comedor a prueba de niños, lo que debes evitar son las mesas de materiales delicados. El cristal, por ejemplo, o algunas maderas que se marcan fácilmente.

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Despídete de las estrecheces

Debes crear una decoración de comedor espaciosa para facilitar el paso de los niños a las sillas o banco. Despeja el espacio alrededor del comedor de elementos decorativos delicados que se puedan caer. Los niños más pequeños aún están afianzando su motricidad y los movimientos no son quizá tan precisos como nos gustaría a los mayores. Así que, pónselo fácil. Un detalle a tener en cuenta: en una silla, los niños permanecerán sentados mientras que en un banco, pueden tender a recostarse o tumbarse en un momento de rebeldía ante la comida del plato. Proyecto de Pia Capdevila Interiorismo.

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Cuidado con las paredes delicadas

Tanto en un comedor ubicado en una estancia principal, como en un office de cocina, las paredes pueden sufrir daños colaterales al aprendizaje de un niño pequeño a la hora de comer. Así que evita revestimientos delicados en las paredes. Los azulejos se limpian perfectamente sea la mancha que sea que caiga. El papel pintado, mejor vinílico para que pueda lavarse. La pintura, siempre plástica. Incluso la esmaltada es más resistente a la limpieza. Una buena idea es revestir con planchas de materiales tecnológicos o plaquetas vinílicas, incluso crear zócalos o frisos que protegen la zona baja de la pared.

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En resumen, decorar un comedor así es una buena idea…

Si hay niños en casa, después de ver todo lo que hay que evitar para vivir con tranquilidad la hora de las comidas y cenas; el resumen es:

• Opta por una mesa resistente a las manchas y protege la tuya cuando se use para hacer manualidades.
• Escoge sillas cómodas, que no entrañen peligro para los más pequeños, que se puedan lavar fácilmente. Las sillas altas tipo trona (hay diseños muy bonitos) pueden lucir perfectamente en tu comedor.
• La alfombra, mejor vinílica o de polipropileno, lavable.
• Protege las paredes de alrededor de la mesa, sobre todo cuando quedan cerca. Pintura o papel pintado lavable, frisos o zócalos…
• ¿Hay una ventana cerca? Pues siempre con cortinas que puedas lavar en la lavadora o estores de screen.
• Y el menaje de los más pequeños, puede ser de melamina o plásticos libres de BPA, y así no se romperá fácilmente.

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