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Pocos elementos te ayudan a organizar y delimitar el espacio dentro de un ambiente como las alfombras. Aportan un amplio repertorio de ventajas que las convierten en un elemento fundamental en salones, dormitorios e, incluso, el recibidor o el pasillo.

Pero para dar en la diana es importante saber elegir la alfombra perfecta en cada caso. No todas funcionan igual en todo tipo de ambientes. Aquí tienes algunos consejos para acertar.

 

La importancia de vestir tus suelos

Una alfombra es más que un objeto de decoración. Cumple varias funciones importantes, además de aportar belleza a los suelos de la casa y ayudarte a delimitar ciertas zonas.

Para empezar, ofrece un gran aislamiento térmico, haciendo que los interiores sean más cálidos en invierno. También aísla el espacio desde un punto de vista acústico, ya que amortigua el sonido de las pisadas, aumentando el confort.

Además, las alfombras reducen la electricidad estática y protegen los suelos de las agresiones de la vida cotidiana.

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2/9 © Rug Society

Una pieza que decora por sí misma

Si analizamos el papel de las alfombras desde un punto de vista decorativo, dejando a un lado el resto de ventajas que tienen, enseguida nos damos cuenta del poder que tienen como elementos ornamentales.

Ya se trate de un modelo liso o estampado, una alfombra es capaz de aportar carácter y personalidad a cualquier espacio. Solo tienes que elegir la alfombra perfecta entre una amplísima variedad de opciones.

Apuesta por las alfombras étnicas que son un tesoro, por diseños contemporáneos con motivos geométricos, por alfombras lisas y de marcada textura, etc. Recuerda que la alfombra debe estar en armonía con el resto de los elementos de la decoración, desde las cortinas y el resto de los textiles hasta los muebles.

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¿Lisas o estampadas?

No hay una respuesta definitiva a esta pregunta, porque todo depende de la decoración del ambiente en el que vayas a colocar tu alfombra. Piensa que es conveniente integrarla en el espacio, por lo que deberás tener en cuenta el resto de los elementos.

Por regla general, si los textiles de tu salón son lisos puedes apostar por una alfombra estampada, pero si ya cuentas con diversos patrones o estampados en el resto de elementos lo mejor es optar por una alfombra lisa. Estas últimas, si las eliges en colores neutros y claros, aportan luminosidad a los ambientes. Los colores cálidos añaden confort y hacen que los espacios sean más acogedores. En cuanto a los colores fríos resultan relajantes y son perfectos para el dormitorio.

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4/9 © Sonya Winner Rug Studio

Cómo elegir el tamaño adecuado para el salón

Este es uno de los capítulos más importantes a la hora de elegir una alfombra, y no siempre lo tenemos en cuenta como deberíamos, lo que hace que cometamos errores que podemos evitar si seguimos las recomendaciones de los expertos.

En este sentido, desde la firma Nani Marquina recomiendan medir el espacio antes de elegir y apostar por alfombras generosas que acompañen al mobiliario.

En el salón puedes colocar una alfombra grande, de forma que queden dentro de la misma las patas del sofá y del resto de butacas o sillones. Si tienes que optar por un modelo más pequeño, al menos deben quedar dentro las patas delanteras del sofá.

Para salones grandes necesitas alfombras de tamaño XXL que delimiten el espacio. De lo contrario la estancia  parecerá más pequeña de lo que es.

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5/9 © Lorena Canals

Ideas para elegir la alfombra para el comedor

Una alfombra en el comedor te ayuda a estructurar el ambiente y a proteger el suelo. Sin embargo, has de saber elegirla para que el resultado sea armónico.

Ten en cuenta que la alfombra debe cubrir todo el espacio que ocupan la mesa y las sillas, sobresaliendo entre 50 y 80 cm de la mesa por todos los lados. De esta forma los comensales pueden sentarse y levantarse con comodidad, sin tropezar con el borde de la alfombra.

Ten en cuenta que si tu mesa es redonda deberás elegir una alfombra con la misma forma circular. Para mesas rectangulares o cuadradas la alfombra ha der ser también rectangular.

Un consejo: si quieres evitarte quebraderos de cabeza elige para el comedor una alfombra oscura, más sufrida.

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6/9 © Traumteppich

Calidez en el dormitorio

No hay una única opción de alfombra para el dormitorio. En estos espacios en los que el descanso y el relax son el objetivo a conseguir, las alfombras aportan una dosis extra de confort muy valiosa y te permiten caminar descalza con toda comodidad.

Como regla general, la alfombra debe sobresalir unos 50 cm por cada lado de la cama. Si no puedes colocar una alfombra de gran tamaño, opta por modelos más pequeños a ambos lados de la cama, que lleguen hasta los pies para completar el espacio.

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7/9 © Sonya Winner Rug Studio

Para animar el pasillo

Decorar un pasillo no es fácil, en especial si es estrecho y no te permite utilizar demasiados recursos. Por eso las alfombras se convierten en una herramienta muy práctica para añadir color, interés y un toque cálido. Elige el estilo que más te guste, así como el esquema de color, el estampado, etc. Si tu pasillo es muy largo puedes poner dos alfombras iguales, para acortarlo visualmente.

Un consejo: la alfombra no debe quedar demasiado pegada a las paredes laterales. Deja al menos 30 cm de distancia para que el espacio no quede recargado.

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El mejor mantenimiento

Puede parecer que mantener las alfombras de tu casa libres de suciedad y manchas puede ser misión imposible, pero en realidad es más fácil de lo que piensas.

Las alfombras pueden convertirse en el refugio perfecto para los ácaros, por lo que es importante dedicarles la atención que necesitan. Comienza por sacudir las pequeñas siempre que sea posible. Las más grandes debes aspirarlas con frecuencia para eliminar el polvo. Pasa el aspirador lentamente, repasando toda la superficie de la alfombra.

En caso de que se produzca un accidente y se manche tu alfombra lo mejor es limpiarla cuanto antes con una solución de agua y amoniaco. Frota suavemente y aclara después con un paño húmedo.

Si quieres eliminar los malos olores de tu alfombra espolvorea sobre ella bicarbonato sódico y deja actuar toda la noche. Pasa el aspirador al día siguiente y tu alfombra estará perfecta.

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9/9 © Lorena Canals

El modelo perfecto para los niños

No puede faltar una alfombra en la habitación de los niños. Les ofrece una superficie perfecta, mullida y confortable, en la que jugar cómodamente. Excepto en el caso de que tu hijo sea alérgico a los ácaros, una alfombra decorará su cuarto y aportará calidez.

Como precaución elige un modelo con base antideslizante, o coloca una malla debajo de la alfombra. Así evitarás resbalones y caídas.

Un consejo: si no necesitas una alfombra demasiado grande, hazte con un modelo lavable a máquina en casa, como las de la fotografía, de Lorena Canals.

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