Las chimeneas proporcionan una visión agradable del fuego y calor sostenible a la casa, siendo empleadas incluso en exterior para poder gozar de momentos agradables contemplándolas. Existen diferentes energías para alimentarlas y también ofrecen muy distintas posibilidades decorativas. Descubre cuál es la que más te conviene en tu casa. Ya solo te quedará decidir cuál es la mejor manta con la que acurrucarte disfrutando de la maravillosa panorámica que proporciona un hogar.
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La mejor ubicación
En caso de que la chimenea tenga más bien una función ornamental, podrás colocarla donde te apetezca más, pero si quieres que sea un agradable foco de calor en la casa, dar con el sitio idóneo será vital para un buen aprovechamiento. Es por este motivo que normalmente las chimeneas se sitúan en el salón, que suelen ocupar el espacio central de la casa.
No descartes colocarla en el dormitorio o la cocina, si además de dar calidez al ambiente estas estancias se hallan en una situación destacada de la vivienda y tengan unas generosas dimensiones.
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Tipos de instalación
La primera pregunta que hay que hacerse cuando estamos pensando en instalar una chimenea en casa es si existe una salida de humos ya o, al menos, hay la posibilidad de instalarla, puesto que no siempre se permite, especialmente en los pisos. ¿Qué tipo de combustible descartar si no contamos con salida de humos? La leña, los pellets y el gas.
Las chimeneas eléctricas y de bioetanol ofrecen la ventaja de que no precisan salida de humos, así que serán la solución ideal en estos casos.
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Diseño abierto o cerrado
Las chimeneas abiertas ofrecen mucho encanto, aunque realmente si atendemos a conseguir un buen rendimiento de calefacción se deben seleccionar las cerradas. Se calcula que la eficiencia que logra una chimenea de leña abierta es de máximo el 30%, frente a las cerradas que puede llegar al 70% en el caso de emplear también leña y aún mayores resultados ofrecen las de pellets y gas.
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Requieren almacenamiento
Si atendemos a las chimeneas que requieren espacio para el almacenamiento, las que precisan más son las alimentadas con leña. Y otro inconveniente de estas es su mantenimiento, al precisar que se retiren las cenizas frecuentemente tras el uso. Así pues, son las más exigentes en cuanto a limpieza.
Por su parte, las chimeneas de pellets (un combustible ecológico a base de cilindros prensados realizados a partir de madera residual, serrines y virutas) se almacenan en un depósito. Así que lo mejor para garantizarte una buena autonomía, es que el modelo cuente con un gran depósito para no tener que recargarlo cada dos por tres. Además, este tipo de chimeneas genera pocas cenizas y son programables.
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Combustibles que no ocupan espacio en casa
Las chimeneas de gas, electricidad y bioetanol, son perfectas cuando no sobran los metros pues se trata de combustibles que no se almacenan.
En el caso de las de gas, en un modelo estanco la salida puedes situarla en la fachada y no necesariamente en la cubierta de la casa. Mientras que las de electricidad y bioetanol no tienen salida, por lo que su mantenimiento y limpieza es más sencilla al no tener que ocuparse de los conductos de salida.
Las biochimeneas, muy decorativas
Las chimeneas de bioetanol, también denominadas biochimeneas, no se emplean como aporte principal de calor de una estancia, sino que cumplen una función complementaria a la calefacción general. En realidad, su propósito es ornamental, aportando una agradable visión de su llama durante momentos puntuales, como leyendo en un rincón del salón, merendando en familia o en una cena con amigos. Este combustible, como comentamos, resulta ideal para huir de una instalación complicada, pues ni siquiera precisan conducto al exterior.
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Doble disfrute
Cuando exista posibilidad, en un salón abierto al comedor o un dormitorio conectado al baño o el vestidor, una posibilidad muy decorativa es que la chimenea sea de tres caras, permitiendo que se disfrute de verla desde los ambientes compartidos. Es lo que ocurre en esta propuesta, un proyecto de La Albaida.
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Claves de instalación y limpieza
En las chimeneas con tiro, incluso si el conducto de evacuación existe por una antigua instalación, tendrás que solicitar a un profesional que compruebe su estado. Además, consulta con la empresa experta si hay necesidad de reforzar el suelo, algo que no es muy habitual a no ser que el modelo instalado sea de bastante tamaño.
Y por supuesto, no descuides las tareas de mantenimiento de las chimeneas, pues de lo contrario podría disminuir su rendimiento.
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