Que no falte una luz general
Una lámpara suspendida en el techo es una de las formas más habituales de dotar al dormitorio de una luz general, al tiempo que se añade un elemento decorativo al espacio. Como el punto de luz suele quedar sobre la cama, puedes elegir un modelo grande y especial, ya que no estorbará al paso ni restará espacio en altura.
En cualquier caso, a la hora de elegir la lámpara de techo es importante tener en cuenta las dimensiones de la habitación para que el resultado sea equilibrado.
Además de las luminarias colgantes puedes apostar por otro tipo de soluciones como los plafones, perfectos para techos bajos, o los focos empotrados.
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