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Vitrinas, estanterías, sillas de estilo contemporáneo, piezas decorativas, cajas, lámparas… Son muchos los objetos de metacrilato que están presentes en nuestra casa.

También lo encontramos fuera, en mostradores y expositores de tiendas y ahora, en plena era Covid-19, en las pantallas anticontagio que solemos ver en muchos establecimientos.

Hoy analizamos los métodos de limpieza más efectivos para lograr que el metacrilato no pierda el brillo y la transparencia que lo caracterizan.

 

¿Qué es el metacrilato?

Si atendemos a su nomenclatura técnica hemos de llamarlo "polimetacrilato de metilo". Se trata de un plástico rígido y duro, con multitud de aplicaciones en la vida diaria.

Entre las características más relevantes de este material destaca su gran transparencia, lo que lo asemeja mucho al cristal. Sin embargo, resiste mejor los golpes debido a su mayor dureza, convirtiéndose en una opción más segura que el vidrio en muchas ocasiones.

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Aprovecha sus cualidades

Además de la enorme transparencia que presenta el metacrilato, posee otras características geniales que hacen de él un material práctico y especial que no debemos perder de vista.

- Es resistente y duro, y soporta muy bien los impactos.

- También ofrece una gran resistencia a la intemperie y a los efectos climatológicos, por lo que puede usarse en la decoración de exteriores.

- Es más ligero que el cristal.

- Puede moldearse mediante la aplicación de calor, y también cortarse o perforarse.

Como aspecto negativo hay que señalar que el metacrilato se raya con facilidad, algo que influye directamente en la forma en que tenemos que limpiarlo. Descubre la manera de hacerlo sin estropearlo.

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La limpieza cotidiana

Si tienes en casa muebles de metacrilato, como sillas o vitrinas, o una mampara para separar ambientes, es importante que aprendas a mantenerlo limpio cada día sin dañarlo. La tarea no es complicada.

Para lograr los mejores resultados has de evitar limpiarlo en seco. Conviene hacerlo siempre con una bayeta mojada. Prepara una solución de agua y jabón neutro, humedece la gamuza y repasa con ella las superficies de metacrilato. Quedarán perfectas sin apenas esfuerzo.

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Cómo eliminar las manchas difíciles

¿Tus piezas de metacrilato presentan manchas amarillentas o restos de grasa? Existen varias formas de acabar con ellas, aunque debes tener cuidado de no utilizar productos de limpieza agresivos que puedan dañar el material.

Puedes tratar de eliminarlas con agua destilada y jabón y, si esto no funciona, diluir un producto limpiacristales en agua (la proporción sería una parte de limpiacristales y tres de agua) y repasar con la mezcla.

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Productos que debes evitar a toda costa

En lo que a la limpieza del metacrilato se refiere hay ciertos productos que es mejor no utilizar, ya que podrían resultar dañinos para este material.

Los detergentes agresivos están a la cabeza de la lista, seguidos por el alcohol. Nunca limpies el metacrilato con alcohol, o con algún producto que lo contenga, porque puede dañarlo de forma irreparable ya que penetra en él y lo agrieta.

Tampoco debes utilizar vinagre de limpieza porque el ácido acético que contiene apaga el brillo del metacrilato.

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Los utensilios también importan

Además de detergentes fuertes y productos químicos que puedan dañar el metacrilato, has de evitar utilizar estropajos abrasivos y bayetas que puedan arañarlo.

A pesar de que se trata de un material bastante duro, el metacrilato se raya con facilidad. Por eso hemos de tener cuidado con los objetos punzantes. Utiliza para su limpieza bayetas de microfibra que te ayudarán a arrastrar la suciedad sin rayar la superficie.

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¡Ojo con los arañazos!

Si alguna de tus piezas de metacrilato presenta un arañazo poco profundo puedes tratar de disimularlo con pasta de flúor y una lija fina.

Comienza por limpiar la zona donde está el arañazo, frota con la lija sin apretar demasiado y después aplica la pasta de flúor con un algodón frotando suavemente. Deja que actúe durante unos minutos y retira con un paño húmedo.

Si no tienes a mano pasta de flúor puedes emplear pasta de dientes o bicarbonato de sodio.

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Utiliza un limpiador específico

¿Quieres que tus sillas de metacrilato luzcan perfectas? Puedes limpiarlas de vez en cuando con un producto específico para este material. Además de devolverle el brillo sin dañarlo, protege la superficie con un acabado antiestático que repele el polvo y evita que se adhiera a ella. Estos limpiadores se aplican con ayuda de un paño húmedo y no necesitan aclararse después.

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Un plus de desinfección

En ocasiones, además de una limpieza efectiva y concienzuda, necesitamos también desinfección. Es el caso, por ejemplo, de las sillas o de las pantallas protectoras que empleamos en muchos lugares públicos para evitar contagios de coronavirus.

Para desinfectar el metacrilato puedes utilizar lejía disuelta en agua (dos cucharadas soperas por cada lito de agua) y añadir unas gotas de jabón neutro. Aplica, deja actuar un par de minutos, y aclara con agua limpia.

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