Estas son las dudas más frecuentes al pintar una casa pequeña
Más que hablar solo de colores, sabrás cómo aplicarlos
Sabemos que a la hora de plantearse diferentes asuntos sobre decoración de interiores entran las dudas. Son las responsables de evitar que se avance. Por ejemplo, a la hora de pintar un piso pequeño, ¿siempre hay que hacerlo de blanco? ¿Puedo pintar los techos de otros color? ¿Y las puertas? Vamos a despejar todas esas dudas habituales que surgen relacionadas con pintura y casas pequeñas. ¡Verás crecer los metros!
¿Siempre color blanco para pintar un piso pequeño?
La razón de que los colores blancos o neutros claros y suaves sean los más deseados a la hora de pintar pisos pequeños es porque resultan extra luminosos y esa luminosidad hace que se refleje la luz natural del espacio y parezca más grande. Así que sí, los tonos claros son la primera opción para pintar pero no la única. Además, no condicionan la decoración, algo que sí ocurre con tonos más marcados.
¿Están vetados los colores intensos?
No solo de blanco se decora un piso pequeño. Puedes pintar en colores más intensos y fuertes, pero eso sí, lo hay más o menos adecuados. Para despejar esta duda habitual toma nota: los colores fuertes que mejor encanjan en pisos pequeños a la hora de pintar las paredes son los fríos y apagados (azules, grises o verdes). El toque resultará elegante.
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¿Cómo pinto las paredes si elijo un tono oscuro?
Lo más adecuado es pintar solo una pared del color intenso que elijas. El resto de frentes deberán ir en tono neutro (claro o blanco). De esta manera creas contraste y juegas con la profundidad del espacio. Es una buena opción para delimitar visualmente ambientes cuando la planta está abierta, un recurso frecuente en pisos mini para ampliar visualmente.
¿Algún tono que no sea tan intenso que pueda usar para pintar?
Hay un equilibrio entre los blancos y neutros y los colores intensos. Son las tonalidades medias. Estas son apropiadas para pintar pisos pequeños porque aportan matiz pero no saturan. Las tonalidades medias no resultan estridentes pero sí más personales. Precisamente por su intensidad puedes usarlas en más de una pared de un espacio mini. El color que elijas marcará el estilo (más cálido o frío, elegante o romántico…). Todos los colores tienen una versión de tonalidad media.
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Pinto todo de blanco: ¿resultará aburrido?
La respuesta es no. Otra de las dudas que surgen a la hora de pintar un piso pequeño es esta. Pensar en pintar todas las paredes iguales de blanco o neutro, sabiendo que es lo más apropiado, lleva a pensar que el espacio se pueda sentir frío, aburrido, demasiado minimalista o impersonal. Pero nada más lejos de la realidad. Esa monotonía desaparece en cuanto imaginas el ambiente con los muebles y sus complementos y textiles. Ellos aportan textura, trama, detalle y color. Puedes crear un espacio monocolor y que sean esas tramas y acabados los que enriquezcan. O jugar con los colores más vivos en los elementos que decoren el espacio.
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Matices entre colores neutros: ¿se notan?
Este proyecto de decoración de Natalia Zubizarreta Interiorismo hará que visualices bien la diferencia entre blanco y colores neutros. Fíjate en el color elegido para pintar las paredes y en el blanco de las molduras y zócalo. En pisos pequeños el blanco total consistiría en igualar el tono de paredes con el de la carpintería interiores. Pero es posible aportar matices sin perder ni sensación de espacio ni luminosidad. Juega con tonos tierra, topo, piedra… suaves. Y carpintería blanca. También puedes hacer la combinación al revés cuando las puertas son elementos a destacar (por ejemplo, antiguas y recuperadas).
¿Cómo pinto el rodapié?
En pisos pequeños pintar el rodapié y las puertas del mismo color que las paredes dará continuidad espacial. Si el piso es muy pequeño, sin duda, escoge esta opción. Al ver todo del mismo tono, unificado, las paredes parecen más aplias. Además, siempre puedes jugar con otro elemento divisorio como un bimbo a medida alistonado o un cerramiento interior de cristal.
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¿Pintura mate o brillo?
Las paredes que tiene cierto brillo (solo un matiz) reflejan algo más la luz. No hablamos de paredes acabado brillo sino satinado. Tienen un punto más brillante que el mate y aumentan ligeramente la sensación de amplitud. Ahora bien, también hace que se visualicen más las irregularidades de una pared. Solo si la pared está bien trabajada, debes optar por ellas. Si no es así, escoge una pintura para pintar las paredes de un piso pequeño acabado mate. Por supuesto, mejor lisas que con gotelé o aguas. Aunque tampoco están prohibidos los acabados con cierta textura. Por ejemplo, si el espacio es pequeño pero luminoso, estas licencias decorativas están permitidas. Imagina un efecto cemento…
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¿De qué color pinto el techo?
Generalmente pensamos en techos en color blanco para todas las casas. Solo los pisos de techos altos tienen la licencia de permitirse colores más potentes. Incluso los papeles pintados en el techo ayudan a delimitar ambientes o dar personalidad a espacios pequeños como un aseo de invitados. Pero debes saber que si pintas el techo de un tono más claro que el que uses en las paredes, tendrás la sensación de que se "aleja" visualmente del suelo. Así darás sensación de altura. ¡Todo sea por ganar amplitud en un piso pequeño!
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¿Y si además de pequeño es estrecho?
En cualquier piso pequeño hay que sacar partido a la luz natural haciendo que la ventana quede despejada. Pero además puede ocurrir que la estancia sea mini y estrecha o alargada. Usa la pintura a tu favor. Si pintas la pared del fondo (la más estrecha) de un color cálido como topo y el resto de paredes en una tonalidad más suave del mismo color o blancas parecerá que esa pared del fondo se acerca y sentirás la planta más cuadrada.