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Las plantas de exterior con flores en el jardín son el recurso perfecto para llenarlo de color, de belleza y, en muchas ocasiones, de evocadores aromas. Por eso, si te gustan las plantas trepadoras, hay variedades muy interesantes que se caracterizan por su bella floración. Son perfectas para decorar una pérgola o un muro, y la mayoría de ellas resultan fáciles de cultivar. Aquí tienes 10 plantas trepadoras con flor que te encantarán.

 

1. Glicinia (Wisteria sinensis)

Si hay un detalle que convierte a la glicinia en una planta espectacular es, sin duda, su magnífica floración. En primavera se llena de flores bellísimas lilas, azules o blancas que son una delicia. Se trata de una planta muy fácil de cultivar, a pleno sol o en semisombra, ya que crece casi en cualquier tipo de suelo, siempre que este retenga la humedad. De hecho, hay que tener cuidado y vigilar su crecimiento porque es muy invasiva. Una buena poda en septiembre cuando termine su floración será la mejor manera de controlar su expansión.

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2. Clemátide (Clematis spp)

Hace gala de un sinfín de variedades que se diferencian en el color de sus abundantes flores que pueden ser blancas, rojas, azuladas o moradas. La clemátide es una planta que requiere de ciertos cuidados para crecer. Necesita, por ejemplo, un suelo ácido y con bastante materia orgánica, y no soporta las temperaturas extremas por lo que si el clima es muy caluroso conviene plantarla en semisombra. En verano tendrás que regarla de manera abundante, aunque de forma espaciada en el tiempo, y asegurarte de que el suelo drena adecuadamente, porque no soporta el encharcamiento.

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3. Buganvilla (Bougainvillea spp)

Esta majestuosa planta es uno de los tesoros que crece de maravilla en zonas de clima mediterráneo. Es sobria en cuanto a sus exigencias y solamente tiene una necesidad: la luz. Por eso debes plantarla en un espacio muy soleado para que esté feliz y se llene de flores y de color. En realidad, la floración de la buganvilla no es tal como parece, ya que lo que parecen flores son en realidad brácteas de colores intensos que van del fucsia al rojo, pasando por el naranja. Por lo demás, se desarrolla bien aunque el suelo sea pobre y no requiere de mucho riego. Con que la riegues una vez a la semana, incluso en verano, será suficiente.

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Arco decorativo de jardín para plantas trepadoras

Lo puedes colocar a la entrada del jardín o utilizarlo para dividir tu jardín por zonas de una forma elegante. Está realizado en metal, es resistente a las inclemencias del tiempo y es ideal para rosales, hiedra, parras y otras especies de plantas trepadoras.

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4. Falso jazmín (Trachelospermum jasminoide)

Es una trepadora de gran belleza por su tupida vegetación verde intenso y sus flores blancas con forma de estrella, pequeñas pero muy numerosas. Además, poseen un embriagador perfume. Aunque su crecimiento es lento al principio, después se acelera (sobre todo si la riegas correctamente en verano) y puede llegar a alcanzar un tamaño considerable.

Preferirá que la plantes a pleno sol o, si no es posible, entre sol y sombra, aunque el sustrato no supondrá un problema ya que no es exigente en cuanto al tipo de suelo. Riégala una vez a la semana de forma moderada y conseguirás que esté esplendorosa.

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5. Pasionaria o Flor de la Pasión (Passiflora caerulea)

Lo más espectacular de esta trepadora, y la razón por la que es una buena idea incorporarla al jardín de tu casa, son sus maravillosas y peculiares flores que recuerdan a las de las plantas propias de los trópicos. La Flor de la Pasión se llena en verano de exóticos ejemplares rosas, morados o blancos, y de unos frutos comestibles también originales. Además se trata de una planta que crece rápido, en especial si le da el sol de pleno y el terreno se mantiene húmedo. Le gusta el riego abundante en verano y no le vendrá mal que la pulverices cuando el calor apriete. Eso sí, en invierno tendrás que protegerla de las heladas.

 

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6. Madreselva (Lonicera japonica)

La madreselva será la trepadora perfecta para ti si estás buscando una variedad que crezca rápido en lugares soleados o en semisombra. Si la riegas y mantienes su suelo húmedos y rico en materia orgánica, ella te regalará unas flores grandes, bellas y perfumadas, muy especiales. El único problema que puede plantearte la madreselva es que es bastante invasiva, por lo que has de estar preparado para controlar su crecimiento a través de la poda. Ten a mano las tijeras y disfruta de su belleza.

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7. Diplademia (Mandevilla laxa)

Si necesitas poner color en tu jardín, la diplademia puede ser la trepadora que estás buscando, ya que posee una floración de gran belleza y mucho color. Sus flores pueden ser rosas, rojas o blancas, y se caracterizan por su aroma. De rápido crecimiento, sus raíces necesitan suficiente espacio para desarrollarse, por lo que no es una buena opción si el rincón del jardín donde quieres plantarla es demasiado pequeño. Búscale una ubicación soleada, ya que prefiere el calor al frío, y riégala abundantemente en verano (dos veces a la semana).

 

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8. Rosal trepador (Rosa spp)

Si eres un apasionado de los rosales pero necesitas una planta trepadora, esta variedad es lo que estás buscando. Es similar a los rosales habituales, pero crece muy bien sujeta a estructuras y soportes. Por lo demás, comparte una floración espectacular en primavera de diferentes colores según el rosal (rosa, rojo, blanco o amarillo).

Un consejo: protege tus rosales trepadores de las plagas; son particularmente sensibles a ellas.

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9. Jazmín común (Jasminum officinale)

En esta ocasión se trata del jazmín real (no del “falso jardín” del número 4) y, si hay que destacar uno solo de los muchos encantos que posee esta planta, sería el magnífico y especial perfume de sus flores. El jazmín llenará tu jardín de un aroma espectacular. Es una planta fácil de cuidar, que resiste muy bien las temperaturas extremas, tanto el calor como el frío. De hecho, crece de maravilla a pleno sol y cuanta más luz recibe, mayor es su floración. En cuanto al riego, no necesita mucha agua, aunque el suelo ha de estar bien drenado. Conviene que la podes una vez al año, después de la floración.

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10. Tunbergia (Thunbergia alata)

Con sus bellas flores de color naranja intenso, la tunbergia es una planta perfecta para cubrir y decorar celosías o pérgolas en el jardín. Posee una floración larga, que te permitirá disfrutar de su belleza durante mucho tiempo. Además, es fácil de cultivar a pleno sol o entre sol y sombra. Solo has de procurarle un terreno bien drenado y regarla de forma moderada, intensificando un poco el riego durante el periodo de floración.

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