¿Compartes baño con tu pareja? Los baños para dos deben cumplir unos requisitos, sobre todo, si os levantáis a la misma hora y hacéis uso del baño -con o sin prisas- en la misma franja. De ahí, que para lograr una armonía, es importante planificar un baño para dos con doble lavabo e incluso ducha. Sin olvidar el espacio de almacén. ¿Repasamos los que necesitas?
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Espacio despejado al máximo
Siempre que sea posible, el diseño del baño compartido ha de tener en cuenta que puede haber dos personas al mismo tiempo en muchos momentos haciendo uso de él. Así que debes intentar reducir espacio de algunas piezas para dejar la zona central despejada. Esto hará más cómodo el uso del baño. Inodoro suspendido es una buena opción. Ten en cuenta que la ducha debe tener mínimo 70 cm de ancho y el lavabo, en función de modelo, pero 50 cm de fondo es una buena medida. En este baño para dos el espacio no es un problema. Cuenta con una bañera exenta y dos lavabos de pie de diseño cilíndrico, modelo Arquiect y griferia Round, de Porcelanosa.
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Lavabo doble, sea como sea
El frente del lavabo es uno de los elementos a los que hay que prestar especial atención en un baño para dos: ha de ser cómodo, funcional, estético y espacioso. Vamos, lo reúne todo. Opta por doble lavabo (de pie, sobre encimera o encastrado) o un diseño unificado -como este diseño de Duravit- con doble grifería. Contar con algo de espacio a cada lado para apoyar cosas es muy útil. Si no puedes tenerlo, una banda o estante sobre el lavabo o a los lados cumplirá la función. Muchas veces es suficiente con un pequeño espacio de apoyo pegado a la pared, que puede ser más espacioso si optas por una grifería mural.
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Piensa en el espejo
Que además de ayudarte a ampliar el espacio, no provoque peleas en un baño para dos. Debe haber espacio con dos espejos o una luna amplia para que os miréis los dos al mismo tiempo, usando el lavabo. De nada servirá doble seno si tenéis que empujaros a los lados para veros en el espejo. Así que ya sabes, ten en cuenta cómo distribuirás los espejos. No siempre han de estar sobre el lavabo si no hay espacio o si un espejo colocado en otro frente te dará más juego en la distribución. Piensa que si lo colocas en otra pared, puedes usarlo para maquillarte, secarte el pelo o peinarte.
En perfecta simetría
De dos en dos y de forma simétrica. En un baño compartido buscar la simetría da sensación de orden, unidad y equilibrio. Y al mismo tiempo, se siente el baño más organizado y amplio. Así que no dudes en planificar la zona del lavabo en simetría con diseños idénticos, como es estilosa composición con lavabos de pie cilíndricos en blanco, grifería de pie en negro y espejos redondos, de Nuovvo.
Cada uno, su espacio
Juntos pero no revueltos. El baño compartido por dos personas ha de asegurar que cada uno tiene un espacio para guardar "sus cosas". Es preferible repartir: un cajón para cada uno, una balda, un módulo cerrado… para que en ese compartimento tú tengas lo tuyo y él o ella lo suyo. Cada uno organizado como necesita para el día a día. Así que no descuides la capacidad de almacén con muebles en función de lo que neceistéis guardar. Muebles bajo lavabos, gavetas, cajones, módulos con puertas, estantes, repisas…
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Mucho orden
Y tengas el espacio de almacén que tengas, mucho o poco, el orden debe primar en un baño compartido. Dentro y fuera. Porque el espacio será usado por dos personas y todo debe quedar recogido para no alterar a nadie. Si los muebles están organizados por dentro con cajas y cestas y compartimentos para cada objeto será más fácil devolver cada cosa a su sitio tras usarlo y que las superficies estén despejadas y se sienta todo más limpio y amplio. Piensa qué vas a guardar, de qué tamaño, cómo y dónde y compra.
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Ducha doble ¡sí!
Si hay espacio (y tampoco se necesita muchísimo) una ducha doble puede ahorrar tiempo de espera en el baño para dos. Si compartís horas de ducha porque tenéis la misma rutina, puede ser una solución. Se trata de poner dos griferías en un plato de ducha rectangular. Basta con que el plato tenga de largo 1,40-1,50 m. Doble grifería para que cada uno la use de manera independiente.
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Un extra de capricho
Bañera exenta, hidromasaje o jacuzzi para dos en un baño compartido. ¿A qué te gusta la idea? Quizá sea un extra caprichoso pero que se puede hacer realidad si tienes espacio suficiente. Generalmente, además de una solución de este tipo, el baño ha de contar con una ducha para el día a día ya que disfrutar de un baño relajado obliga a disponer de tiempo. Pero sin duda, es una opción que puedes valorar si tu baño cumple los requisitos porque hay modelos dobles perfectos para compartir, como este de Gala.
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Con mucho estilo
No descuides el diseño de tu baño compartido cuando lo planifiques y reformes. Aprovecha para incorporar colores de tendencia, acabados de moda, notas que personalicen y añadan distinción. Piensa en los revestimientos, úsalos para diferenciar ambientes, pero también en el diseño de los sanitarios y de la grifería, las mamparas pueden aportar mucho; y la iluminación.
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Todo lo que la tecnología puede hacer por ti…
También en un baño para dos: griferías con sistemas de ahorro de agua y apertura táctil o con sensores; materiales antibacterianos para las encimeras del mueble del lavabo y otros que permiten crear soluciones de una pieza; platos de ducha antideslizantes y totalmente enrasados en el suelo; espejos retroiluminados; sistemas de hilo musical con altavoces prácticamente invisibles empotrados en el techo o integrados en el espejo; mamparas que se oscurecen cuando alguien usa la ducha… móntate un baño compartido high tech.
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