Puede que no acabes de ver la opción de colocar la cama delante de la ventana, como si esta fuera el cabecero. Pero hay ocasiones en las que es la única opción para sacar partido al espacio. En otros páises, esta práctica está algo más extendida, aunque en España nos cuesta. Somos más de levantarnos y disfrutar de las vistas que dejarlas a nuestra espalda. Pero si te gusta la idea o te ves obligado a optar por ella, estos dormitorios te servirán de inspiración.
Un buen aislamiento
Es fundamental que si colocas la cama debajo de la ventana en el dormitorio cuentes con un buen sistema de aislamiento y materiales de calidad. Por un lado el aislamiento del tabique en sí, de manera que no se caliente ni enfríe en exceso. Y por otro la perfilería y vidrios de la ventana. Siendo esto correcto, no se producen fugas ni pérdidas de calor ni tampoco entrada. Solo así conseguirás un buen descanso. Por supuesto, una opción si la habitación es larga pero estrecha con una ventana en uno de los laterales cortos es separar -como en esta propuesta de Kave Home- la cama y su cabecero (que concede intimidad a la cama en sí) algunos centímetros de la ventana.
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Usa los textiles como barrera térmica
Colocar cortinas de telas gruesas, incluso, dobles caídas es una buena solución para aislar térmicamente la zona de la ventana cuando la cama se coloca delante de esta. Deberás contar con algo de espacio de separación entre el colchón o cabecero y la pared para echar las cortinas cuando lo necesites. Ten en cuenta que puedes optar también por un estor que llegue hasta la altura del cabecero, instalado con o sin caídas en los lados.
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Cabecero corrido de obra debajo de la ventana
Aunque la ventana decore la pared del cabecero como si de una fotografía se tratara, su altura puede permitirte crear un cabecero a medida y/o de obra corrido en la pared, justo debajo, y que sirva de apoyo para el colchón. De esta manera, ganas algo de separación y aislamiento y puedes integrar las mesitas a cada lado de la cama o no, ya que es posible usar la propia repisa como solución de apoyo. Esta idea es una propuesta del estudio de decoración Dröm Living.
Con un cabecero con almacenaje sobre la ventana
¿Qué te parece esta idea? Un cabecero con almacenaje a cada lado permite ubicar aquí la cama delante de la ventana sin necesidad de añadir mesitas de noche. Una pieza de este tipo se asemeja a los cabeceros de obra y permite ubicarlo a unos centímetros de la pared, de manera que -como aquí- no se cancele la apertura de las hojas del ventanal.
Sin condenar el radiador
Para ubicar la cama debajo de la ventana, el radiador -que es frecuente que se encuentr en ese espacio- no debe quedar condenado. Si la cama lo tapa por completo no se distribuirá bien el calor. Así que antes de considerar ubicar la cama en ese lugar, piensa si puedes desplazar el radiador. En caso de que el sistema de climatización sea por conductos o suelo radiante en tu dormitorio, no tendrás problema.
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Controla la entrada de luz
Si no hay persianas ni contraventanas en la ventana y vas a colocar la cama delante, piensa que tendrás que controlar la entrada de luz para que al amanecer no te moleste. Para ello puedes recurrir a estores tipo screen con diferente grado de apertura que logran oscurecer bastante o bien un diseño específico con tela de oscurecimiento (son telas opacas como las que hay en algunos hoteles).
¿Dormitorio tubular y ventana joya?
Parece que en este espacio se dan las dos condiciones así que aquí es casi obligado colocar la cama debajo de la ventana y cederle el protagonismo decorativo. Esta habitación es aprovechable como estudio o con una cama individual pero si lo que necesitas es ubicar una cama doble no queda más remedio que colocarla delante del ventanal. La opción es dejar un paso muy estrecho (lo mínimo son 50 cm) a cada lado del colchón hasta la pared o arrimarlo a un lado y dejar más espacio el paso en el contrario.
Con un cabecero a modo de zócalo o arrimadero en la pared
El estudio Chango & Co. ha ubicado la cama delante de la ventana en esta habitación aprovechando la disposición horizontal que tiene. Para decorar, proteger la pared de roces y aislarla ha optado por revestir la pared en la zona baja con tela de tapicería acolchada a modo de zócalo. Así no necesitarás pensar en un cabecero o estructura de cama que lo integrre pero la zona quedará perfectamente vestida.
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Con la ventana a un lado (o ambos)
Puede pasar que la ventana no quede centrada en la pared y, por tanto, tampoco con la cama. Sin embargo, el cabecero monta ligeramente sobre el hueco. Este es un ejemplo de la situación y de cómo se ha salvado con acierto a pesar de la asimetría de la composición. Si en tu caso el dormitorio te obliga por su distribución a apoyar la cama en un frente con dos ventanas separadas algunos centímetros entre ellas, también podrías aplicar este caso, dejando el cabecero en medio aunque se superpusiera en ambas ventanas. Eso sí, tienes que poder abrir la ventana para ventilar.
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