1/8 © deulonder arquitectura doméstica

Despensa a la vista

Esta opción de decoración no tiene nada que ver con sacar partido al espacio. Tal vez es todo lo contrario, pero nos hemos enamorado de ella. Porque, con sinceridad, las despensas suelen ser lugares oscuros, y esa cualidad es muy inteligente pues se aprovechan espacios sin luz para algo que no lo precisa, como almacenar alimentos. Además son zonas frescas al resguardo del sol y de la calefacción. Sin embargo, ¿te imaginas una despensa a la que se accede mediante una pared de ventanal? Un lugar con luz y armonía que transmite buenas vibraciones. No todo va a ser aprovechar espacio…

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2/8 © Warren

Despensa en el pasillo

En esta búsqueda de un lugar donde establecer el almacenaje de todo lo que necesitamos en la cocina, un pasillo ancho, una zona de paso o un recibidor puede ser una opción muy interesante. Existen muebles que disimulan muy bien lo que guardamos dentro y que, sin embargo, mantienen una segmentación enorme, facilitando la accesibilidad a los productos y su buena catalogación.

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3/8 © Moon Architect and Builder

Despensa en la buhardilla

Los metros cuadrados son sagrados aun cuando vives en un chalet. Y en esta lucha por sacar partido al espacio, la buhardilla de la casa se puede transformar en muchas zonas de utilidad que sería un lujo tener en las plantas de vivienda, como una despensa o un zapatero. Moldea las estanterías para salvar el espacio robado por el ángulo del tejado y haz que todo esté ordenado y en su punto. Una despensa bien organizada te ayuda a ahorrar, porque ves bien la materia prima con la que puedes trabajar, y puedes conservar los alimentos sin apilamientos innecesarios.

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4/8 © Design Harmony - Holland Photograpy

El súper armario al rescate

Este tipo de muebles construidos a medida son la solución más eficaz para maximizar el espacio y tener todo a mano cuando no tenemos una habitación completa y disponible para convertirla en una despensa. Los muebles despensa son muy útiles porque disponen de estantes de varias anchuras que hacen que los botes pequeños siempre estén a mano, y también que puedas acceder a ellos de una forma cómoda sin favorecer el apilamiento y el almacenaje.

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5/8 © Locati Architects

Frascos a la vista

Si ninguna opción de despensa encaja contigo, puedes optar por llenar tus estanterías de grandes botes donde meter los alimentos a granel. No es tan versátil como una despensa, pero siempre puedes utilizarlos para tener a mano las materias primas más útiles y a la vez decorar tu espacio de creación gastronómica con elementos auténticos y llenos de texturas y color.

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6/8 © The Closet Works, Inc.

Utiliza estanterías que giran

El gran problema de muchas despensas es que los productos tienen un tamaño pequeño, pero hay muchos y es difícil acceder a ellos. A veces para llegar a una lata de tomate tienes que quitar del medio una decena de cosas, y luego volver a ponerlas en su lugar. Por lo que puedes acabar elaborando tu preparación con otra cosa que te pille de camino y que esté más a mano, antes de llegar a esa hipotética lata de tomate. Para salvar esta circunstancia existen las estanterías giratorias que, como si fueran el expositor de un escaparate, te permite girarla para llegar a lo que hay al otro lado y tener todo a mano.

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7/8 © The Organized Home

Soluciones sencillas para tener lo indispensable a mano

Las frutas y las hortalizas son alimentos de primera necesidad cuando estamos en la cocina. Muchos de ellos está demostrado que en la nevera se conservan muy mal, y cambian sus cualidades, su textura y su sabor. Por eso, es bueno tenerlos en la despensa o en la propia cocina. Como son alimentos muy socorridos, una muy buena idea es acomodarlos en unos cajones con carril y rejilla, para minimizar la posibilidad de que se pudran y para tenerlos siempre a un tiro de cajón.

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8/8 © Christopher Peters - Katie Peters

La versión más sencilla de armario despensa

No es ningún secreto que un buen armario puede suplir la existencia de una despensa. Generalmente son muebles a medida que tú misma puedes configurar para elegir qué tipo de repisas necesitarás, en función de los tamaños de los alimentos y de los empaquetados. Aunque cualquiera desearía una despensa con puerta y varios metros cuadrados de estanterías, un armario de este tipo facilita mucho de lo que puedes necesitar sin tener que salir de la cocina, por lo que es muy útil para cocinar.

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