Mostrar nuestra colección de zapatos a veces es un orgullo, pero cuando las casas son pequeñas almacenar nuestro calzado puede ser un auténtico quebradero de cabeza. Te presentamos unas cuantas ideas para tenerlo todo en orden.

Esencias en cajas pequeñas

Utilizar una estantería para colocar los zapatos en pleno salón puede ser un atrevimiento, pero existen formas imaginativas de realizar el mismo objetivo dando una imagen muy elegante. Es sencillo, no hace falta un zapatero, sino guardar los zapatos en cajas de archivador de elegante color blanco. Para saber qué modelo hay en cada caja puedes añadir una pequeña fotografía en la zona frontal.

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Zapatos en el baño

Este mueble hace las veces de calzador, aprovechando el pasillo del baño. Es un zapatero sin puerta con la clásica inclinación para situar los zapatos en perspectiva y verlos adecuadamente desde arriba. Se trata de un mueble que puede hacerse a medida o comprar en grandes marcas de decoración. El efecto es muy agradable a la vista, y si utilizamos una zona de paso del dormitorio o del aseo podremos aprovechar muy bien sus dimensiones, resultando útil y atractivo a la vez.

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Un armario normal, que esconde toda nuestra colección

Un armario común puede servir de zapatero, aunque en este caso es un modelo especialmente diseñado para cumplir con la clásica angulación de las repisas. Sin embargo, es una cuestión que podría ajustarse en cualquier otro mueble y generar ese mismo efecto. Lo más importante es mantenerlos ordenados, limpios y a mano, y eso no quita que lo situemos en pleno salón si nuestra casa es pequeña.

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Zapatero de sueño

Este es el sueño de cualquier amante de los zapatos: tener todos sus pares ordenados en un armario vestidor. Aprecia que cuando se realizan estos diseños a medida se integran tiras de luces led para una correcta iluminación de toda tu colección. Este tipo de zapateros no solo cumplen una función de almacenaje, sino también de deleite, porque su exposición es en sí mismo un placer de la decoración de tu casa.

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No siempre los zapatos son el centro de atención

En casas con un espacio limitado es adecuado saber priorizar de qué hacemos gala y qué cuestiones mantenemos ocultas. Los zapatos pueden ser un quebradero de cabeza cuando no tenemos espacio suficiente para almacenarlos, y no hace falta hacer de la necesidad virtud o hacer una exposición de ellos. Por eso existen estos zapateros tan discretos para poder repartirlos en cualquier zona de la casa, incluso en el salón, como si de una repisa de libros ocultos se tratara. Los zapateros tienen la gran ventaja de que tienen un fondo muy estrecho, al almacenar los zapatos en vertical. Eso hace que no destaquen especialmente en cualquier zona de la casa, y sean un armario muy “camuflable”.

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Un diseño discreto y elegante

Nadie diría que este armario es un zapatero. Solo podemos adivinarlo al apreciar que su fondo es muy estrecho. Los tiradores son cuadrados que se engarzan en su diseño. Lo interesante de este tipo de soluciones es que ocupan poco espacio, se integran muy bien con la decoración del salón, y dan cabida a muchos pares de zapatos, pues tienen tres cajones y cada uno permite dos secciones.

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