Ubicada en un paraje de tierra rojiza y robles maduros en Segovia, Sotopinilla es una vivienda de 170 m² diseñada por Tini Living y sus arquitectos en colaboración con el estudio de arquitectura delavegacanolasso. Este proyecto explora la esencia de la arquitectura moderna: precisión, proporción y respeto absoluto por el paisaje.

Casas que 'llegan' para disfrutar del entorno
Una casa con sistema constructivo industrializado no es una vivienda prefabricada al uso, sino una arquitectura desarrollada a partir de módulos producidos con precisión en taller y ensamblados en destino. Esto permite controlar cada detalle del diseño y garantizar la calidad de los acabados.
Sotopinilla es el primer proyecto de la serie Case Study Tini, concebida por Tini Living (www.tiniliving.com) en colaboración con el estudio de arquitectura delavegacanolasso arquitectos (www.delavegacanolasso.com). Se trata de una línea de construcciones de sistema industrializado, cuidadosamente diseñadas con los más altos criterios arquitectónicos, que recoge la herencia de la arquitectura moderna de mediados del siglo XX y la reinterpreta para adaptarse a las necesidades de hoy. Se busca precisión constructiva, claridad formal y una relación íntima con el paisaje.

Segovia como punto de partida
En este proyecto, el emplazamiento marca su identidad. La casa se ubica entre cárcavas de tierra rojiza, robles centenarios y un relieve accidentado. Era necesario que la casa no se impusiera sino que se fundiera. Sotopinilla cuenta con dos construcciones en el terreno: la casa principal y un segundo módulo de invitados.
La vivienda principal se reviste de viroc rojo, un material de construcción compuesto por virutas de madera y resinas minerales, prensado en paneles resistentes. Su tono se mimetiza con los tonos terrosos del entorno segoviano.

El lujo de no necesitar más
Con 170 m² construidos, la vivienda ofrece lo justo y necesario, demostrando que el lujo reside en no necesitar más. Los espacios de Sotopinilla están optimizados para acoger la vida cotidiana, sin excesos. Se prioriza la comodidad y la conexión con el entorno a través de una casa que sustituye gran parte de las paredes exteriores por cerramientos acristalados que la conectan.

Interior comunicado entre sí y con el exterior
Dentro, la casa despliega un universo cálido gracias a los paneles de pino que proyectan luz dorada y a un pavimento de roble y corcho, elegido por su textura y silencio. Cada material ha sido seleccionado no solo por su belleza, sino por su capacidad de envejecer con dignidad. Esta es la zona de día, que comparten la cocina, el comedor y el salón. Cada uno de los ambientes tiene el lujo de disfrutar de las vistas al paisaje.

Patios que son umbrales
Los muros encalados in situ definen patios interiores y zonas de transición. Esos espacios intermedios difuminan la frontera entre dentro y fuera, y convierten cada acceso en una experiencia sensorial. Sofá de Pummba, butacas y taburetes de Boca Concept y cocina de Cubro.

Los detalles de un interiorismo seleccionado
En este proyecto todo dialoga: la arquitectura con el paisaje y los interiores con el espacio. El interiorismo se completa con piezas cuidadosamente elegidas para que con discreción ofrezcan funcionalidad y estética. La iluminación juega un papel esencial para reforzar el sosiego con tonos cálidos y luz tamizada. Las líneas curvas se cuelan entre las rectas para suavizar la percepción y todos los tonos son calmados, sin estridencias. Lámparas de Faro Barcelona.

Arquitectura racional
"La proporción, la orientación y la integración con el lugar son los principios que guían el diseño. Nada es arbitrario. Cada decisión responde a una búsqueda de claridad, permanencia y respeto por el entorno", recuerdan desde Tini Living y delavegacanolasso arquitectos. En la imagen, la vista del jardín exterior con piscina desde el salón.

El jardín con piscina
No podía faltar en un proyecto así, ese jardín que completa la vida al aire libre. Se trata de una extensión al nivel de la casa con piscina y zona ajardinada. Es la tapia, curvada con intención, la que crea una pradera suave que respeta una encina existente. El objetivo era que los elementos de este jardín acompañaran al paisaje, no que destacaran, "ofreciendo un lugar de contemplación y calma en medio de la naturaleza", matizan sus creadores.

Una casa continua
Esta es una imagen más general de la casa, donde todos los ambientes se sienten a mano. Los paneles de pino de las paredes ofrecen ese abrigo cálido al espacio. Los acristalamientos llenan de luz cada rincón y ofrecen no solo amplitud sino continuidad en el diseño.

Zona de trabajo
En una zona de paso desde el área social a los dormitorios se crea un espacio de trabajo, todo realizado en la misma madera de pino que reviste las paredes y puertas. Un escritorio corrido se apoya en un extremo en una de las baldas de la librería de la pared.

Dormitorios que miran fuera
Los dormitorios en este proyecto se conciben como espacios de contemplación. Revestidos con paneles de pino que aportan calidez y serenidad, acogen camas orientadas hacia grandes ventanales que enmarcan el paisaje. No hay elementos que distraigan: el interiorismo es sobrio, casi monástico, para que lo único que destaque sea la conexión directa con la naturaleza exterior.

Baño, refugio de serenidad
Un baño todo en blanco con lavabo y encimera de una pieza y toallero integrado. Así han logrado los responsables de este proyecto una agradable sensación de calma. Luminoso y con gran sensación de espacio, la sencillez del conjunto permite que cada gesto cotidiano se sienta más pausado, casi ritual.

Casa de invitados
A pocos metros de la casa principal, un módulo Tini separado actúa como habitación de invitados. Se trata de un módulo de acero galvanizado, que refleja los tonos del bosque y se diluye entre los robles. En el interior, los revestimientos de bambú y roble ofrecen calidez y serenidad.

Amanecer y anochecer en la naturaleza
Así es como se siente el espacio de la casa de invitados. Esta imagen muestra al fondo la fachada roja de la casa principal. Este módulo ofrece privacidad a los invitados y les regala un momento de desconexión total con una concepción del espacio abierta a través de los ventanales y con una plataforma sobre el terreno que les permite acercarse aún más al entorno.

Las ventajas de un sistema de construcción industrializado: tiempo y eficiencia
Tras acercarnos a este proyecto concreto, resulta interesante cerrar el artículo con las ventajas que ofrece este modelo de sistema constructivo. Una de ellas hace referencia a los plazos de ejecución, que se reducen de manera notable respecto a la construcción tradicional, ya que gran parte del proceso se lleva a cabo en fábrica. Además, la segunda ventaja que conviene destacar es la eficiencia en el uso de materiales, que disminuye el desperdicio, optimiza recursos y asegura una mayor sostenibilidad, logrando viviendas de alta calidad en menos tiempo y con un impacto ambiental más bajo.