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Ahora que el calor aprieta y el ascenso de las temperaturas parece no tener fin, descubrimos otra más de las muchas ventajas de cultivar plantas de interior: la capacidad que tienen para refrescar la casa de una manera natural.
Si bien el efecto no es comparable al aire acondicionado, las plantas consiguen bajar unos cuantos grados la temperatura interior de un espacio, si sabes cómo elegirlas y colocarlas. Hemos hablado con Miguel Carmona, responsable de plantas de interior de Verdecora, y nos ha contado de qué forma consiguen las especies vegetales refrescar el ambiente.
© Adobe StockUn recurso natural, sostenible y económico
Cultivar plantas en casa es una estrategia perfecta para decorar los espacios y aportar naturalidad, pero también nos ayuda a refrescar el ambiente en verano, cuando el calor aumenta. “Las plantas, al hacer la fotosíntesis, absorben dióxido de carbono y expulsan oxígeno. También liberan humedad, de forma que humidifican el ambiente y consiguen bajar la temperatura y, sobre todo, evitar que se disparen los grados de forma descontrolada. Por eso merece la pena cultivarlas en los espacios de la casa en los que más tiempo pasamos, como el salón”, nos cuenta Miguel Carmona.
Se trata de una estrategia a tener en cuenta, ya que las plantas son un recurso natural que, además de asequible por económico, es sostenible. No contaminan, no consumen recursos, ni generan huella de carbono. Se trata de una forma natural de climatizar el ambiente.
© Adobe Stock¿Cómo refrescan las plantas tu casa?
Las plantas de interior consiguen reducir la temperatura ambiental mediante la fotosíntesis, el proceso natural a través del que se alimentan. Las plantas absorben dióxido de carbono y, tras la fotosíntesis, liberan oxígeno y vapor de agua. Esto mejora la calidad del aire y hace que el ambiente sea más fresco, es decir, produce una sensación de frescor muy agradable. “Lo que realmente se consigue mejorar si cultivamos plantas de interior en casa durante el verano es la sensación térmica. En realidad, las plantas no absorben calor, pero sí consiguen bajar ligeramente la temperatura y hacen que la sensación de frescor sea mayor”, explica el experto.
© Adobe StockLos factores que influyen
En la forma en que las plantas mejoran el ambiente de tu casa y consiguen climatizarlo inciden diversos factores que debemos tener en cuenta. Hay que valorar las dimensiones de la habitación a refrescar, la temperatura real del ambiente, el número de plantas que vamos a colocar, dónde vamos a ponerlas, etc. Todos estos aspectos son muy relevantes a la hora de lograr que las plantas refresquen tu casa y se cree una atmósfera de bienestar, por lo que deben ser tenidas en cuenta.
© Adobe StockCrea una pequeña jungla
La estrategia más importante se centra en cultivar varias plantas y crear con ellas islas de frescor en el salón y en otros espacios de la casa. “Una sola planta en tu salón difícilmente podrá controlar la temperatura del ambiente. Cuando lleguen los días más calurosos del verano, no notarás su efecto refrescante porque, sencillamente, no tendrá capacidad para modular la temperatura por sí sola. Sin embargo, si reúnes unas cuantas plantas de diferentes especies y las colocas todas juntas en un espacio del salón, la cosa cambia”, explica Miguel Carmona. “La clave para conseguir una casa más fresca está en agrupar varios ejemplares en una zona estratégica para crear un pequeño microclima de frescor y humedad”.
© Adobe StockPantallas que protegen y aíslan
Una idea que realmente funciona a la hora de conseguir que las plantas mitiguen el calor estival consiste en “colocarlas cerca de una ventana orientada al sur o al oeste, en una entrada de aire o en la parte de la estancia en la que incida el sol y el calor, de forma que actúen como una cortina vegetal capaz de reducir la entrada del sol en la estancia. De esta forma podrán regular mejor la temperatura”, afirma Carmona. Eso sí, no prescindas de las cortinas y persianas ya que protegerán a tus plantas de los rayos directos del sol.
© Adobe StockLas especies colgantes son perfectas para mitigar el calor
Además de crear pantallas vegetales delante de las ventanas y de las paredes más expuestas al sol directo, puedes instalar plantas colgantes en soportes. Es una forma de crear también pantallas, esta vez elevadas, que actúen como parapeto ante el calor de esta época. Ayudan a reducir la temperatura y también decoran: las plantas suspendidas de soportes de cuerda o macramé son una belleza.
Un consejo: otra estrategia para controlar el calor consiste en colocar macetas con plantas en el suelo si a través del pavimento de baldosas se transmite el calor.
© Adobe StockEl riego, una tarea esencial
Durante las semanas más duras del verano, cuando el calor no da tregua, el riego se convierte en uno de los cuidados esenciales que deben recibir las plantas de interior. No puedes descuidar el aporte de agua, ya que para poder refrescar el ambiente las plantas han de estar bien hidratadas. Riégalas a primera hora de la mañana, o a última hora de la tarde, porque en esos momentos hace menos calor y el agua se evapora más lentamente.
Un consejo de experto: “si colocas un recipiente con agua cerca de un grupo de plantas, estas ayudarán a evaporarla lentamente, aumentando la humedad ambiental. Es una forma de potenciar un efecto de lo más refrescante”, cuenta Miguel Carmona.
© Adobe StockPulverizar las plantas para conseguir más frescor
Miguel Carmona nos ofrece un truco de experto: “Además de regar convenientemente las plantas en verano, hay un gesto que podemos realizar a diario y que es muy efectivo para combatir la temperatura interior. Se trata de pulverizar las plantas. La mayoría de las especies, en especial las tropicales, agradecerán un buen pulverizado con agua tibia y también es una forma práctica de generar más humedad”, explica.
© Asobe StockHelechos: especies que aumentan la humedad
Si bien todas las plantas aportan sensación de frescor, hay algunas que liberan más cantidad de vapor de agua y, por tanto, son más eficaces para regular la temperatura interior de la casa. Es interesante elegirlas para convertir los espacios en ambientes más cómodos y agradables.
Un ejemplo es el helecho espada (Nephrolepsis exaltata) que hace gala de un índice muy alto de transpiración, lo que la convierte en una especie ideal para refrescar cualquier estancia. Igualmente, el helecho de Boston, perteneciente también al género Nephrolepsis, es una planta perfecta para regular la temperatura interior de un ambiente.
© Adobe StockEstas plantas regulan la temperatura
Aunque todas las plantas hacen la fotosíntesis y liberan oxígeno y vapor de agua en este proceso, hay algunas especies más interesantes porque liberan más humedad y son perfectas para crear microclimas térmicos. Algunas de ellas son:
- Palmera de salón (Chamaedorea elegans): una planta de buen tamaño, perfecta para crear pantallas vegetales que mitiguen la entrada de calor. Es fácil de cultivar.
- Ficus (Ficus benjamina): aporta frescor visual y ayuda a regular el calor.
- Poto (Epipremnum aureum): ideal para cultivar como planta colgante, es sencilla en cuanto a los cuidados que requiere y muy transpirable y capaz de refrescar el ambiente.
- Areca (Dypsis lutescens): una planta purificadora que también aumenta la humedad del salón donde la pongas.
- Sansevieria (Sabsevieria trifasciata) o lengua de suegra: lo curioso de esta planta es que hace la fotosíntesis a la inversa que el resto de especies. Es decir, absorbe dióxido de carbono y libera oxígeno por la noche y no por el día, por lo que es perfecta para poner en dormitorios. Se trata de una planta que purifica el aire y transmite una gran sensación de frescor.
© Adobe StockEspecies que refrescan y purifican el ambiente
Son varias las plantas capaces de aumentar la humedad y regular la temperatura interior. Algunas de ellas, además, también purifican el aire. “Según una investigación llevada a cabo por la NASA, algunas plantas son capaces de limpiar el aire de una habitación filtrando los componentes, más o menos tóxicos que hay en el aire, como benceno, xileno, tricloroetileno y formaldehído. Es el caso del espatifilo (Spathiphyllum) y la cinta o malamadre (Chlorophytum comosum 'Variegatum'), entre otras", nos cuenta Miguel Carmona.
