Prepárate a ver tu casa en color plata, porque esta temporada el acabado cromo es tendencia de decoración y viene dispuesto a integrarse en todas las estancias, independientemente del estilo. Este brillo metálico recuerda a la estética retro, pero también se fusiona con la idea del futurismo, otro estilo también de moda.
Su regreso puede responder al triunfo del maximalismo, que nos aleja del minimalismo neutro y la limpieza visual, quizás al flechazo que solemos tener con el look industrial y el deseo de vivir en una casa tipo 'loft, o, simplemente, nos hayamos cansado de los cálidos (y clásicos) dorados y busquemos la modernidad de lo plateado.
Sea cual sea la razón, lo cierto es que en este 2025 el plateado, tanto brillante como menos llamativo, es el elegido. Y tiene todo, remarcamos el todo, para ser la estrella de nuestras estancias, tal y como sucede en este ambiente de Knoll. Te decimos de dónde viene, a dónde va y cómo integrarlo en tu vivienda.

Su historia: pasado y presente
Esta tendencia aparece en los años 20 y 30, durante la era del diseño de interiores 'art déco', cuando el cromado se generalizó y los estilos se centraron en materiales lujosos y el diseño industrial. Después tuvo su impacto en el 'mid-century', piensa en la silla Wassily como una buena representante, y después regresó en los años 70 con el retrofuturismo y su aire espacial. Ahora vuelve demostrando que no ha perdido personalidad ni encanto, como prueba esta lámpara de sobremesa de GUBI, dispuesto a conquistar la casa actual.

Su relación con la luz y los colores
No está solo. Sus propiedades reflectantes y su relación con la luz establecen diferentes planos en la decoración, aportando profundidad y dinamismo, sin que tengas que hacer nada más. Sin olvidar que su brillo contrasta y eleva el look de las superficies mate.
Si quieres reforzar ese efecto, usa el blanco a tu favor. Utilízalo en paredes y techos, como en esta propuesta de Westwing. Una caja luminosa y amplia, donde los brillos metalizados encuentran un lugar donde lucirse. Los detalles en madera refuerzan su calidez y aportan encanto.

Con otros brillos
Parece que el acabado cromo solo puede encajar con acabados plata. Sin embargo, aunque te cueste visualizarlo, otros metales, como dorado, latón o cobre, también se sienten cómodos con él. La clave para que funcione está en lograr equilibrarlos, para que texturas y acabados no choquen entre sí y logren un resultado armonioso.
Por eso, no tengas miedo en combinar. Juega, así, con la sofisticación del color oro, como en esta propuesta de HK Living, o la calidez del cobre, que te recuerda a la casa de tu abuela. La mezcla siempre enriquece.

Potencia sus efectos
Para evitar que su aparente frialdad se apodere de toda la atmósfera, es preciso que lo incorpores bien, haciendo que forme parte de estancias cálidas y acogedoras. ¿Cómo lograrlo? A través de ciertos materiales y colores. Un buen acompañante es la madera. Este material natural logra, por una parte, imprimir sensación de hogar, y, por otra, realzar el carácter industrial. Las fibras vegetales también son una buena forma de hacer que eleven la temperatura visual.
Mientras que si quieres espacios llenos de vida, recurre a las plantas o arreglos florales que, además, darán un toque de color y potenciarán la sensación de relax. En esta propuesta de Fritz Hansen, la madera, la luz natural que se cuela por el gran ventanal y los tonos neutros diseñan un salón en calma, dinámico y moderno.

Juega con los textiles
Cortinas, cojines, mantas o tapicerías son capaces, no solo de restar frialdad y aportar un toque más hogareño al metal, sino también ayudar en la creación del estilo de la estancia. Así, una butaca de lana bouclé o unas cortinas de lino pueden favorecer una atmósfera rústica, en la que la decoración cromo se sienta cómoda. Un sofá de terciopelo, hacer lo mismo hacia una estética moderna y sofisticada o un sillón de cuero marrón, hacia una industrial.
De la misma manera, ten en cuenta el poder de las texturas a la hora de crear atmósfera y transmitir sentimientos. Así, en esta propuesta de HK Living, la lámpara de sobremesa, colocada a modo de escultura, se rodea de textiles cálidos y apetecibles, que, por un lado, aportan sensación de hogar y, por otro, dan una pincelada contemporánea y lujosa.

En pequeñas pinceladas
Lo mejor para introducir este acabado sin esfuerzo y sin pasarse, para no caer en lo retro o en la era espacial, es empezar con los accesorios decorativos. Piezas pequeñas, como lámparas de sobremesa, candelabros o espejos, te permitirán transformar las estancias y ver cuánto riesgo estás dispuesta a adoptar. En esta propuesta de Frama, un simple taburete marca la diferencia, aportando su propio toque al ambiente.
Otra manera de tomar contacto es mediante detalles que suelen pasar desapercibidos, pero que tienen realmente importancia. Hablamos de picaportes de las puertas de paso, tiradores de los muebles de cocina o interruptores.

O en piezas principales
Si prefieres pecar de cierta extravagancia y no temes al qué dirán, úsalo en las piezas principales de tu hogar. Desde elementos de mobiliario, como estanterías, mesas o sillas, hasta muebles de cocina, encimeras o electrodomésticos.
En esta propuesta de La Redoute Interieurs, la mesa de comedor se combina con un sobre de cristal, mientras que los asientos aportan un toque de color, creando contrastes, llenos de encanto. No le tengas miedo, lleva tiempo contigo, aunque puede que no te hayas dado cuenta. Lo decíamos anteriormente, está presente en muchos iconos de diseño.

Su amigo el minimalismo
No tiene complejos y es fácil de integrar en distintos estilos decorativos, también clásicos y eclécticos, y materiales. De esta manera, el minimalismo y el cromo han encontrado el equilibrio perfecto para crear una nueva tendencia moderna y llena de encanto y personalidad. Aunque ya han conquistado interiores por separado, combinados, sorprenden aportando nuevos aires más frescos y ligeros.
El resultado son espacios limpios, despejados y de gran impacto visual, como ocurre en esta propuesta de Fredericia, donde 'el menos es más' tiene lugar de una forma sofisticada y diferente, enlazando muy bien con el concepto de lujo silencioso.

En espacios de estética industrial
Si hay un estilo donde los acabados cromados se sientan cómodos ese es el industrial. En las viviendas tipo 'loft' encontrará el ambiente propicio para dar rienda suelta a su expresiva frialdad y ser la estrella de los espacios, sin tener que dar explicaciones.
Al combinarlo con madera y textiles amorosos se volverá más cercano y apetecible, como ocurre en esta propuesta del estudio de interiorismo Coblonal. Aquí, la cocina, vestida de acero inoxidable, actúa como punto focal y potencia los flujos circulatorios de la vivienda, proporcionando sensación de amplitud y continuidad.

Sin problemas de adaptación
Capaces de encajar en distintos estilos decorativos, las piezas en cromo son una buena alternativa en toda la vivienda, incluidos los espacios exteriores. Su resistencia, durabilidad y fácil limpieza les permiten pasearse sin temor por todos los rincones. Además, resultan ligeras y no recargan, por lo que son también idóneas en casas pequeñas.
Esta propuesta de Zara Home es un ejemplo de su versatilidad y belleza. La mesa auxiliar y la lámpara de sobremesa pueden ser un apoyo decorativo en la cocina, el recibidor, al lado de los sofás del salón...