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Antigua casa de Taylor Swift en Cape Cod© Getty Images/Berkshire Hathaway properties

Estilos decorativos

La increíble mansión de Taylor Swift en Cape Cod sale a la venta por 13 millones: así es por dentro

Este espectacular refugio costero, que Taylor Swift compró cuando salía con Conor Kennedy y luego vendió a los pocos meses cuando la pareja rompió su relación, combina un estilo playero relajado con una decoración sofisticada y elegante y toques rústicos, que aportan calidez y autenticidad.


9 de mayo de 2025 - 12:12 CEST

Situada cerca del Kennedy Hyannis, un complejo del clan Kennedy, Taylor Swift adquirió esta espectacular mansión cuando estaba saliendo con Conor Kennedy, el hijo de Robert F. Kennedy Jr. Por eso, cuando rompieron decidió venderla y refugiarse en alguna de sus otras casas, lo cual no supuso un problema, ya que la lista de sus propiedades es larga. Así, incluye, entre otras, una vivienda en Nashville, un dúplex en Tribeca, una mansión en Beverly Hills o un apartamento en Nueva York.

El amor fue el motivo por el que la cantante adquirió esta vivienda en Cape Rode (Massachussets) en 2012 y el desamor que la vendiera solo meses después. Ahora, este bello refugio costero se vende por 13 millones de euros, dándonos la oportunidad de descubrir cómo es por dentro.

Salón abierto con dos zonas de estar, techos de madera blancos, suelo de madera, ventanales con cuarterones con vistas al mar, sofás negros, mesas de madera© Berkshire Hathaway

Un salón, dos zonas de estar

La decoración de esta espectacular combina un estilo playero, relajado y cómodo, con una decoración sofisticada, con toques rústicos, que aportan calidez y autenticidad. Así, destacan las paredes de lamas de madera pintada de blanco, los techos altos con vigas y los amplios ventanales, que conectan el interior con el paisaje exterior.

El salón cuenta con dos zonas de estar. Situadas en paralelo y separadas por un pasillo de madera, ambas comparten estética y belleza. Mientras que una mira al océano y es perfecta para leer o una larga sobremesa, con juegos de mesa incluidos, la otra se articula alrededor de una chimenea, creando un rincón perfecto para el relax. Además, ambas apuestan por las mismas piezas: una gran alfombra, sofás negros, mesa de madera y lámparas de techo. 

Salón con suelo de madera y salida al porche con vistas al mar, cortinas blancas, vigas techo© Berkshire Hathaway

Recibidor con salida al jardín 

Dado que el recibidor es la primera impresión que tienes de una casa, este es toda una declaración de intenciones. Amplio y abierto, una gran alfombra blanca, a juego con paredes, ventanas y techo, actúa como un pasillo que nos conduce al exterior de la vivienda. Cortinas blancas visten todas las ventanas y puertas, auténticos tabiques de cristal, mientras que en una esquina se ha situado un sillón XL negro, a juego con los sofás del salón, sobre el que cuelga una espectacular lámpara de techo, creando un agradable rincón de lectura

Porche cerrado con alfombra XL de fibras vegetales, lámpara de techo escultura, bancos, sillas y zona de estar © Berkshire Hathaway

Porche cerrado con vistas

El cerramiento, a juego con las ventanas de toda la casa, permite que el porche pueda disfrutarse todo el año. Amplio, el suelo se ha vestido con una gran alfombra, que tiene el efecto de una moqueta, ya que apenas deja ver el suelo de madera. Dividido en dos zonas, una con bancos y otra con modernas butacas y una mesa de centro, ambas ofrecen un agradable lugar para relajarse viendo el océano.

Por instinto, la mirada se dirige hacia el techo. Por un lado, llama la atención su altura y sus lamas y vigas de madera pintadas de blanco. Y, por otro, destacan dos espectaculares lámparas de techo iguales, colocadas en cada área, y el ventilador que refresca el ambiente. 

Comedor con una mesa de madera XL, alfombra, sillas blancas con patas de madera, lámparas de techo y ventanales con vistas del mar© Berkshire Hathaway

Comedor para comidas con amigos

No sabemos si Taylor Swift celebró alguna comida con amigos en este comedor, porque es en su mansión de Rhode Island, que aún conserva, donde suele hacer fiestas como la celebración del 4 de julio. Pero, sin duda, el espacio no sería un problema, ya que cuenta con sitio para 12 comensales. La gran mesa de madera con sillas de estilo nórdico, con estructura blanca y patas de madera, es la protagonista de la estancia. 

En el ambiente, además de la caja blanca, destacan tres lámparas de techo, del mismo estilo que las sillas, que cubren toda la superficie, y una gran alfombra, que delimita visualmente el espacio, al mismo tiempo que imprime un plus de calidez. Por su parte, los grandes ventanales actúan como un bello cuadro de un paisaje, que se puede tocar. 

Casa Taylor Swift cocina blanca con isla de madera, suelo de madera, ventanas, armarios, lámparas de techo© Berkshire Hathaway

Cocina con isla

Situada al lado del comedor, la cocina comparte suelo de madera y estilo con él. De esta manera, los muebles recrean el diseño de lamas blancas de sus paredes y techo. Amplia y llena de luz, al igual que el resto de estancias, mira directamente al paisaje exterior, dejando que entre dentro. Para no recargar el ambiente, pero mantener la capacidad de almacenaje, prescinde de módulos superiores y se apoya en el gran armario

La isla, en negro y madera, destaca en este universo blanco, aportando, al mismo tiempo, un toque de calidez rústica, potenciado también por las lámparas de techo vintage. Al igual que ocurre con las alfombras, otra de las señas de identidad de este refugio costero, que se han colocado estratégicamente a ambos lado de la mesa con taburetes. 

Casa taylor Swift recibidor con subida escalera con barandilla de madera, suelo de madera, ventanales con cortinas blancas, alfombra © Berkshire Hathaway

Subida a las habitaciones

El recibidor también actúa como distribuidor de las dos plantas de esta espectacular mansión de Cape Cod. Una escalera blanca con barandilla de madera, que recrea nuevamente el binomio cromático de todas las estancias, proporciona una subida cómoda, con escalones enmoquetados, a la zona privada, que cuenta con ocho habitaciones. 

Mansión Taylor Swift, dormitorio principal con ventilador de techo, alfombra, cortinas blancas, mueble de televisión de madera y cama tapizada© Berkshire Hathaway

Dormitorio en modo relax

Vestido de arriba abajo de blanco, salvo por el mueble de televisión de madera, el dormitorio principal invita al descanso y al relax. Con vistas al exterior, como el resto de estancias de la vivienda, las cortinas blancas tamizan la luz, pero dejan que se cuele la luminosidad y el paisaje. La cama tapizada es la protagonista de un espacio en el que la alfombra XL viste el suelo y proporciona una pisada mullida; y el ventilador de techo aporta frescura y un toque de encanto, que toda casa de la playa debe tener. 

Mansión Taylor Swift, baño en suite con muebles de lamas de madera blancas, ducha con asiento y mampara© Berkshire Hathaway

Baño integrado en la habitación

Luminoso y amplio, este baño, la casa cuenta con cinco y dos aseos, se integra en un dormitorio en suite. Como no podía ser de otra manera, el color blanco y el diseño de lamas visten paredes y muebles, creando un ambiente playero, donde el azul del cielo y el océano, que se cuelan por su ventana, forman parte de él. La zona de la ducha, XL, con asiento y revestida de azulejos, se separa mediante una mampara, que es casi un tabique de cristal. Hay que destacar también el espejo y su efecto para aportar profundidad y sensación de amplitud. 

Despacho mansión Taylor Swift con máquina de entrenamiento, librería, zona de escritorio, mueble de televisión © Berkshire Hathaway

Sala polivalente

Las dimensiones de esta estancia permiten que actúe como despacho en casa, gimnasio, biblioteca o sala de televisión, según el momento. El espacio para trabajar cuenta con un mueble a medida que integra un escritorio con librerías a los lados, que recrea el binomio cromático del suelo y las paredes. Una solución práctica y ligera, con gran capacidad de almacenaje, que gana belleza y amplitud, gracias a su planta abierta y sus techos altos. Como en el resto de la vivienda, la luz natural inunda cada rincón y llena todo de frescura y energía. 

Casa Taylor Swift en la playa, con piscina, zona de sombrillas y hamacas© Berkshire Hathaway

Piscina junto a la playa

Una playa privada, por supuesto. Alrededor de esta espectacular piscina con las mejores vistas, se ha diseñado una zona de tumbonas y grandes sombrillas, perfectas para relajarse o tomar el sol, con el océano frente a ti. De color blanco, mantienen la armonía cromática con el interior de la vivienda. Junto a ella, y cerca del porche, se ha situado una cocina exterior y un estar, perfecto para aperitivos o comidas informales. 

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.