Esta vivienda de Girona reunía todos los requisitos que los propietarios buscaban: espacio suficiente, bonitas vistas y abundante luz natural, además de tener como vecinos a sus padres, una condición idónea para la vida familiar. En contra, se trataba de una casa de los años 50, con terrazo, demasiadas habitaciones pequeñas, un mobiliario clásico español... Adaptarla al estilo de vida actual es el reto al que se enfrentaron, y lograron vencer con una reforma integral, el estudio de arquitectura Egue & Seta. 

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El problema de las casas antiguas son la abundancia de pasillos, los amplios recibidores y la compartimentación. Y estos fueron tres de los principios que marcaron la reforma de esta casa de Girona. De esta manera, nada más abrir la puerta, te haces una idea de cómo va a ser el interior: abierto, amplio y comunicado. La habitación acristalada, la pared de armarios y el banco en el hueco de la pared crean una entrada atípica, pero funcional y moderna. 

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Esta habitación acristalada funciona como 'home office' la mayor parte del tiempo, pero es también un cuarto perfecto de invitados, gracias a su sofá cama y a las cortinas, que ayudan a mantener la privacidad. Tremendamente práctica, el gran escritorio a medida y la estantería ayudan a crear la atmósfera ideal para quienes trabajan en casa. 

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La casa original, aunque excesivamente compartimentada, tenía muchas posilidades. Para modernizarla, desde el estudio Egue & Seta diseñaron un espacio único, que engloba salón, cocina y comedor, en el lugar que antes ocupaban tres estancias, "que incorpora a su trazado los metros cuadrados de los pasillos y la circulación, para lucir aún más extrovertido y amplio". 

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Situado en paralelo al ‘office’, y delimitado visualmente mediante una alfombra de fibras vegetales, el comedor apuesta por un cálido mobiliario de madera. Dada las dimensiones de la mesa, con capacidad para seis o más comensales, se ha optado por una lámpara de suspensión con tres pantallas, que iluminan toda la superficie.

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Los muebles de cocina verde claro ponen una sutil nota de color y modernidad, que se integra a la perfección en el espacio común. La isla, que alberga la zona de fuegos y una barra de desayunos con taburetes altos, actúa además como elemento delimitador con las otras zonas. En el suelo descubrimos un porcelánico con aspecto de mosaico hidráulico, un pavimento mucho más práctico en esta área, que aporta un toque de estilo, al mismo tiempo. 

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Una gran librería hecha a medida por FusteriaB14, con la parte inferior cerrada y la superior abierta, salvo por las puertas que ocultan la televisión, es el centro de atención del estar. Dos sofás, uno en gris y otro azul completan el ambiente, en el que la mesa de centro se ha sustituido por dos auxiliares, que brindan las mismas ventajas, pero ocupan menos.

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Conscientes de que "quien tiene una terraza en un núcleo urbano tiene un tesoro", su diseño se ha cuidado al máximo, para sacarle mayor partido durante el buen tiempo. Llena de plantas que recrean un ambiente natural, se ha vestido con muebles de fibras y de madera (de La Redoute Interieurs), que proporcionan un plus de calidez. La alfombra además de hacer más acogedor este rincón, sirve también para delimitarlo visualmente.

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Aunque no se trata de una terraza XL, su planta alargada permite establecer varias zonas. Una de estar en uno de sus lados y una de comedor, en el otro, ideal para desayunos de fin de semana o comidas informales. Las sillas y las mesas plegables son perfectas cuando no sobran los metros, ya que se pueden, guardar fácilmente cuando no los necesitas y usar el espacio para poner una tumbona para tomar el sol, por ejemplo.

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Una gran estructura hecha a medida, que integra cama, dos mesillas y estante superior es la protagonista absoluta del dormitorio de matrimonio. Tipo suite, cuenta, además de con un vestidor, con un gran armario empotrado, que al ser blanco, pasa casi desapercibido y resulta más ligero. Moderno y funcional, posee un sutil aire nórdico, aunque más cálido y acogedor, gracias a los complementos y la ropa de cama. 

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El cuarto de baño principal juega con el binomio blanco y negro, únicamente roto con el mueble bajolavabo de madera y el gresite gris de la ducha. Como se trata de un baño compartido se han colocado dos lavamanos, mucho más prácticos en el día a día, y un espejo XL, que permite el uso de dos personas a la vez. 

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Con el techo pintado de amarillo, las paredes blancas y los complementos en distintos azules, la habitación infantil crea un original refugio ‘’neutral’, donde se sentirán cómodos tanto niños como niñas. Las alfombras en el suelo potencian la calidez del ambiente, al mismo tiempo que proporcionan una estupenda zona de juegos para los más pequeños. La cama con dosel azul es una versión moderna de los dormitorios de las princesas.

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Pensando en los niños, en este cuarto de baño se ha optado por una bañera, mucho más práctica cuando son pequeños, donde es habitual bañarlos. Vestido con revestimiento y suelo blanco, las pinceladas de color las ponen el mueble bajolavabo, realizado por FusteriaB14, y los accesorios (toallas, lámparas, alfombra…), que juegan con el azul eléctrico y el amarillo huevo, dos tonos alegres y divertidos.

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