¿Has oído hablar del efecto eyebrow swirl? Es una técnica para crear un efecto remolino en las cejas aplicando un tinte degradado para lograr un look más natural. Se puede conseguir también con maquillaje convencional o con maquillaje semipermanente, es decir, recurriendo a la micropigmentación.
Por eso hemos hablado con Mónica Aránguez, especialista en micropigmentación estética y paramédica y diseño de cejas; y con Roberto Siguero, National Makeup Artist de Lancôme, quien, por cierto, asegura que este acabado le recuerda mucho a las cejas de Brooke Shields en los 80.
Mónica Aránguez explica que el efecto eyebrow swirl es muy versátil y se adapta a distintos tipos de cejas. Nos cuenta que funciona tanto en las densas como en las menos pobladas y asegura que lo bueno es que tiene una alta capacidad de personalización. Dice que nos permite respetar el sentido natural del crecimiento del vello para que el acabado resulte 100% natural.
Precisamente en ese punto, en el de la dirección de crecimiento del vello, repara Roberto Siguero y nos dice que con maquillaje la cosa cambia. "No todas las cejas permiten este tipo de acabado, principalmente por dos factores: la dirección natural del pelo y la dirección en la que trabaja el fijador", sostiene. Nos dice que para recrear ese efecto remolino que tanto se persigue ahora, hay que "despeinar las cejas de forma estratégica para lograr un efecto natural, salvaje y muy ochentero".
Por este motivo, recomienda usar un goupillon con un poco de laca para dar la forma que deseas y, después, definir con un lápiz que sea un tono más claro que el color natural de tu ceja. Para crear volumen, aconseja revolver el pelo y llevarlo ligeramente en la dirección contraria a su nacimiento. Ahora bien, el abordaje es distinto, según el experto, en función de si tienes las cejas más o menos pobladas.
- Cejas muy pobladas: solo necesitan un peinado desordenado. Una ceja despeinada ya tiene suficiente protagonismo.
- Cejas poco pobladas: ayuda una sombra muy natural para equilibrar.
Para acompañar el look, el maquillador aconseja utilizar abundante máscara de pestañas y una sombra sutil. Dice que es partidario de que cejas y pestañas estén en un primer plano y las sombras queden en un segundo para, únicamente, cerrar el look y hacerlo armónico.
Sugiere también usar labiales en tonos como el granate y el berenjena porque "equilibran el conjunto". El experto nos dice que siempre le gusta que "una boca compense ligeramente la fuerza de la ceja".
Si el maquillaje no es lo tuyo y prefieres optar por la micropigmentación y despreocuparte, te gustará saber que existen diversas técnicas para conseguir el efecto remolino, siempre basadas en un análisis previo del rostro y del patrón de crecimiento del vello:
- Micropigmentación con trazos direccionados: se emplea un trazo fino que reproduce el pelo real siguiendo una orientación diseñada para generar el movimiento característico del remolino. Esta opción es adecuada para cejas que tienen de por sí esta estructura de pelo y queremos recrearlo.
- Técnica combinada (trazo + sombreado suave): se recurre a trazos precisos unidos a un sombreado ligero que aporta densidad visual. Es recomendable en cejas con poca base o con discontinuidades.
Mónica Aránguez recomienda realizar una valoración personalizada, analizando la simetría, la dirección del pelo y las características de la piel. "La tendencia del remolino debe realizarse bajo criterios técnicos que garanticen armonía, durabilidad y seguridad", indica. Es esencial para que el efecto remolino pueda proporcionar una imagen limpia, definida.








