Hay peinados que no solo cambian tu look, sino también tu estado de ánimo. Y no hablamos de un cambio radical de corte o color, sino de esos recogidos, coletas o moños estratégicos que tienen el poder de elevar el rostro, afinar los rasgos y aportar frescura instantánea. En la era del efecto lifting, el cabello también se convierte en una herramienta de rejuvenecimiento exprés.
Looks quetransmiten seguridad, elegancia y sensación de frescura con acabados minimalistas o recogidos de toque desenfadado; estilos favorecen a cualquier edad y se adaptan a todos los tipos de cabello. Prepárate para descubrir los 10 peinados con efecto liftingque más se llevan y que puedes recrear fácilmente en casa.
Sinónimo de elegancia moderna: cabello completamente peinado hacia atrás, sin volumen y con un acabado brillante que parece de cristal. El secreto está en usar gel o aceite capilar para conseguir ese efecto espejo tan pulido. Este estilo despeja el rostro y realza los pómulos, creando una silueta facial más definida. Perfecto para combinar con maquillaje natural o labios rojos, según la ocasión.
Es el truco favorito de Bella Hadid, Ariana Grande o Jennifer Lopez, y no es casualidad. La coleta pulida y bien tensa, es capaz de transformar tu rostro en segundos. Al recoger el cabello, se eleva el arco de las cejas, se afinan los pómulos y se estiliza el cuello. Si además la fijas con un toque de brillo o sérum antifrizz, el resultado es impecable y sofisticado. Un gesto simple que aporta estilo, juventud y poder.
Este peinado es pura fuerza y sensualidad. El efecto mojado, consiste en peinar todo el cabello hacia atrás con gel o crema fijadora, logrando una superficie lisa, brillante y con efecto lifting inmediato. Al despejar completamente el rostro, se acentúan las facciones y se consigue una mirada más despierta. Es perfecto para eventos de noche, la oficina o situaciones donde quieras proyectar elegancia sin esfuerzo.
Funcional y favorecedora, la trenza de raíz se ha convertido en el peinado fetiche de quienes buscan estilo con un toque casual. Al tejerla desde la parte superior del cuero cabelludo, el cabello se tensa naturalmente, levantando el rostro y realzando los pómulos. Además, mantiene el peinado intacto todo el día y resiste cualquier rutina. Puedes llevar una sola trenza central o dos.
Este clásico se reinventa con un toque más trabajado y favorecedor. Para conseguirlo, divide el cabello en varias secciones y enrosca cada una sobre sí misma antes de unirlas en un solo moño. Este gesto crea una estructura compacta que eleva visualmente el rostro y estiliza el cuello al instante. Cuanto más alto lo sitúes, mayor será el efecto lifting y más sofisticado el resultado.
Al recoger solo la parte superior del cabello se consigue ese efecto tensor sin renunciar al movimiento natural del resto de la melena. Es uno de los peinados más usados por Hailey Bieber o Margot Robbie por su equilibrio entre frescura y elegancia. Aporta volumen, despeja la frente y deja un resultado luminoso y juvenil.
Las diademas han vuelto con fuerza y, además de ser un complemento ideal, tienen un efecto lifting inmediato. Al colocarla en la parte alta de la cabeza y peinar el cabello hacia atrás, se consigue levantar visualmente el rostro y abrir la mirada. Opta por versiones anchas, acolchadas o con brillo para un toque más sofisticado. Además, es una forma sencilla de transformar cualquier peinado en segundos.
Divertida, moderna y con un toque de fantasía, la coleta de burbujas se ha convertido en la favorita de muchas. Para conseguirla, solo necesitas hacer una coleta y colocar gomas a lo largo del cabello, separadas de forma uniforme. Cada sección se abomba creando un efecto de elevación progresiva que estiliza el rostro. Es un peinado con aire juvenil y dinámico que da movimiento y estructura.
A veces, basta un detalle para transformar por completo el rostro. Colocar una pinza lateral, sujetando el cabello con una ligera tensión, levanta la zona de las sienes y abre la mirada de forma sutil. Puedes combinar dos pinzas para un toque más sofisticado o usar una sola en clave minimalista. Además, despeja los rasgos sin esfuerzo, aportando un aire pulido pero de lo más natural.
El favorito de las francesas y de todas las que buscan ese equilibrio entre naturalidad y estilo. Aunque parezca improvisado, el messy bun tiene un efecto lifting sorprendente cuando se coloca alto y se recoge con cierta tensión. Al dejar algunos mechones sueltos alrededor del rostro, suaviza las facciones y equilibra el resultado. Es ideal para esos días en los que quieres ir cómoda, pero con un toque chic.