Hay mañanas en las que ni el mejor café puede borrar las huellas de una noche corta. Las bolsas y ojeras aparecen como un recordatorio implacable de que el descanso no siempre está de nuestra parte. Sin embargo, el maquillaje tiene sus propios "superpoderes", y con las técnicas adecuadas, es posible transformar una mirada cansada en un rostro radiante y fresco en cuestión de minutos.
Más que cubrir imperfecciones, se trata de crear luz, equilibrio y naturalidad. Porque con los trucos y productos adecuados es muy fácil lograr un acabado ligero que ilumina, difumina y rejuvenece. Desde el gesto más sencillo hasta la técnica profesional más sutil, cada paso está pensado para borrar la fatiga y dejar la piel con un aspecto saludable y radiante, incluso en los días más intensos.
© Getty ImagesBolsas y ojeras: cómo el maquillaje puede transformarlas
Las bolsas y ojeras son una consecuencia natural del ritmo de vida: falta de descanso, retención de líquidos, genética o estrés. Aunque no se pueden eliminar de forma mágica, sí se pueden camuflar con inteligencia. La clave está en comprender la estructura de la piel del contorno de ojos y aplicar los productos de forma estratégica. El maquillaje no tapa, corrige la luz y la sombra, consiguiendo que la mirada parezca más descansada.
© Getty ImagesPrimer truco: doble corrector
Combinar dos tonos de corrector es un gesto sencillo que cambia por completo el resultado. Primero, aplica uno con subtono melocotón o un pre-corrector para neutralizar el color violáceo y, después, uno apenas medio tono más claro que tu piel para iluminar. Difumina a toques con una esponja húmeda hasta integrarlo completamente. Este contraste corrige sin sobrecargar y deja un acabado fresco, uniforme y de aspecto descansado.
© Getty ImagesSegundo truco: 'eye lifting' con corrector
En lugar de extender el corrector en toda la ojera, traza una pequeña línea ascendente desde debajo del lagrimal hacia la sien y difumina suavemente. Este truco óptico eleva la mirada y atenúa el aspecto de pesadez, creando un efecto lifting sin esfuerzo. El resultado es una mirada más abierta y juvenil, ideal para los días en los que la falta de sueño quiere hacerse notar más de la cuenta
© Getty ImagesTercer truco: el dúo que borra el cansancio
Si las ojeras no son demasiado oscuras, mezcla una gota de iluminador fluido con tu corrector habitual y aplica el cóctel con pequeños toques. La combinación refleja la luz de forma sutil y da ese brillo saludable que rejuvenece instantáneamente. Es la opción perfecta para quienes prefieren un acabado fresco, sin capas ni pesadez, logrando ese efecto “buena cara” que parece natural pero tiene truco.
© Getty ImagesCuarto truco: el 'light sandwich'
Para mantener el corrector intacto durante horas, aplica una capa muy fina de polvo translúcido entre dos aplicaciones ligeras del producto. Este método, conocido como light sandwich, fija sin restar naturalidad ni marcar líneas. Usa una brocha pequeña para controlar la cantidad y centra el polvo solo en la zona que más se mueve. Así la mirada permanece uniforme, lisa y radiante todo el día.
© Getty ImagesQuinto truco: contraste con sombras cálidas
Cuando las ojeras son muy marcadas o la zona del contorno se ve hundida, equilibrar el color del párpado puede cambiarlo todo. Aplica una sombra de ojos en tonos cálidos (como melocotón, terracota o coral suave) sobre el párpado móvil y difumínala ligeramente hacia el pliegue. Este contraste cromático desvía la atención de la zona oscura y aporta calidez a toda la mirada.
© Getty ImagesEl secreto final: elegir los productos adecuados
Elegir bien los productos es tan importante como saber aplicarlos. Los correctores con texturas ligeras e hidratantes se integran mejor en la piel y evitan el efecto pesado. También es fundamental acertar con el subtono: los más cálidos neutralizan el azul, mientras que los claros iluminan sin exagerar. Un buen iluminador, polvo translúcido o sombras de ojos hacen el resto, logrando un acabado profesional y natural que resiste el paso de las horas.
Shape Tape, de Tarte
Un icono del maquillaje gracias a su cobertura impecable y su acabado de piel perfecta. Su textura cremosa, de larga duración, difumina ojeras, líneas de expresión y cualquier signo de cansancio sin perder naturalidad. Enriquecido con manteca de karité y raíz de regaliz, hidrata y suaviza el contorno mientras mantiene el producto intacto durante horas. Deja la zona lisa, uniforme y con efecto “mirada descansada”. Precio: 31 euros.
Light Reflecting Setting Powder Pressed, de Nars
El secreto profesional para fijar el maquillaje sin restarle frescura. Su fórmula sedosa y translúcida sella el corrector, suaviza los poros y difumina las líneas finas gracias a sus microesferas reflectantes de luz, que aportan un acabado natural y luminoso. No reseca ni apaga la piel, por lo que es ideal para sellar la zona del contorno sin perder ese efecto jugoso conseguido con los trucos de luz. Precio: 48 euros.
I Need A Warm Eyeshadow Palette, de Natasha Denona
Una paleta versátil que combina tonos cálidos y naturales, perfectos para revitalizar la mirada y contrarrestar el aspecto de cansancio. Sus sombras, de textura cremosa y alta pigmentación, se difuminan con facilidad, permitiendo crear desde un toque sutil de color hasta un look más sofisticado. Los matices melocotón, terracota y bronce aportan calidez y equilibrio, potenciando una mirada más viva, fresca y luminosa. Precio: 74 euros.
