Hay cortes de pelo que son como ese vestido comodín que nunca falla: lo mismo funciona para una reunión de trabajo que un brunch improvisado el domingo. Son estilos que no dependen de largas horas frente al espejo ni de habilidades profesionales para peinarse, pero que siempre consiguen el efecto deseado. En la vida real, es lo que verdaderamente importa.
Y es que no siempre tenemos tiempo (ni ganas) de planificar un peinado para cada situación. Lo que buscamos es versatilidad: cortes que sean lo suficientemente elegantes para un entorno profesional y, al mismo tiempo, fáciles de transformar en algo más relajado y desenfadado cuando llega el momento de desconectar. Por ello, hemos reunido una lista de cortes que funcionan las 24 horas del día y los 7 días de la semana.
© Getty Images'Bob' francés
Un clásico parisino que combina sofisticación y frescura. Este corte, generalmente a la altura de la mandíbula o un poco más abajo, se distingue por su caída suave y ligeramente redondeada que enmarca el rostro de forma natural. No necesita flequillo ni líneas rectas para ser elegante: su magia está en cómo acompaña el movimiento del cabello y se adapta a diferentes texturas.
© Getty ImagesCorte en pico
Este estilo, reconocido por su forma en “V” más larga en el centro y más corta en los laterales, es perfecto para quienes quieren mantener el largo pero aportar dinamismo a la melena. La punta central crea un efecto óptico que alarga la silueta y da sensación de movimiento. Funciona igual de bien en melenas largas y medias, y es un corte que crece de forma armoniosa, por lo que requiere de poco mantenimiento.
© Getty Images'Hime cut'
Un corte tradicional japonés que se está colando en el street style internacional. Consiste en llevar el cabello largo o midi con mechones frontales cortados de forma recta a la altura de las mejillas o la mandíbula. Este contraste de longitudes crea un efecto sofisticado y diferente. En el trabajo, el acabado pulido lo hace elegante; en tu tiempo libre, con ondas y un toque desenfadado, resulta muy juvenil y original.
© Getty Images'Pixie' largo
La versión más versátil del corte pixie, con más longitud y cuerpo que la versión clásica. Esto permite jugar con distintos peinados: hacia un lado para un look romántico, hacia atrás para uno más sofisticado o con ondas pequeñas para un aire más retro. Es un estilo de corte que habla de confianza y estilo sin apenas esfuerzo.
© Getty ImagesCorte a capas para rizos definidos
Este corte juega con capas estratégicas para distribuir el volumen y definir cada rizo, evitando el efecto “triángulo” tan temido por quienes tienen cabello rizado. En un contexto profesional, basta con aplicar crema definidora y secar con difusor para obtener rizos controlados y brillantes que enmarquen el rostro con elegancia. Para el fin de semana, puedes dejar que el cabello se seque al aire, potenciando un volumen más libre y desenfadado.
© Getty ImagesCorte con flequillo cortina
Un favorito de quienes quieren un cambio sin perder longitud. Este flequillo, que se abre suavemente en el centro y se integra con el resto del cabello, crea un marco natural para el rostro y suaviza los rasgos. Funciona a la perfección con melenas largas, medias e incluso con cortes a capas, y su mayor ventaja es que crece de manera gradual, pudiendo transformarse en mechones frontales si decides dejarlo crecer.
© Getty Images'Bob' recto clásico
Impecable, minimalista y con ese toque atemporal que nunca pasa de moda. El bob recto, que suele ir justo a la altura de la mandíbula, da un aire profesional y pulido que no necesita adornos. Si lo llevas liso y brillante, es pura elegancia de oficina; si lo despeinas un poco con los dedos o le das unas ondas ligeras con la plancha, pasa automáticamente a ser un look relajado y chic para el fin de semana.
© Getty ImagesMelena larga a capas suaves
Un corte que mantiene la sensación de melena completa pero sin el peso visual de un cabello compacto. Las capas largas crean movimiento y permiten peinados muy distintos: de una coleta alta pulida para un look corporativo a ondas anchas y deshechas para un domingo en la playa. Funciona igual de bien con accesorios como diademas, pinzas XL o pasadores de carey.
© Getty Images'Bixie cut'
Mitad bob, mitad pixie. Este híbrido ofrece lo mejor de los dos: la frescura y poco mantenimiento del pixie, con un toque de longitud en las capas superiores que permite jugar más con el peinado. Funciona muy bien liso y con raya al lado para el trabajo, o con ondas pequeñas y despeinadas para planes más informales. Es un corte con mucha gracia que no pasa desapercibido.
© Getty ImagesMelena 'midi' con capas ligeras
Las capas discretas son la clave para dar vida al cabello sin perder la estructura. En un entorno profesional, puedes secar con cepillo redondo para obtener un acabado suave y ordenado; en un sábado cualquiera, deja que el secador actúe libremente, añade un poco de texturizante y obtendrás un look sin esfuerzo. Es un corte que se mueve contigo, que acompaña el giro de tu cabeza y que nunca se ve estático.
© Getty Images'Long bob'
Este corte tiene lo mejor de dos mundos: es lo suficientemente largo para jugar con recogidos, pero lo bastante corto para mantener un aire moderno. En modo oficina, alísalo y marca una raya limpia al medio o al lado; para el fin de semana, aplica spray de sal, estruja con las manos y deja que las ondas tomen protagonismo. Su estilo versátil funciona con todo.
© Getty ImagesCorte 'clavicut'
Su largo justo a la clavícula lo hace universalmente favorecedor y fácil de manejar. Es un corte que puede ser elegante o informal dependiendo de cómo lo peines. Para un día de trabajo, plancha y aplica un toque de brillo; para salir, marca ondas suaves o puntas hacia fuera para un look retro. Además, es perfecto para recogidos rápidos como coletas bajas pulidas o moños.
