Un día los rizos se ven definidos, brillantes y con vida, y al día siguiente, se despiertan con un encrespamiento que no hay producto ni método que lo controle. A veces, da la sensación de que cada rizo tiene voluntad propia y que ningún consejo funciona igual dos días seguidos. Por eso, en este artículo te traemos 10 trucos fáciles e infalibles que realmente marcan la diferencia. Algunos son poco convencionales, pero todos están pensados para ayudarte a lucir unas ondas bien definidas y libres de frizz sin complicarte demasiado la vida.

Cepíllalo en seco
Aunque suene contrario a todo lo que has oído, cepillar el cabello rizado antes de lavarlo, cuando está seco, ayuda a desenredar sin romper la forma natural de los rizos. Hazlo con los dedos o con un cepillo de púas anchas, desde las puntas hacia arriba. Así, el champú y el acondicionador actuarán mejor, y evitarás fricción innecesaria después.

Acondiciona boca abajo
Invertir la cabeza al aplicar el acondicionador permite que los rizos se formen más naturalmente desde la raíz y evita que queden aplastados. Hazlo en la ducha, con el cabello empapado, y desenreda con los dedos para distribuir mejor el producto y comenzar a definir los rizos desde el primer paso.

Haz el 'bowl method'
Este método viral consiste en sumergir el cabello rizado en un cuenco con agua y una pequeña cantidad de acondicionador sin enjuague. Al levantar y escurrir los rizos en el agua varias veces, ayudas a distribuir el producto de manera uniforme y a formar rizos más hidratados, definidos y con menos frizz.

Cuidado con el secado
Las toallas de felpa típicas pueden ser muy agresivas para el cabello rizado, ya que generan fricción y levantan la cutícula del pelo, causando encrespamiento. Una alternativa económica y efectiva es usar una camiseta de algodón vieja o si lo prefieres utiliza una toalla de microfibra.

Aplica el producto con las manos planas
¿Sabías que la forma en que aplicas el producto puede afectar el resultado de tus rizos? La técnica praying hands (manos en oración) consiste en colocar el producto en las palmas y presionar el cabello entre las manos, deslizándolas de arriba abajo. Esta forma de aplicación es ideal para controlar el encrespamiento.

Seca con difusor frío y sin moverlo
El calor puede abrir la cutícula del cabello y generar más encrespamiento. Si usas difusor, selecciona la opción de aire frío o tibio, y en lugar de moverlo por toda la cabeza, colócalo debajo del rizo y mantenlo quieto durante unos segundos antes de cambiar de sección. Así lograrás volumen sin frizz.

Hazte una 'piña' al dormir
Dormir puede arruinar una buena definición de rizos si no se toman precauciones. La técnica de la "piña" consiste en hacer un moño alto y suelto en la parte superior de la cabeza antes de ir a la cama. Usa un coletero de tela o goma suave para no dejar marcas. Este truco protege el volumen y la forma de tus rizos.

Duerme sobre satén o seda
El algodón tradicional absorbe la humedad del cabello y genera fricción, lo que causa encrespamiento. Las fundas de satén o seda, en cambio, permiten que el cabello se deslice suavemente, conservando la hidratación y la definición de los rizos. Notarás la diferencia desde la primera noche.

Mantén una rutina de hidratación diaria
El cabello rizado necesita más hidratación que el liso, por lo que es clave aplicar un spray hidratante o un aceite ligero cada día. Esto ayuda a mantener los rizos definidos y a prevenir el frizz durante el día. No olvides hidratarlo desde las raíces hasta las puntas.

Haz tu propio 'spray' reactivador
Mezcla agua, un poco de acondicionador sin enjuague y unas gotas de aceite (como de argán o coco) en un frasco con atomizador. Rocía ligeramente el cabello por la mañana y aprieta los rizos con las manos. Es una forma fácil de revivir rizos sin necesidad de lavarlo todo otra vez.