Entrevista exclusiva con Inès de la Fressange modelo, empresaria y la reina del chic francés

Modelo, diseñadora, musa y empresaria, Inès de la Fressange sigue siendo la parisina más chic. Va camino de los 68, pero le gusta cumplir años —no cumplirlos es peor— y sigue estando llena de vida y de proyectos. Es hija de un marqués y una modelo argentina y creció en una mansión del siglo XVIII a 60 kilómetros de París. En 1993, se casó con el empresario Luigi d’Urso (fallecido en 2006) y tuvieron dos hijas, que no son ajenas al mundo de la moda.

Nine, actriz, es ahijada de la princesa Carolina de Mónaco, una de las mejores amigas de su madre, y Violette, escritora. Le encanta perderse en la Provenza, donde tiene una casa; le interesa mucho el budismo, y busca rodearse de gente positiva e interesante que le aporte, que le enseñe. Devora literatura y es autora de un "best seller" internacional, La Parisienne (Flammarion), un libro sobre el arte de envejecer bien, que escribió en colaboración con Sophie Gachet.

© Elizabeth Arden

 Ahora vive una hermosa historia de amor con el ejecutivo Denis Oli­vennes y sigue siendo el ejemplo perfecto de cómo simplificar el estilo. Una camisa masculina, unos vaqueros y unos zapatos de Roger Vivier... No necesita más para presentarse como embajadora de Eight Hour Cream, de Elizabeth Arden. El icono de la moda se une a un icono de la belleza.

—Te defines como "una chica francesa perezosa", pero eres supermodelo, diseñadora, madre, mujer de negocios, embajadora de Elizabeth Arden… ¿Cómo haces para gestionar todo eso? ¿Cuál es el secreto para manejar ese día a día?

—¡Sííí, es verdad! Me gustaría hacer menos, pero me cuesta decir "no" a las cosas que me divierten. En este momento, estoy decorando un hotel particular, colaboro con Dim y con Smeg, tengo una nueva colección para Inès de la Fressange Paris, una newsletter (www.lalettredines.fr) y estoy preparando una nueva guía. Solo que con la edad se aprende algo: ¡nadie es perfecto! Aceptar no ser perfeccionista, confiar en los demás, delegar y huir del estrés es una forma de gestionar. También me recuerdo a mí misma que no es más que trabajo, no necesariamente lo esencial.

—¿Cuál es tu momento favorito y cuál tu mayor placer?

—¡Las vacaciones! Cuando toda la familia y los amigos están en la mesa. En verano, el 11 de agosto, es mi cumpleaños y siempre están a mi alrededor las personas que más amo en el mundo, así que mi discurso es siempre el mismo: "Todo lo que he deseado lo tengo: vosotros aquí, sois mi mejor regalo, ¡gracias!".

—¿Qué te hace sentir guapa?

—El sol… Sin duda, sale mi sangre argentina, me siento inmediatamente mejor cuando hace más calor.

—¿Cómo definirías la belleza?

—Una armonía que inspira la existencia de lo divino.

—Dices a menudo: "Evita el bótox… ¡Sonreír es más barato y mucho mejor!". ¿Aceptas bien las arrugas?

—¡Oh sí, digo eso porque no me gustan esas caras de gatos infladas! Pero las arrugas y, sobre todo, ese aspecto cansado (¡aunque no lo estés!) me sacan de quicio (risas) Intento ser un pequeño dalái lama en mis entrevistas, pero no es fácil envejecer… ¡Y esos malditos cabellos que se vuelven blancos cada vez más rápido! Pero, aun así, hay mujeres que han envejecido, que admiro y son ejemplos para mí, y ahora es el turno de mis hijas de estar radiantes.

© Elizabeth Arden

—¿Qué deporte practicas? ¿Tienes una rutina de ejercicios?

—Hmm… Aquí la entrevista se complica… Digamos que empiezo el deporte mañana (risas). Igual camino mucho (a veces 10.000 pasos al día), voy en bici en París cuando no llueve, trato de respirar inflando el vientre y mantenerme erguida.

—¿Haces meditación todos los días?

—¡Pffff! ¡Incapaz! Solo intento ser consciente de mi suerte, incluso de poder levantarme sola de la cama, disfrutar de las pequeñas alegrías cotidianas, tomarme el tiempo para admi­rar, tener gratitud y controlar los malos pensamientos.

—¿Cambia mucho tu ritual de belleza facial diaria al que sigues para una ocasión especial?

—¡No hay "días especiales"! ¡Todos lo son! No entiendo a las mujeres que hacen esfuerzos por verse mejor cuando van a trabajar o a encontrarse con desconocidos y se dejan completamente para las personas que más quieren en el mundo. Por ejemplo, el fin de semana. Yo me siento mejor con un poco de base ligera y rímel, así que, incluso si estoy sola, me maquillo. Atención, ¡no es ser el payaso de McDonald’s!, sino un maquillaje ligero. Es una costumbre, como lavarme los dientes. Y si hay una fiesta o un evento elegante, ni hablar de ponerse pestañas postizas o un labial muy rojo, ¡a cierta edad solo puedes parecer una muñeca vieja! (Risas).

—¿Cuál es tu conexión personal con el bálsamo de Elizabeth Arden?

—¡Lo llevo usando más de 40 años! Pensándolo bien, no hay muchos productos a los que me haya mantenido tan fiel. En los backstages de los desfiles de moda, Eight Hour Cream era el secreto de belleza que compartían infinidad de modelos y maquilladores: todas las modelos lo tenían. Lo usaban como brillo labial, como una mascarilla para la noche o incluso como crema para las cutículas.

—¿Qué significa para ti el lujo?

—¡Me encanta que la pregunta incluya "para ti"! ¡Es algo tan personal! Para mí, siguen siendo las cosas especiales y de buena calidad, no esenciales, pero que aportan alegría al día a día (solo tocar el cuero de mi agenda es una pequeña felicidad diaria). Pero una noche libre para quedarme tranquila en casa también puede ser un lujo para mí.

Un mensaje para las mujeres

¡Sííí! Tengo un mensaje especial: 

- No te compares: eres única.

- Mira las fotos de hace diez años: no te gustaban y ahora te ves guapísima.

- Lo mismo pasará dentro de diez años con las fotos de hoy.

- Ordena tu armario, dona, tira o vende todo lo que no usas a menudo, serás más feliz.

- Cómprate un suéter azul marino, te verás con buena cara.

- Enmarca este artículo y recuérdate que tienes una amiga en París que te encuentra genial.

Reglas para una dieta

Le preguntamos: "¿qué hay en tu nevera y qué dieta hay que seguir a cualquier edad que ayude a tener un cuerpo como el tuyo?"... Y esta fue su respuesta:

"¡Ja, ja,ja! Sabéis muy bien lo que hay que hacer!". "Lo que os puedo decir:

1. Dejad de comer cuando ya no tengáis hambre.

2. Empezad vuestras comidas con verduras.

3. No bebáis bebidas gaseosas.

4. Evitad el azúcar.

5. Caminad todos los días".

"En mi nevera siempre hay aguacates (me encantan y son saludables). En mi cocina siempre hay aceite de oliva. Como sano, productos frescos y de temporada, pero no estoy obsesionada con la comida"