Conseguir un delineado perfecto es una tarea titánica en la que dibujar dos rayas iguales es prácticamente imposible. Puedes practicar cientos de veces que el resultado nunca es el mismo, unas veces te quedan más finas, otras gruesas, te quedas corta o te tuerces en el último momento. Sin la ayuda de un profesional lucir una mirada digna de pasarela se convierte en todo un reto, pero, tranquila si como la estrella Disney Dove Cameron tú también quieres presumir de un maquillaje de ojos perfecto toma nota de estos consejos y aprende a usar, de una vez por todas, tu eyeliner.
Consejos para el delineado perfecto
En primer lugar debes saber que existen, en el mercado, diferentes modelos de eyeliner: líquido, en crema o en formato rotulador, tendrás que escoger aquel con el que te sientas más cómoda, y aquí llega nuestro primer consejo deja el líquido para cuando tengas una mayor destreza ya que si no lo usas bien acabarás con una mirada emborronada. Una vez tengas claro cuál vas a usar es momento de comenzar con tu maquillaje.
Lo primero que debes hacer antes de pasar a la acción es aplicar una base de ojos o unos polvos traslúcidos para quitar el exceso de grasa de tus párpados y ayudar así a que se fije mejor este producto, también puedes poner una capa de vaselina para una máxima duración. Si vas a acompañar tu eyeliner de sombras es mejor que las apliques antes de dibujar la raya.
¿Lista? Para aplicarlo de forma correcta es necesario tener un buen pulso o en su defecto seguir una serie de truquitos como colocar el codo sobre una mesa y descansar tu dedo meñique en la mejilla para tratar de estabilizarte. Después y para conseguir un trazo perfecto debes buscar un punto de referencia como pueden ser la sien o el final de tus cejas y ¡ojo! no estires de tu párpado hacia un lateral ya que cuando sueltes puede que el resultado sea peor de lo que esperabas llegando a emborronarse.
Lo suyo es que dibujes la línea de un tirón desde el lagrimal, dejando un par de milímetros de separación, hasta el extremo exterior del ojo comenzando con una raya fina y aumentándola progresivamente, pero si no te ves capaz de esto tienes otras opciones igual de válidas como ir dibujando pequeños puntos al ras de la línea de las pestañas o hacerla en tres partes comenzando desde el exterior. Si te ha quedado demasiado separada de las pestañas puedes coger un pincel y rellenar los huecos con un toque de sombra del mismo color para ocultarlos y conseguir un acabado digno de revista.
A la hora de escoger un acabado debes tener en cuenta la forma de tus ojos. Si eres de esas privilegiadas que tienen los ojos almendrados (tu lagrimal y la esquina externa del ojo están a la misma altura) puedes optar por el acabado que más te guste variando en función de las tendencias. ¿Ojos caídos? Píntala desde la mitad hacia el exterior y dibuja un pequeño rabillo hacia arriba, mejor que evites el delineado inferior. Si los tienes separados no prolongues la raya más allá de la esquina exterior del ojo y si son redondos apuesta por un cat eyes, es ideal para conseguir una forma más ovalada.
