Hubo un tiempo en Madrid en el que “la hora”, como se llamaban entonces los parquímetros, solo se veía en unas pocas calles del centro: Gran Vía, Callao, Huertas… Más tarde cruzaron la M-30 y comenzaron a instalarse en barrios donde nadie imaginaba que llegarían. Hoy, con una ciudad más poblada, más saturada y con más vehículos compitiendo por un hueco, el SER vuelve a transformarse. Madrid se prepara para activar los parquímetros de noche, en domingos y festivos, y para extenderlos a 22 nuevos barrios, incluidos Moratalaz y Puente de Vallecas por primera vez.
© Getty ImagesLa modificación de la Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS), aprobada inicialmente por la Junta de Gobierno, supone el mayor cambio en el estacionamiento regulado en dos décadas. Y apunta hacia un futuro en el que aparcar gratis en la calle será cada vez más la excepción.
Por qué Madrid cambia el horario del SER
Hasta ahora, el SER funcionaba de lunes a viernes de 9:00 a 21:00 y los sábados hasta las 15:00. Los domingos y festivos eran gratuitos. Esa frontera desaparece.
La nueva OMS permitirá activar los parquímetros:
- Más allá de las 21:00 entre semana.
- Desde las 15:00 los sábados.
- En domingos y festivos.
Pero no en toda la ciudad. La ampliación solo podrá aplicarse en zonas donde quede acreditado que existen problemas recurrentes de aparcamiento, especialmente en barrios con gran actividad comercial, cultural, deportiva, turística o de ocio.
El objetivo es claro: garantizar plazas para residentes y evitar que los coches de quienes vienen de fuera ocupen durante horas (o toda la noche) el espacio disponible. También busca reducir las vueltas interminables para encontrar sitio, una de las fuentes más invisibles pero intensas de contaminación y congestión.
Los barrios que podrán activar los parquímetros de noche
La iniciativa no se impondrá sin más. Para activar el SER nocturno o en festivos, los barrios deberán:
- Pedirlo a la Junta de Distrito.
- Someterlo a consulta vecinal.
- Obtener aprobación municipal.
- Demostrar saturación permanente en el aparcamiento.
Zonas como Ibiza (Retiro), donde los residentes llevan años denunciando el colapso de los fines de semana por la afluencia al parque, son candidatas naturales para activar el nuevo horario.
El SER entra en dos distritos nuevos: Moratalaz y Puente de Vallecas
Por primera vez, el estacionamiento regulado llegará a Moratalaz y Puente de Vallecas, dos distritos donde hasta ahora aparcar gratis era la norma y donde la presión de tráfico ha crecido en los últimos años.
El SER pasará de 13 a 15 distritos en Madrid.
© Getty ImagesLos 22 nuevos barrios que podrán votar si quieren parquímetros
La ordenanza incorpora 22 nuevos barrios o zonas de barrio que podrán decidir en votación vecinal si desean instalar parquímetros. Son estos:
- Latina: Lucero, Aluche, Los Cármenes, Puerta del Ángel
- Carabanchel: Puerta Bonita, Abrantes, San Isidro, Opañel, Vista Alegre
- Puente de Vallecas: San Diego, Palomeras Bajas, Numancia
- Moratalaz: Marroquina, Fontarrón, Vinateros, Media Legua
- Usera: Zofío, Orcasur
- Ciudad Lineal: Pueblo Nuevo, Quintana, Concepción
- Fuencarral-El Pardo: Valverde
Estas áreas se suman a otras ya previstas en 2021 pero aún pendientes de implantación: Peñagrande, Valdezarza, San Isidro, Opañel, Costillares…
Según las estimaciones municipales, Madrid pasará de las 181.493 plazas reguladas actuales a 258.985 en 2035, un incremento del 42,7 %, la mayoría destinadas a residentes.
Un cambio que va más allá del aparcamiento
Para el Ayuntamiento, la ampliación del SER no responde solo a la falta de espacio: forma parte de la estrategia Madrid 360 para reducir emisiones contaminantes. La OMS consolida también las zonas de bajas emisiones y mantiene las restricciones a los vehículos sin etiqueta, que podrán circular hasta el 31 de diciembre de 2026 si están empadronados o dados de alta en el IVTM.
La ciudad cumple ya por cuarto año consecutivo los límites europeos de calidad del aire, algo inédito hace apenas una década.
© Adobe StockAparcar gratis será cada vez más raro
La tendencia es clara: la regulación avanza, el vehículo privado pierde terreno y los espacios urbanos se reorganizan. Lo que comenzó en unas calles del centro se extenderá, en los próximos años, a casi todos los distritos.
Para los madrileños, el mensaje es directo: aparcar gratis de noche o en festivos podría convertirse en un lujo residual.
Madrid se encamina hacia un modelo donde la movilidad sostenible manda, la rotación se convierte en norma y los parquímetros, aquellos aparatos que antes solo veíamos en el corazón de la ciudad, pasan a ser parte del paisaje cotidiano en barrios donde nadie los esperaba.
