Tras un arranque de otoño que parecía no llegar nunca, la atmósfera por fin se mueve… pero no en la misma dirección en todo el país. Esta semana, España se divide en dos realidades opuestas: en el noroeste predominarán las lluvias y el viento, mientras que en el sur y el Mediterráneo continuará un calor impropio de estas fechas. El dilema es claro: ¿sacas el paraguas o la ropa de verano?
Galicia, bajo el “tren de borrascas”
El norte peninsular será la cara más otoñal. Galicia ya ha activado la alerta amarilla por lluvias y oleaje, con acumulados de hasta 40 litros por metro cuadrado en 12 horas y rachas de viento que superarán los 60 km/h. Según la AEMET, varios “ríos atmosféricos” —auténticos pasillos de humedad que viajan desde el Atlántico— reforzarán el temporal, dejando hasta 200 litros por metro cuadrado en el oeste gallego. El martes y miércoles, las lluvias se extenderán al Cantábrico, Castilla y León, Extremadura y parte del centro.
El sur y el Mediterráneo: pleno verano en octubre
Mientras tanto, la otra cara de la moneda estará en el Mediterráneo y Andalucía. Una masa de aire cálido mantendrá las temperaturas 5 a 10 ºC por encima de lo normal.
- Sevilla y Córdoba: hasta 33-34 ºC.
- Murcia y Valencia: más de 30-32 ºC.
- Málaga: rondará los 30 ºC.
En la costa mediterránea incluso se esperan “noches tropicales”, con mínimas que no bajarán de los 20 ºC. Un fenómeno habitual en agosto… pero muy inusual en pleno octubre.
Canarias: sin grandes cambios
En el archipiélago canario predominarán los cielos nubosos en las islas de mayor relieve y algunas lluvias débiles, pero el ambiente seguirá estable, con temperaturas suaves entre 26 y 28 ºC en las zonas costeras.
¿Qué pasará al final de la semana?
El contraste entre norte lluvioso y sur caluroso se mantendrá al menos hasta el viernes. De cara al fin de semana, los expertos apuntan a que podría llegar una vaguada atlántica que, esta vez sí, traería lluvias más repartidas y un descenso generalizado de las temperaturas.