¿Tienes un piso alquilado? Podrías estar pagando a Hacienda mucho más de lo que te corresponde. Alquilar una vivienda no solo genera ingresos, también implica gastos que, si sabes cómo, puedes deducir en tu declaración de la renta. Según explica el abogado y economista David Jiménez, muchos propietarios desconocen que tienen derecho a desgravar partidas importantes, lo que supone perder cientos o incluso miles de euros cada año. Para evitarlo, el experto detalla una lista de 10 gastos clave que la mayoría pasa por alto y que pueden ayudarte a ahorrar.
1. Intereses y gastos del préstamo hipotecario
Si la vivienda alquilada está financiada, puedes deducir tanto los intereses como los gastos asociados al préstamo.
2. IBI y tasas municipales
El Impuesto de Bienes Inmuebles, las tasas de basuras u otras cargas municipales también son deducibles.
3. Cuotas de la comunidad
Las derramas ordinarias y cuotas mensuales que pagues como propietario entran en la deducción.
4. Seguros vinculados al piso
Tanto el seguro de hogar como un seguro de impago del alquiler son gastos que puedes desgravar.
5. Conservación y reparaciones
Todo lo invertido en arreglar la vivienda para mantenerla en buen estado (pintura, fontanería, etc.).
6. Suministros pagados por el arrendador
Aunque es raro, si tú pagas la luz, agua o gas del piso alquilado, también se desgrava.
7. Honorarios profesionales
Los servicios de abogados, procuradores, agencias inmobiliarias o incluso los costes de un procedimiento de desahucio.
8. Publicidad del alquiler
Anuncios en portales inmobiliarios o campañas para encontrar inquilinos.
9. Amortización del inmueble
Se puede deducir la depreciación del piso por el paso del tiempo mientras está alquilado.
10. Saldos de dudoso cobro
Si el inquilino no paga y transcurre un tiempo razonable, ese impago puede declararse como gasto deducible.
Según el experto David Jiménez, el consejo final es rotundo: "Guárdate siempre todas las facturas y justificantes". Recuerda que Hacienda tiene hasta cuatro años para realizar una comprobación, y tener toda la documentación a mano no solo te salvará de posibles sanciones, sino que te asegurará el máximo ahorro en tu declaración.