Seguro que te ha pasado. Llegas a casa y te encuentras un "macabro regalo" junto a la puerta: un pájaro, un ratón o un insecto sin vida que tu gato te ha traído con aparente orgullo. La primera reacción es de sorpresa o incluso de asco, seguida de la gran pregunta: ¿por qué lo hacen? ¿Es una muestra de afecto o algo completamente distinto?
Para desentrañar este misterio, la etóloga felina Celia Alesanco, de Sanicat, aclara que, aunque podemos tomárnoslo como un cumplido, “el concepto de regalo es más humano que felino”. En realidad, se trata de un comportamiento con raíces instintivas y diferentes posibles significados, que van desde el trofeo hasta el aburrimiento.
Un instinto que va más allá del hambre
Los gatos son cazadores natos. “Capturar presas en movimiento es algo innato, no necesariamente ligado al hambre, sino muchas veces a la necesidad de estimulación y movimiento”, señala Alesanco.
Una vez cazada, la decisión de traerla a casa podría tener relación con la costumbre de las gatas de llevar alimento a sus crías o con la tendencia de los gatos callejeros a trasladar la presa a un lugar seguro antes de decidir qué hacer con ella.
¿Un regalo para sus dueños?
El mito más extendido es que los gatos lo hacen como muestra de afecto. Sin embargo, la experta matiza: “Siempre se ha querido pensar que el gato nos está haciendo un regalo, pero este concepto es más humano que felino”.
Eso sí, se puede interpretar como un cumplido:
“Podemos traducirlo como un trofeo, un gesto porque nos consideran parte de su familia o incluso como una ayuda porque piensan que no sabemos alimentarnos por nosotros mismos”.
Gatos caseros vs. gatos de la calle
Esta conducta se observa tanto en gatos domésticos como en los que viven en el exterior. “Para un gato callejero puede ser cuestión de supervivencia, mientras que en un gato casero está más relacionada con el instinto y el aburrimiento”, explica Alesanco.
Cómo reducir este comportamiento
No conviene reprimirlo, pero sí redirigirlo hacia objetivos más adecuados. “Un gato correctamente alimentado no cazará por necesidad de comida, sino por instinto o por falta de estimulación”, recuerda la especialista.
Algunas recomendaciones:
- Juguetes de caza y enriquecimiento ambiental.
- Comederos interactivos que conviertan la comida en un reto.
- Una dieta más variada, con alimento húmedo para mejorar la hidratación.
- Mobiliario y espacios para explorar dentro de casa.
Riesgos para la salud
“El hecho de cazar pequeñas presas aumenta el riesgo de contacto con parásitos como pulgas, garrapatas o el temido Toxoplasma Gondii, causante de la toxoplasmosis”, advierte Alesanco.
Por ello, recomienda consultar siempre con el veterinario el calendario de desparasitaciones y extremar las precauciones en hogares con embarazadas o personas inmunodeprimidas.
Así que, en definitiva, que tu gato traiga animales muertos a casa no es un problema de conducta, sino una manifestación natural de su instinto. Pero, como concluye la experta, “lo que debemos hacer no es reprimir la conducta, sino dirigirla hacia otros objetivos que no sean otros animales”.