La fiebre por los muñecos Labubu —peluches de estética kawaii (una moda japonesa que mezcla lo adorable, lo infantil y a veces un punto gamberro)— ha traspasado las tiendas físicas y las subastas: ahora también se ha convertido en un filón para los ciberdelincuentes. Según alertan los expertos de Kaspersky, una reconocida empresa internacional de ciberseguridad, en los últimos meses se han detectado múltiples páginas web fraudulentas que imitan la imagen de Pop Mart (fabricante oficial) para engañar a compradores ansiosos por conseguir ediciones limitadas.
¿Qué tienen los Labubu que generan tanta obsesión?
Diseñados por el artista hongkonés Kasing Lung e inspirados en la mitología nórdica, los Labubu se venden en cajas sorpresa que no revelan qué figura contiene hasta que se abre. Su rareza, el respaldo de celebridades como Lisa (BLACKPINK), Rihanna o David Beckham, y su estética entrañable (aunque con dientes afilados) los han convertido en un fenómeno global, con precios de reventa que rondan los 2.800 euros.
El fenómeno ha generado colas, reventas masivas, caos en tiendas —como sucedió en Londres o Barcelona—, e incluso promociones bancarias en China que regalaban Labubus a cambio de depósitos.
Así funcionan las estafas
Según el Equipo de Investigación Global de Kaspersky, los estafadores aprovechan el deseo de conseguir un Labubu exclusivo para crear tiendas falsas en varios idiomas. Estas webs prometen descuentos irresistibles o ediciones especiales inexistentes, con un único fin: robar los datos bancarios o personales del comprador.
Estas tiendas fraudulentas copian con gran precisión la apariencia de la página oficial de Pop Mart, lo que hace aún más difícil identificar el engaño. El objetivo: aprovechar la urgencia y el entusiasmo de los fans para inducirlos a introducir datos sensibles, como los de su tarjeta de crédito.
Cómo evitar caer en la trampa
Los expertos recomiendan:
- Desconfiar de las gangas: si parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo sea.
- Comprar solo en canales verificados, especialmente en los sitios oficiales de Pop Mart.
- No compartir datos personales ni bancarios en webs no seguras o que no cuenten con protocolo https.
- Utilizar métodos de pago seguros, como tarjetas virtuales o plataformas reconocidas.
- Proteger el dispositivo con herramientas de seguridad digital como Kaspersky Premium, que pueden detectar sitios web fraudulentos y evitar que caigas en trampas online.
Aunque muchos fans creen que esto “aún está empezando”, otros advierten que la calidad del tráfico online relacionado con Labubu está cayendo. Al fin y al cabo, todas las modas son pasajeras, aunque muchas acaban regresando, lo que las convierte en el caldo de cultivo perfecto para las estafas digitales.