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Cuando se trata de combatir mosquitos, es común pensar en sprays químicos, velas de citronela o pulseras repelentes. Pero ¿y si te dijéramos que el arma más efectiva contra estos molestos insectos podría estar ya en tu cocina? Así es: el clavo de olor, ese pequeño, pero potente ingrediente que usas para aromatizar postres o infusiones, también es uno de los repelentes naturales más eficaces contra mosquitos… y pocos lo saben.
¿Por qué funciona tan bien?
El secreto está en el eugenol, un compuesto presente en el clavo de olor que tiene propiedades antimicrobianas, analgésicas y, lo más interesante: repelentes. Este aroma, tan característico y penetrante, resulta insoportable para los mosquitos, en especial para el temido Aedes aegypti, transmisor del dengue, zika y chikungunya. Un estudio publicado en la revista Journal of Vector Ecology reveló que las soluciones a base de clavo de olor pueden ser más efectivas que algunos repelentes comerciales durante las primeras horas tras su aplicación.
© Getty ImagesCómo usar el clavo como repelente
La forma más popular y sencilla de aprovechar sus propiedades es preparando un spray casero. Solo necesitas: 30 gramos de clavo de olor, 500 ml de alcohol (puede ser de farmacia), 100 ml de aceite corporal (como aceite de almendras o de bebé).
Deja macerar los clavos en el alcohol durante cuatro días, agitándolo un par de veces al día. Luego, filtra la mezcla y añade el aceite. Vierte en un frasco con atomizador… ¡Y listo! Tienes un repelente 100% natural, económico y con un aroma especiado, delicioso para ti, pero no para los mosquitos.
También puedes clavar varios clavos de olor en una naranja partida a la mitad y colocarla en tu mesita de noche o en la mesa del jardín. Actúa como una trampa aromática que ahuyenta a los insectos sin químicos.
Ideal para pieles sensibles y hogares con niños
Una de las grandes ventajas de este remedio es que, al no contener compuestos agresivos, resulta perfecto para quienes tienen piel sensible o buscan opciones más naturales y seguras para proteger a los niños. Así que la próxima vez que prepares una receta con clavo de olor, guarda unos cuantos para crear tu propio escudo antimosquitos. A veces, los mejores aliados están justo donde menos lo esperas… en tu cocina.
