El mundo del séptimo arte sigue de luto. La musa del cine Brigitte Bardot nos abandonaba el pasado 28 de diciembre a sus 91 años. Sin embargo, todo apunta a que la última voluntad de la actriz de El desprecio no se va a realizar. No podrá descansar en La Madrague.
© Getty ImagesLa artista ya manifestó hace tiempo, antes de dar su último adiós, que su petición era ser enterrada en La Madrague, su villa en Saint-Tropez, como indicó a Le Monde: «La Madrague, ante la que desfilan multitudes intentando verme, se convertirá en un museo», manifestó en 2018. Además, señalaba que «a cambio de 2 o 3 euros, que servirán para financiar mi fundación, el público podrá visitar mi casa de pescadores, que se dejará tal y como está». Recordemos que la intérprete de Y Dios creó a la mujer era una amante de los animales y fundó en 1977 la Fundación Brigitte Bardot (Fondation Brigitte Bardot pour la protection et le bien-être des animaux), una organización que aboga contra el maltrato animal.
Una fundación que conmemora el legado del icono francés y que «desea saludar la memoria de una mujer excepcional que lo dio todo por un mundo más respetuoso con los animales», como indica en un comunicado la propia organización. Del mismo modo, tienen muy claro que «la Fundación continuará, más que nunca, llevando a cabo la labor de Brigitte Bardot».
© Getty ImagesPues bien, a pesar de que la estrella del espectáculo lo tenía claro: «Me encanta la idea de la peregrinación, ya que me enterrarán en el jardín… cerca de las tumbas del cementerio de mi mascota», todo apunta a que en los próximos días la actriz será enterrada en el cementerio marino de la localidad del Var, ya que habría modificado sus últimas voluntades para, finalmente, descansar en paz en el panteón familiar, como apunta ICI Provence.
Una vida de película
Brigitte Anne-Marie Bardot tuvo una vida que poco o nada debía envidiar a los personajes que representaba. Procedía de una familia burguesa y, a los 18 años, comenzó su trayectoria en el universo del espectáculo con Le trou normand. En lo que respecta a su vida personal, estuvo casada hasta en cuatro ocasiones: la primera, con Roger Vadim en 1952, director de cine y responsable de dirigirla en el filme Y Dios creó a la mujer (1956).
Una relación que duró cinco años y que fue la antesala de su segundo matrimonio con el actor francés Jacques Charrier. Con él experimentó la maternidad: en 1960 nació su hijo Nicolas-Jacques Charrier. Hay que añadir que su experiencia como madre fue complicada, ya que, como manifestó ella misma en su autobiografía lanzada en 1966, Initiales B.B., expresaba su rechazo a la maternidad: «Miraba mi vientre plano y esbelto en el espejo como a una querida amiga a quien estaba a punto de cerrarle la tapa de un ataúd». De hecho, tras el divorcio, un tribunal otorgó la custodia del niño a su padre tres años después del nacimiento del pequeño.
© Getty ImagesPosteriormente, la estrella del cine dio el «sí, quiero» al millonario Gunter Sachs, con quien protagonizó una boda secreta en Las Vegas y cuya relación finalizó en 1969 tras la aparición de terceras personas. Por último, fue el consejero del partido francés de extrema derecha Bernard d’Ormale quien le robó el corazón y, desde 1992, llevó junto a él una vida tranquila en sus últimos años.
