Su voz se apagó para siempre el 14 de noviembre en unas difíciles circunstancias que están siendo investigadas, pero el recuerdo de Encarnita Polo es eterno, como lo es su legado. Fue una de las artistas más populares de las décadas de los 60 y los 70 gracias a temas como Paco, Paco, Paco y Pepa Bandera, que han acompañado a diferentes generaciones. Además de su talento, su personalidad la convirtió en una persona muy querida entre sus compañeros, que se han reunido la tarde de este martes en la Basílica de La Milagrosa (Madrid) para recordarla en una misa funeral organizada por su única hija, Raquel Waitzman.
La hija de Encarnita Polo, que en estas difíciles semanas ha apostado por la máxima discreción y solo ha hablado mediante un comunicado, ha sido la primera en llegar a la iglesia para ultimar los detalles de la emotiva misa. La elección de la iglesia no ha sido al azar ya que se encuentra en pleno barrio de Chamberí, muy cerca de la casa en la que vivió la artista, que también era muy querida por sus vecinos
"Vamos a recordar a Encarnita con mucha alegría", ha dicho a su llegada Antonio Albella, con el que tenía una relación prácticamente familiar. De hecho, el integrante de Locomía ha explicado que considera a Raquel, la hija de la artista, como su hermana y permanecen en contacto permanente
Una de las amistades que conservaba la cantante de su profesión es José Manuel Parada, quien se mostró devastado por esta pérdida. "No ha sido una muerte normal. Con los años todos nos tenemos que ir, pero de esta manera...", confesó el presentador cuando conoció que su buena amiga había perdió la vida tras ser estrangulada presuntamente por un compañero de la residencia en la que estaba en Ávila
En esta cita cargada de recuerdos y nostalgia, Víctor Sandoval ha explicado que conoció a Encarnita gracias a José Manuel Parada en Radio Nacional. La conexión fue instantánea también con Raquel, a la que acompañó en esta misma iglesia el día de su boda y a quien hoy ha encontrado calmada y tranquila
"Me parece mentira, otra amiga más que no está y de una manera tan triste", ha lamentado Pablo Sebastian, quien ha recordado todas las visitas que le hizo a Encarnita cuando vivía en la misma calle de la iglesia en la que se ha hecho el homenaje. El pianista ha comentado que lo que ha ocurrido "no tiene explicación" y ha pedido que se haga "justicia"