El Movistar Arena de Madrid vivió el domingo una de esas noches que ya forman parte de la historia: el último concierto de Joaquín Sabina. El cantautor se despidió para siempre del público que lo ha acompañado de forma incondicional desde finales de los años 70, haciendo posible que venda más de diez millones de discos. Sus canciones ya no sonarán sobre los escenarios, pero seguirán siendo la banda sonora de diferentes generaciones. Porque su música es eterna, igual que esa voz rasgada que anoche se rompía al decir adiós para comenzar una nueva etapa en la que podrá dedicarse por completo a los suyos. Te contamos a continuación quién forma parte de su círculo íntimo.
© Getty ImagesA pesar de ser muy discreto en cuanto a su vida privada, son varias las ocasiones en las que Sabina ha definido a Jimena Coronado como la mujer que le ha salvado la vida. Una frase breve que resume a la perfección lo que significa para él la fotógrafa peruana, hija del expresidente del Banco Central de Reserva de Perú a la que conoció en Lima en 1994, durante un reportaje para la revista El Comercio en el que ella se encargó de hacer las fotografías para ilustrar la entrevista. Durante la sesión, el cantante le preguntó dónde iba a ir de copas después de trabajar y se acercó al local. Comenzó ahí una relación esporádica que cambió para siempre en 1999.
Cuando el ganador de un Goya terminó de grabar el disco 19 días y 500 noches, uno de los más importantes de su carrera, abrió una carta de Jimena en la que decía que había roto con su pareja de entonces. Casualmente, él también acababa de terminar su romance, así que la llamó para verse. El encuentro tuvo lugar en la plaza Garibaldi de México y desde entonces no se han soltado de la mano. Han sido un equipo en las buenas y también en las malas, como el ictus que Sabina sufrió, su depresión o su aparatosa caída del escenario.
© Getty ImagesEl 29 de junio de 2020 se casaron por sorpresa en el registro civil de la calle Pradillo de Madrid. "En todas mis idas y venidas a los hospitales, incluyendo la última, siempre he pensado: tengo 71 años, si me pasa algo yo quiero que tenga papeles que le den todo tipo de derechos. Y además, cómo la quiero”, contaba el cantante sobre su inesperada boda, en la que sus dos hijas fueron testigos. La ceremonia fue oficiada por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Fue un acto íntimo al que acudieron Joan Manuel Serrat y Candela Tiffón, Fernando León de Aranoa, Luis García Montero y Almudena Grandes e Isabel Oliart, su exmujer y madre de sus hijas.
Reconocido con la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, Sabina ha dicho:"Yo no he sido nunca un padre ejemplar, ni un marido ejemplar, ni un amante ejemplar, pero creo que he sido un amigo leal". Sus hijas, sin embargo, le adoran y son sus mayores fans. Carmela Martínez Oliart forma parte de Tenampa Films y trabaja como directora de producción. De su trayectoria forman parte títulos como Rafaela y su loco mundo, Tótem Loba, Cámera Café, Viaje a alguna parte, Tiempo después, Los del Túnel, Una china en el zapato y Epitafios. Además, es académica en la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas. Rocío, por su parte, es tan discreta que apenas se conocen detalles de su vida, más allá de que escribe poesía, practica yoga y adora la comida japonesa. Ambas son nietas de Alberto Oliart, que fue ministro de Industria con UCD.
© GTRESSabina, que siempre quiso ser torero, tiene entre sus amigas íntimas a Mónica Carillo. La presentadora de los Informativos de Antena 3 ha confesado que nunca pensó que el cantante sería su amigo y quererle tanto. Ahora que se ha despedido de los escenarios le ha escrito unas emotivas palabras que reflejan que es una pieza clave de su vida: "Se va el cantante que gira, pero se queda el compositor, el poeta, el lector empedernido y el fumador sin remedio. Habrá, -hay-, más canciones en el cajón (esperemos que más pronto que tarde vean la luz), pero no habrá más recintos hasta la bandera, ni bombines que no se cansan de esperar un bis al final del repertorio. El directo hace grande al artista pero cada cual es libre de elegir el momento de colgar las botas, si es que la vida -o lo otro- no elige por uno [...] . Larga vida al rey más republicano, al gamberro más justiciero, al triunfador más atlético, al letrado más lenguaraz, a la vieja del visillo de Tirso; al orgullo de todos, empezando por mí".
