Hoy, al filo del mediodía, el barrio de Triana se ha vestido de fiesta para acoger un acontecimiento muy especial: el bautizo de Nicolás, el hijo pequeño de Fran Rivera y Lourdes Montes. El niño, que vino al mundo el pasado 9 de abril, ha recibido el sacramento del bautismo esta mañana en la Real Parroquia de Santa Ana, considerada la catedral de Triana. El templo, el más antiguo de Sevilla, declarado Bien de Interés Cultural, tiene un significado muy especial para la familia Rivera Montes. Allí también fueron bautizados los dos hijos mayores de la pareja, Carmen, en octubre de 2015, y Curro, en julio de 2019, siguiendo una tradición que hoy se ha renovado con emoción y fe con el pequeño Nicolás.
Lourdes y Fran llegaron a la iglesia sevillana acompañados por Tana Rivera. Para esta ocasión, la diseñadora se decantó por un elegante traje de chaqueta de terciopelo, en tono rojo burdeos, una elección sobria y sofisticada para la ceremonia. A su lado, Fran Rivera optó por un conjunto clásico de chaqueta gris, mientras que el pequeño Nicolás, muy despierto, lució el tradicional traje de cristianar, símbolo de la continuidad de las costumbres familiares. Su bautizo ha sido un motivo de celebración, que ha congregado a numerosos familiares y amigos de la pareja.
Tana Rivera, hermana mayor del pequeño Nicolás, escogió un traje de chaqueta en el mismo tono burdeos que Lourdes Montes, combinado con detalles en color teja. Completó su estilismo con unas sandalias de tiras, una elección acorde al clima templado y soleado con el que amaneció la capital hispalense. Tampoco faltó Cayetano Rivera, que acudió con traje oscuro y gafas, reforzando con su presencia en el bautizo de su sobrino la estrecha unión que mantiene con su hermano Fran.
La ceremonia ha sido íntima y familiar, tal y como habían decidido Fran Rivera y Lourdes Montes. Entre ellos, los padrinos del pequeño Nicolás: Paloma Rojas-Marcos, amiga de Lourdes, y el empresario José Luis López, quien llegó acompañado de su esposa, Carmen Mariscal. Desde este momento, ambos asumen el papel de acompañar al niño en su crecimiento, apoyando a los padres en su educación y convirtiéndose en figuras de referencia dentro de la familia. Padre y padrino de Nicolás protagonizaron una escena entrañable a las puertas del templo, demostrando la magnífica relación que mantienen y que se refuerza tras el bautizo del pequeño.
Sibi Montes, con un elegante traje de chaqueta en blanco y negro, y su marido, Mateo Ibáñez, también acudieron al templo religioso donde tuvo lugar la ceremonia. La pareja, que hace unos días bautizó a su hijo, posó a las puertas de la iglesia. Allí, la hermana de Lourdes Montes coincidió con su ex, José Raúl Gracia, el Tato, con quien mantiene una excelente relación. El exdiestro, amigo personal de Fran Rivera, llegó acompañado por su actual pareja, la empresaria texana Kate Kapekas.
Entre los invitados al bautizo de Nicolás Rivera Montes, se dejaron ver la periodista Sandra Aladro, la chef Pepa Muñoz o Lourdes Parejo, esposa de José Manuel Soto, y tía de Lourdes Montes. No faltó tampoco el hijo de José Luis López, quien acudió acompañado, ampliando así la lista de asistentes y aportando un matiz social a la celebración en la iglesia de Santa Ana.
Tras el acto religioso, los invitados se han trasladado a la Hacienda Santa Eufemia, una espectacular casa solariega del siglo XVII situada a escasos minutos de Sevilla. Con vistas a la Vega del Guadalquivir y rodeada de los jardines más bellos del Aljarafe, la finca ofrece un marco histórico y lleno de magia. Sus patios empedrados, antiguas caballerizas y amplios salones climatizados —con capacidad para 350 comensales en interiores y hasta 700 en exteriores— se convertirán en el escenario perfecto para festejar un día tan importante para los Rivera Montes.
Curiosamente, el bautizo de Nicolás llega en un momento de intensas celebraciones familiares. Hace apenas una semana, Sibi Montes, hermana de Lourdes, bautizaba a su hijo Mateo, nacido el pasado 21 de agosto. El acto religioso tuvo lugar en la sevillana iglesia de San Nicolás de Bar y Lourdes Montes, tía del pequeño "Mateíto", como le dicen en familia, deslumbró con su look de ceremonia. Y a finales de julio, el matrimonio asistía al bautizo del primer hijo de Curro Montes, hermano de la diseñadora, en la parroquia San Antonio María Claret de Sevilla.
Hoy, en el popular barrio de Triana, la emoción se ha mezclado con la tradición. El bautizo de Nicolás no ha sido solo un acto religioso, sino también un símbolo de continuidad y arraigo. La iglesia de Santa Ana, con su historia y su estrecho vínculo con la familia Rivera Montes, se convierte en testigo de un nuevo capítulo en la vida de Fran y Lourdes, que tras 14 años juntos, han logrado construir la gran familia con la que siempre soñaron.
























