Mariló Montero ha sido la ganadora de MasterChef Celebrity 10. La presentadora de televisión se ha alzado como triunfadora del concurso tras imponerse en un reñido duelo final a Miguel Torres. El juez Pepe Rodríguez fue el encargado de anunciar el nombre del ganador, en medio de una lluvia de confeti y la emoción desbordada de la vencedora indiscutible del concurso. La exmujer de Carlos Herrera, entre lágrimas, quiso donar los 75.000 euros de premio a la ONG Fundela, la fundación española para el fomento de la investigación de la Esclerosis Lateral Amiotrófica.
© RTVEEn un día tan importante para ella, Montero estuvo acompañada de sus hijos. Rocío Crusset y Alberto Herrera, a quienes dedicó los platos de cada una de las pruebas de la gran final que se disputó en el Palacio de Miramar de San Sebastián en homenaje a Martín Berasategui. El maestro ha cumplido 50 años de genuina dedicación a la gastronomía, una impecable trayectoria que le ha convertido en el cocinero español que atesora más estrellas Michelin.
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© RTVELa propuesta vencedora, elaborada por Mariló, comenzó con un homenaje a la huerta navarra y a su madre, le siguió un solomillo Wellington, que tituló con el nombre de "besos", como símbolo del afecto que siente por sus hijos, y terminó con un postre titulado "estrellas" en recuerdo a sus noches en Sanlúcar. Un menú que sin duda marcó a diferencia y la proclamó vencedora del concurso.
"Me ha encantado y además entregarme a esa emoción, ese sentimiento y lo más emocionante es que esa emoción la hayan compartido mis hijos", decía la flamante campeona mientras se abrazaba a sus hijos, Rocío Crusset y Alberto Herrera, y a su nuera, Blanca Llandres, con quien su hijo contrajo matrimonio hace apenas unas semanas, y no podían contener las lágrimas. "¡Qué fuerte que el premio es mío!", decía todavía sin poder creérselo. "Es un subidón y me viene de maravilla. Es un impulso para la siguiente etapa de la vida".
© RTVEA la gran final no faltaron Tamara Falcó, ganadora de MasterChef Celebrity 4, y el chef peruano Virgilio Martínez, del restaurante Central —considerado el mejor del mundo según la lista The World’s 50 Best Restaurants—, quienes siguieron de cerca un duelo en el que los aspirantes cocinaron como auténticos profesionales.
