El pasado 19 de mayo, durante la presentación en el marco del Festival de Cannes de este ambicioso proyecto, prometían Los Javis que "aún quedan por desvelar algunas sorpresas". Se referían con misterio al reparto que les acompañaría en esta aventura, guardándose aún y en teoría un as en la manga. Y no mentían en absoluto. Anunciaron primero a Penélope Cruz, ahí es nada, y ahora se ha desvelado la participación en su próximo filme de una de las mejores intérpretes que ha dado nunca la meca del cine: Glenn Close.
© Getty ImagesLa estrella de Hollywood es sin duda un fichaje de relumbrón y que ha sorprendido a todos para trabajar en La bola negra, la nueva y esperadísima película que preparan Calvo y Ambrossi. Se trata de la cinta basada en la obra inacaba de 1936 de Federico García Lorca y que ha supuesto para sus directores "el rodaje de nuestras vidas", confesaba el primero recientemente al contar que solo quedan dos semanas para terminar el mismo.
© javviercalvoLa protagonista de títulos tan emblemáticos como Atracción fatal o Las amistades peligrosas se ha desplazado ya a la capital de España, y ella misma lo contaba a través de sus redes sociales con mucho humor. "Saltando a Madrid durante dos días", decía junto a una imagen donde la vemos aparentemente durmiendo en el avión que la traía hasta aquí. "Pip no ha podido seguir el ritmo con su español, así que se ha vuelto para Berlín", comentaba seguidamente.
© glenncloseLa actriz estadounidense, que a sus 78 años mantiene una forma envidiable, se refería así a la ausencia de su adorable mascota en nuestro país. Su perro es un bichón habanero blanco de carácter muy juguetón al que hemos visto con su dueña en algunos festivales, y que, como dice ella, esta vez no ha podido venir al no dominar muy bien el castellano (entiéndase la broma). Se ha quedado el pequeño can en tierras germanas, donde Glenn Close rueda también actualmente una precuela de Los juegos del Hambre titulada Sunrise on the Reaping.
© Getty ImagesUna vez en Madrid, la eterna Cruella de Vil de 101 Dálmatas se inmortalizaba muy cariñosa del brazo de Javier Calvo, dando un tranquilo paseo por las calles al caer la tarde. "Mother is in town" (Madre está en la ciudad), decía en inglés el actor, guionista, productor y director para definir esa imagen que lo dice todo, sobre la química innegable que ya se ha establecido entre ambos. No es de extrañar, teniendo en cuenta la profunda admiración que siente él y millones de personas hacia una de las damas de la interpretación más sobresalientes del planeta.
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