Nadie en Las Ventas podía imaginarse el desenlace de la Corrida de la Hispanidad. Tras una faena memorable en la que cortó dos orejas al cuarto toro, Morante de la Puebla (46 años) sorprendió al público al anunciar su retirada. El matador sevillano dejó a todos sin palabras al cortarse la coleta inesperadamente en este inolvidable 12 de octubre de 2025, 30 años después de tomar la alternativa.
Tras la vuelta al ruedo y los vítores del público, el torero se dirigió al centro del anillo, se tocó la cabeza, y —ante el estupor general— se quitó la coleta, digna señal de su adiós definitivo. No hubo anuncio previo ni despedida organizada: el gesto fue espontáneo y cargado de simbolismo, marcando el fin de una trayectoria única.
Con los ojos llenos de lágrimas y totalmente embargado por la emoción, el diestro protagonizó estas imágenes que ya forman parte de la historia. La plaza reaccionó con una ovación interminable, aplausos y vítores que consiguieron dejarle sin palabras.
Tras una actuación cargada de entrega y arte, el sevillano, con su traje de luces de chenel y oro, no encontró mejor momento para retirarse, después de cortar las últimas dos orejas de su carrera. En este domingo, 12 de octubre, Día de la Hispanidad, se cerró esta etapa para él y, como no podía ser de otra forma, salió a hombros por la Puerta Grande de Las Ventas.
José Antonio Morante Camacho nació en La Puebla del Río, Sevilla, el 2 de octubre de 1979 y de ahí viene su nombre taurino. Desde muy joven mostró una profunda vocación por el toreo, influenciado por la tradición taurina andaluza y su admiración por las grandes figuras clásicas. En 1995 debutó como novillero en Madrid y tomó la alternativa el 29 de junio de 1997 en Burgos, apadrinado por César Rincón y con Fernando Cepeda como testigo.
A lo largo de casi tres décadas de trayectoria, se consolidó como uno de los toreros más carismáticos y singulares de su generación, conocido por su estilo profundamente artístico, su dominio del capote y su capacidad para convertir cada faena en una obra de arte. Morante ha sido un torero de inspiración, temperamento y riesgo, siendo referente de la tauromaquia contemporánea.
Entre sus gestas más recordadas destaca un hecho histórico en el mundo del toreo. En 2023, con la Maestranza de Sevilla rebosante, cortó el primer rabo del siglo XXI a un toro lidiado a pie, logro que no se veía desde hacía más de cinco décadas.
A lo largo de su carrera también vivió momentos de pausa y reflexión, marcados por su sensibilidad y sus crisis personales, que lo llevaron a retirarse temporalmente en varias ocasiones.
Morante de la Puebla recibió numerosos premios y distinciones en reconocimiento de su arte, su personalidad y su aportación al toreo contemporáneo. Entre sus galardones más destacados figuran el Trofeo al Mejor Toreo de Capote y el Trofeo al Triunfador de la Feria de Abril de Sevilla, que ha conquistado en varias ocasiones.
También ha sido distinguido con el Premio Nacional de Tauromaquia, otorgado por el Ministerio de Cultura en 2021, en reconocimiento a su “defensa del arte taurino y su compromiso con la tradición cultural española”. Ha sido galardonado igualmente con premios de prensa y asociaciones taurinas, como el Trofeo Oreja de Oro de RNE, el Trofeo Paquiro de El Cultural o el Trofeo Puerta del Príncipe.
Su toreo, inspirado en el clasicismo sevillano y la búsqueda constante de la belleza, le ha valido ser considerado una de las grandes figuras de la tauromaquia del siglo XXI.