Nunca es tarde para darse el 'sí, quiero'. El décimo conde de Dartmouth, William Legge, con 76 años recién cumplidos, se ha casado con la exmujer de Michael Douglas, Diandra Luker, siete años menor que él (69). La pareja intercambió sus votos matrimoniales en Gibraltar la semana pasada, según ha informado el diario británico Daily Mail.
"Fue una ceremonia pequeña y privada en la oficina de registro de Gibraltar con solo uno o dos invitados", según ha revelado un amigo de la pareja. La que fuera esposa del protagonista de Atracción fatal, Wall Street y La guerra de los Rose se ha convertido en señora de Legge y, por tanto, en nueva condesa de Dartmouth
Su marido William, además de conde, era hermanastro de la princesa Diana de Gales después de que su madre, Raine Spencer, se casara con su padre, John, el octavo conde Spencer. Así, William Legge y Diana compartieron un vínculo familiar cercano, aunque no lazos de sangre. A su vez, este noble británico, que representó a Gibraltar como Eurodiputado en el Parlamento Europeo, posee el título de Vizconde Lewisham y Barón Dartmouth.
Diandra, cuyo apellido de soltera es Luker, se separó de Michael Douglas en 1995, el actor ganador de dos Oscar que actualmente está casado con Catherine Zeta-Jones, con quien celebrará el 18 de noviembre sus bodas de plata. De su matrimonio con Douglas nació Cameron, actor que tuvo problemas legales relacionados con tráfico de drogas. Diandra también es madre de gemelos mediante gestación subrogada con el financiero Zach Bacon III y posee una hija adoptiva llamada Imara. Por su parte, William Legge estuvo casado con la modelo Fiona Campbell y es padre de Gerald Glen, fruto de una relación con la productora Claire Kavanagh.
La productora y coleccionista de arte mantiene desde hace décadas una relación muy estrecha con España, especialmente con Mallorca, isla donde veraneaba desde niña y donde compartió con Michael Douglas la finca de S’Estaca, un paraíso en la sierra de Tramuntana. Tras 23 años de matrimonio, Diandra y Michael se divorciaron en el año 2000 en un proceso mediático y costoso, con un acuerdo económico que obligó a Douglas a pagar aproximadamente 45 millones de dólares a Diandra y a cederle la residencia que compartían en Santa Bárbara, California, y una parte de la finca de Mallorca, que años más tarde el actor terminó comprando. "No era agradable para nadie compartirla", señaló Michael Douglas en 2021.
Con este enlace, Diandra Douglas abre un nuevo capítulo en su vida, ahora con el título de condesa de Dartmouth, ligada a la aristocracia británica.