De la pasarela… al corazón. Bradley Cooper y Gigi Hadid han vuelto a dejar claro que lo suyo no es solo una historia de "paparazzi": es una relación que avanza, se consolida, que brilla… ¡y que marca estilo! La pareja fue vista de la mano durante una concurrida fiesta en Nueva York, uno de los eventos más exclusivos de la Semana de la Moda.
Ella, radiante con un vestido de estampado geométrico, que abrazaba su silueta como un guante de Alta Costura. Él, elegante y discreto, no se separó de su lado en toda la velada. Abrazos, sonrisas cómplices y miradas que hablan sin necesidad de palabras fueron la constante de una noche que nos vuelve a demostrar que se han convertido en una de las parejas más cool de Hollywood.
Ya lo vimos por primera vez cuando en febero del pasado año salían a la luz unas imágenes con las que confirmábamos que su relación iba mucho más allá de la amistad, que rozaba la complicidad y avanzaba hacia el amor. Por ello, en esos meses y entre paseos de la mano llenos de gestos de cariño y risas nerviosas entre ellos, nacía una relación. A su vez, el pasado mes de mayo la modelo celebraba por todo lo alto con una impresionante fiesta llena de lujos y junto a Bradley, su 30º cumpleaños, en la que se le ve plena y feliz.
Hace unos meses, Gigi compartía "Es importante sentirse acompañado y tener a alguien que te apoye en cada paso", demostrando así que etá en una relación llena de calma y tranquilidad, un amor que madura y evoluciona. Además, ambos son padres, Bradley tiene una hija llamada Lea De Seine, de 8 años, con su ex, la modelo Irina Shayk y Gigi a su hija Khai, de 4 años, que tuvo con su ex, Zayn Malik. De esta manera, el pasado mes de julio se hacían eco algunos rumores de que la pareja se plantea casarse y tener hijos en común muy pronto.
Entre celebrities, fotógrafos y luces de neón, Gigi y Bradley se movieron como pez en el agua. Cada gesto, cada mirada, parecían coreografiados con naturalidad: sin poses impostadas, pero con ese brillo que solo tienen las parejas que están en su mejor momento. ¿Estamos ante la historia de amor más inesperada pero fabulosa del año? Todo apunta a que sí. Y como en las mejores películas, la trama de Gigi y Bradley no ha hecho más que comenzar.