La separación de Kiko Rivera e Irene Rosales, que ha sido cordial y sin terceras personas implicadas, pilló a todos por sorpresa. Tras once años de relación, nueve de ellos como marido y mujer, y con dos hijas en común, decidieron tomar caminos por separado. "Esto es un matrimonio que se ha separado y es una cosa de él y mía, y fin. Lo vamos a hacer lo mejor posible por nuestras hijas", declaró la excolaboradora de televisión tras conocerse la noticia. En esta ruptura, sus hijas, Ana (9) y Carlota (7), son la prioridad absoluta, ya que ambos quieren seguir siendo padres presentes pase lo que pase. La influencer lo ha demostrado recientemente con un gesto muy especial hacia ellas.
Irene Rosales siempre ha dejado claro que el motor de su vida es su familia y que nada es más importante para ella que la felicidad de sus niñas. Por ello, en medio del huracán de su separación con Kiko Rivera, se mantiene firme y aprovecha cada momento con ellas. A través de sus redes sociales, la que fuera colaboradora de diversos programas de Telecinco ha mostrado el último gesto de cariño que ha tenido hacia sus hijas. Ha compartido una instantánea en la que aparece una bolsa con la comida de las pequeñas. Sobre uno de los tupper, junto a un batido de fresa, ha dejado una nota sencilla, pero con palabras contundentes que reflejan el amor que siente por ellas.
"Sonríe. El mundo es más bonito contigo", son las primeras palabras que se leen en este post-it de color amarillo, escrito a mano por la creadora de contenido. A continuación, les recuerda lo especiales que son para ella: "Te quiero con locura", acompañado de una carita sonriente. Un precioso gesto de Irene Rosales —quien conoció a Kiko porque iba a participar en uno de sus videoclips y antes de comenzar su relación fueron amigos— hacia sus hijas, pensado para alegrarles el día y hacerlas sonreír al coger su comida.
El pasado 10 de septiembre, a pesar de encontrarse en mitad de su separación, Irene Rosales y Kiko Rivera dejaron a un lado sus diferencias por un motivo muy especial: acompañar a las niñas al colegio en su primer día del nuevo curso escolar. Primero, acudieron al centro escolar de la mayor, donde vimos a Kiko muy cariñoso con su pequeña, a la que abrazó mientras caminaban y charlaban como si nada. Posteriormente, realizaron el mimo paseo pero con Carlota. Unas imágenes con las que confirmaban que su prioridad es el bienestar familiar. "No es de extrañar. Somos padres y lo vamos a ser toda la vida", declaró la exmujer del Dj cuando la prensa le preguntó por esta situación. Tal y como publicó ¡HOLA!, la relación entre ambos es buena y su intención es seguir unidos contra viento y marea, sin entrar en polémicas.
El comunicado de Kiko Rivera a la separación
"Quiero dejar claro algo desde el principio: no voy a sacar partido económico de esta situación, ni voy a acudir a televisión para hablar de mi vida privada. Me ha costado mucho llegar a esta paz mental, y por eso hoy escribiré estas palabras… y después comenzaré a adaptarme a mi nueva vida. Después de 11 años de relación y dos hijas en común, mi mujer y yo hemos decidido separar nuestros caminos. No es fácil. Nunca lo es. Tomar la decisión correcta a veces es lo más difícil, pero también lo más necesario. Y en este caso, lo hacemos con respeto, con gratitud y con la certeza de que lo más importante seguirá siendo lo mismo: nuestras niñas. Ellas son la mayor prueba del amor que hubo, y seguirán siendo el motor que nos una de por vida. Seremos padres siempre, y ese lazo no se rompe con una separación. Hablo desde la madurez de aceptar que a veces soltar es la mejor manera de cuidar lo que realmente importa. Lo vivido queda en el corazón, y lo que viene, aunque diferente, puede ser más sano, más real y más honesto. Hoy cierro un capítulo con gratitud, pero abro otro con esperanza. La vida continúa, y estoy convencido de que lo mejor aún está por llegar. Porque a veces lo que más duele es lo que finalmente nos hace más fuertes. Hoy no empieza un final, empieza una transformación", escribió el hijo de Isabel Pantoja en sus redes sociales.
Su historia de amor
Kiko e Irene se conocieron gracias a un amigo en común. Él se quedó prendado de ella y le propuso participar en uno de sus videoclips, pero tras una cita fallida, decidieron conocerse primero como amigos. Fue en mayo de 2014 cuando ambos dieron un paso al frente e iniciaron su relación. Pronto se convirtieron en una de las parejas del momento, inseparables en cada una de sus apariciones. El 7 de octubre de 2016 se daban el 'sí, quiero' en una de las bodas más esperadas y de la que ¡HOLA! fue testigo de excepción. La pareja se casó en la Hacienda de los Parrales, en Sanlúcar la Mayor (Sevilla) ante más de 300 invitados y con la notable presencia de Isabel Pantoja, que no pudo reprimir su alegría ante un día tan especial para su hijo.