María Pombo, tataranieta de Concha Espina, una de las grandes figuras de la literatura española, ha desatado una oleada de críticas por sus palabras sobre la lectura. Todo comenzó cuando un seguidor comentó la estantería que la influencer mostró con orgullo en redes sociales. "Es preciosa, pero si estuviera llena de libros que se han leído, lo sería mucho más. Ahora solo veo trastos", señaló. María no dudó en responderle, sin imaginar el revuelo que estaba a punto de generarse. "Lo voy a decir: creo que hay que empezar a superar que hay gente a la que no le gusta leer. Y encima no sois mejores porque os guste leer", comenzó diciendo. "A todos nos inculcaron la lectura en algún momento de nuestras vidas, y todos tuvimos que probar, pero hay a gente a la que le gusta y gente a la que no. Tengo una hermana que devora libros, y otra que no se ha leído uno en su vida, creo. Yo estoy en medio", expresó.
© mariapomboSus palabras, lejos de calmar las críticas, las multiplicaron y muchos usuarios destacaron la ironía de que la tataranieta de una de las escritoras más influyentes del siglo XX, que fue candidata al Premio Nobel de Literatura en al menos tres ocasiones, defendiera su falta de pasión por la lectura.
© GTRESAnte la avalancha de mensajes, algunos de ellos muy ofensivos, María volvió a pronunciarse. "Y a esto me refería con que leer no te hace mejor persona", dijo al mostrar los comentarios totalmente inaceptables que recibió tras sus declaraciones. "Leer aporta muchísimo, en eso creo que estamos todos de acuerdo y nunca he dicho lo contrario, pero no te convierte automáticamente en mejor persona ni te hace moralmente superior", insistió.
© GTRES"Hoy he recibido cientos de mensajes de este estilo, de hombres y mujeres, de gente mayor e incluso de gente joven. No me sorprende, estoy acostumbrada, y tampoco me duele. Comparto este tipo de mensajes para subrayar todavía más mi punto, que mucha gente ha preferido malinterpretar o quedarse solo con el titular o con lo que ha visto en una tertulia de televisión, sin entender que yo estaba respondiendo a mensajes de personas que se sentían moralmente por encima al ver que mi estantería no está llena de libros leídos", declaró. "A los que me habéis escrito con cariño recomendándome libros que creéis que, según mis gustos, me pueden gustar, gracias. Os he hecho caso y ya me he comprado esos libros que me han llamado la atención. Lo intentaré y os cuento. PD: Prometo no creerme más que nadie por hacerlo", añadió.
© Getty ImagesMás tarde, la influencer mostró los libros que tenía en su mesilla de noche, como La vida es bonita incluso ahora, de Belén Domínguez; La palabra exacta, de Miguel Ángel Velasco; Tu mentalidad buena suerte, de Álex Rovira; Diario para padres estoicos: 366 meditaciones sobre crianza, amor y educación de los hijos, de Ryan Holiday; Botas de colores para días de lluvia, de sus amigos María G. de Jaime y Tomás Páramo; y Hábitos atómicos, de James Clear. "La manera que tenéis algunos de llevar todo a los extremos, ofenderos tanto y juzgar, pero bueno, cada uno con lo suyo. Diré que he notado poca compresión para lo mucho que leéis ciertas personas. Al principio del vídeo digo 'no me gusta leer', pero sí digo que me gusta leer ciertas cosas que me parecen interesantes. No sé si son libros suficientemente intelectuales para la gente que sí que es amante de la lectura, pero, al fin y al cabo, son libros”, defendió.
