Son fechas difíciles, llenas de recuerdos que se entremezclan con el dolor, pero Carla Goyanes tiene claro que solo hay una opción posible: ser fuerte. Al cumplirse un año de la muerte de su padre, con el que además formaba equipo profesional en su exitoso negocio inmobiliario, ha querido recordado de una manera muy bonita: organizando la primera edición del Torneo de Pádel Memorial Carlos Goyanes en San Pedro de Alcántara, localidad malagueña perteneciente a Marbella.
El empresario fue uno de los impulsores de esta disciplina en la Costa del Sol y para su hija ha sido muy emocionante ver cómo ahora es el deporte de moda de las nuevas generaciones, sobre todo, entre sus hijos y sobrinos, apasionados también de este deporte. Celebrado durante los últimos días, además del gran éxito alcanzado y de los buenos momentos que ha dejado la competición, para ella ha sido reconfortante volver a sentir el apoyo de los que querían a su padre, que eran muchos. De esta iniciativa y de su complicado verano, ha hablado con ¡HOLA!
¿Qué significa para ti poder rendir homenaje a tu padre con este torneo de pádel, justo un año después de su pérdida?
Para mí ha sido un orgullo y un placer organizar este primer torneo de pádel Memorial Carlos Goyanes dirigido a niños y niñas de 5 a 16 años en Marbella. Él fue uno de los grandes impulsores del pádel aquí cuando empezó. Y siempre a sus hijas y nietos les ha transmitido el amor por este deporte. Así que, qué mejor homenaje a su recuerdo que organizar un torneo anual para fomentar el pádel entre los más pequeños.
Este torneo tiene un componente emocional muy fuerte. ¿Ha sido reconfortante revivir su memoria a través del deporte y la unión de tantos seres queridos?
Me ha traído muchos recuerdos. Desde clases que dábamos una vez a la semana cerca de La Moraleja con mis primos y mi padre, partidos y partidos con piques incluidos también con mis hijos mayores... ¡Qué orgulloso estaría de ver lo bien que lo han hecho sus nietos en el torneo! Hasta el pequeño Beltrán que dice que es su torneo preferido. ¡Ha sido más que un éxito! No me esperaba tanto apoyo ni tantos jugadores. ¡69 parejas!
¿Qué enseñanzas o valores de tu padre quisiste reflejar a través de este torneo?
Creo que es muy bueno que los niños hagan deporte a todas las edades y alejarlos de las pantallas. Que aprendan a competir, a gestionar la frustración de perder, la adrenalina cuando ganan, a tener cabeza fría en la pista, a divertirse... El trabajo en equipo, el compañerismo, la amistad. Tengo que decir que ha sido impecable el comportamiento en todas las categorías, con máxima educación y respeto.
¿Te gustaría que este torneo se mantuviera en el tiempo como una forma de celebrar su legado y reunir a quienes le querían?
Sí, me gustaría mantenerlo en el tiempo para que no se pierda su recuerdo, para reunir a amigos y familiares y para seguir fomentando el pádel en su honor en esta ciudad que tanto quería. La idea es el año que viene ampliarlo a mujeres y conseguir patrocinadores para poder hacer mejor regalos a los participantes y premios. Que se animen a participar no solo amigos, sino todos lo que quieran, disfruten con el pádel y estén dispuestos a mantener este nivel de educación y respeto.
¿Cómo estáis tu madre y tú en este verano en el que se cumplen los dos tristes aniversarios?
Con momentos mejores y peores, tratando de mantenernos positivas, disfrutar de los que nos quedan aquí.
Antes de finalizar la entrevista, en un gesto de generosidad, la empresaria ha querido dedicar unas palabras de agradecimiento a todos los que la han ayudado a materializar esta idea y hacerla realidad en poco tiempo: "Quiero agradecer especialmente a Jorge -su marido- que no se separó prácticamente de mí durante las dos intensas jornadas de torneo y estaba atento a lo que necesitara. A Nueva Alcántara Club, su director, su equipo técnico por su colaboración y organización en tiempo récord (apenas 15 días) y dedicación esos días a organizar los grupos, partidos, etc. Agradecida también a Nacho Sanpedro y a Hexagon Cup por cedernos los premios. Agradecida a todos los padres y abuelos que han venido a traer y disfrutar de pádel desde Marbella y Sotogrande, a los voluntarios que han venido a ayudar con los más pequeños y a todos los amigos y familia de mi padre que se han pasado".