Se han cumplido dos años de uno de los crímenes más impactantes y mediáticos de los últimos tiempos. Era agosto de 2023, y la tarde del día 2 nos levantábamos de la siesta veraniega con la noticia de un suceso que conmocionó tanto a la opinión pública española como a los medios internacionales: Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho y nieto del recordado Sancho Gracia, era detenido por la Policía tailandesa después de declararse culpable de la muerte violenta y posterior descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta.
Tras doce meses en prisión preventiva en Koh Samui, con cargos de asesinato, premeditación y ocultación de pruebas, se celebró un juicio que dio la vuelta al mundo, en el que el joven chef fue declarado culpable de asesinato premeditado y condenado a cadena perpetua. Nada más conocerse la sentencia, Daniel era trasladado al módulo de alta seguridad de la prisión de Surat Thani, ubicado a 600 kilómetros al sur de Bangkok, donde permanece desde entonces.
¿Cómo se encuentra actualmente?
El abogado Marcos García-Montes, encargado de su defensa, ha hablado con ¡HOLA! y nos cuenta que la comunicación con su familia y su equipo legal es frecuente y que está tranquilo: "Tiene el pelo cortito, pero está muy bien. Hablo con él todos los lunes y jueves por videoconferencia. También habla con su padre, con un amigo y con un psicólogo amigo que siempre ha estado con él".
Para la familia y los amigos del médico no es sencillo, en cambio, digerir el goteo de noticias que llegan a diario. Así lo confirma Juango Ospina, acusación particular y encargado de representar a la familia Arrieta: "Están muy molestos por cómo se intenta blanquear el crimen, diciendo que Daniel Sancho está bien en la cárcel. Pero ¿cómo va a estar bien? Lo que tendría que decir es: “Estoy en la cárcel meditando el crimen atroz que he cometido y no hay día en el que no pida perdón”.
Yo creo que está ajeno a la realidad y que se cree su propia versión de los hechos; el personaje se ha comido a la persona", lamenta Ospina, quien asegura que el entorno de Edwin sigue sin acostumbrarse a la repercusión del crimen: "Es una familia que no está acostumbrada a estar en el foco de atención mediática y pública".
El dolor de Darling Arrieta
"Este mes de agosto no es fácil para nosotros ni para los amigos de mi hermano. Hace dos años que hablé por última vez con él sin saber que esa sería nuestra última conversación en este plano terrenal", confiesa, por su parte, Darling, hermana de Edwing Arrieta, en conversación con ¡HOLA! en exclusiva. El 2 de agosto de 2023, la familia estaba completamente ajena a cómo iba a cambiar su vida tras el crimen.
"Ya no es lo mismo: no es la misma sonrisa, ya ninguna fecha es igual, todas tienen ese dolor cada día. Estamos con el corazón destrozado", afirma en medio de la nueva batalla legal que ha comenzado.
Nueva batalla legal
Este pasado mes de julio, la defensa de Daniel Sancho presentó un recurso de 480 páginas ante el Tribunal de Apelaciones de Tailandia. El objetivo no es otro que cuestionar la premeditación del crimen, central en la condena original. De aceptarse, podría abrir la puerta a que se anulara la sentencia o se repitiera el juicio y, con ello, a una posible reducción de la condena, que rondaría los cuatro años.
"Lo más importante es que el fiscal no ha recurrido mi recurso y eso quiere decir que está de acuerdo con lo que decimos", mantiene García Montes, que se apoya en las fotos que la Policía hizo de las lesiones de Sancho: "Hay una lesión por detrás, es decir, que supuestamente lo intentó violar, y una lesión de dos mordidas en el antebrazo derecho, donde están marcados dos incisivos, y una lesión en el antebrazo en la parte delantera, porque se puso las manos en la cara para que no lo golpeara".
Por su parte, la familia del doctor considera el recurso un intento de revivir el duelo y afirma que no existe prueba alguna que respalde la inocencia de Sancho, que ya habría reconocido el crimen durante el juicio. "Hemos impugnado al tribunal el recurso y creo que los argumentos pueden ser jurídicamente desestimados.
La defensa viene a pedir unos testigos que podía haber pedido antes y un juicio a puerta abierta cuando ellos, durante la sesión del juicio oral, salían corriendo casi sin dar ningún tipo de declaración. Yo no sé si un tribunal de Tailandia va a recibir con mucha gratitud todas estas pretensiones", mantiene Ospina.
La consecuencia legal en Tailandia por matar y descuartizar a una persona es la pena de muerte, pero la sentencia condenó a Daniel a cadena perpetua. "Se ha salvado porque se le ha aplicado un beneficio por haber colaborado con la investigación y porque siguió las indicaciones de un penalista tailandés de prestigio como es Khun Anan, que, con sentido común, le dijo: “Oiga, mire, aquí en Tailandia le matan por lo que ha hecho, salvo que reconozca que le han pillado con el carrito del helado y colabore en la investigación”. Gracias a que colaboró, ha evitado que hoy tuviera una sentencia de pena de muerte", apunta Ospina. Lo que más preocupa a la familia de Edwin es si Daniel Sancho va a salir de prisión más pronto que tarde.
Para García-Montes, "está muy claro que va a salir de la cárcel. Según el convenio que tiene España con Tailandia, en el plazo de cuatro años tiene que venir a su país. Seguiría cumpliendo aquí la pena impuesta".
Ospina, mucho más conservador, se atreve a dar una cifra: "Puede salir de la cárcel en unos 15 años. Si se confirma la sentencia condenatoria de cadena perpetua, podrá pedir el traslado a España una vez pague la responsabilidad civil, de la que, por cierto, no ha pagado ni un euro. Si llevase ya unos diez o doce años de prisión en Tailandia, podría optar por nuestra legislación y obtener un tercer grado con beneficios penitenciarios. Cuando se produzca esa salida de la cárcel, la familia lo va a llevar muy mal, prefiero ni pensarlo".
Desde aquel 2 de agosto, la vida de Rodolfo Sancho ha estado en pausa para volcarse en el juicio de su hijo, un proceso que le ha obligado a viajar constantemente a Tailandia. A la espera de la última palabra del juez, se ha incorporado de nuevo a la vida pública, y la pasada semana lo veíamos en el estreno de Los futbolísimos 2: el misterio del tesoro pirata, donde confesó estar con ánimo y afirmó: "Hay que seguir. Están el derecho y obligación de seguir".